Una goleada para acabar con las penas

El Racing compens¨® a base de goles cuatro meses de disgustos en El Sardinero. ?se era el tiempo que acumulaba sin vencer en casa. Con un juego repleto de fluidez y convicci¨®n, el Racing cont¨® con la ayuda de un lastimoso Numancia, que careci¨® de un m¨ªnimo de coraje. Empez¨® a mostrarlo tras el intermedio, cuando ya llevaba a cuestas cinco goles.

Acuciado por las urgencias, el equipo de Mu?iz apret¨® desde el inicio las fr¨¢giles clavijas del Numancia. De nuevo con la f¨®rmula de Toni Moral como mediapunta, el Racing hall¨® con facilidad el camino hacia Kellemen. El Numancia concentr¨® el trabajo defensivo sobre Zigic y descuid¨® a Serrano, que marc¨® el primer gol. Cuando no era el interior, era Pereira el que met¨ªa en un l¨ªo a la defensa del equipo soriano. Un disparo de falta de Luccin, con error incluido de Kellemen, supuso el segundo gol. El tercero fue el mejor ejemplo de la inoperancia del Numancia: perdi¨® la pelota en el centro del campo, no supo atajar la reacci¨®n del Racing y dej¨® v¨ªa libre para que Zigic finalizase sin oposici¨®n. As¨ª llegaron tambi¨¦n otros dos, que sirvieron para que el delantero serbio y Serrano se apuntasen un doblete cada uno. El Racing completaba as¨ª un ejercicio de eficacia y superioridad con m¨¢s sencillez de la prevista. Mientras, en el banquillo Pacheta resoplaba y se desga?itaba para poner algo de orden en su equipo, pero apenas hab¨ªa algo a lo que agarrarse. Ni Goiria ni Aranda anduvieron cerca de algo parecido a una oportunidad.

El Racing se fren¨® en la segunda parte, en la que concedi¨® la iniciativa al Numancia. Barkero se dej¨® ver en un par de lanzamientos de falta, los primeros del Numancia en el encuentro, pero eso no le alcanz¨® al conjunto soriano para adecentar el marcador. La que s¨ª estuvo a la altura fue su afici¨®n, que no dej¨® de animar pese a la desventaja. Pacheta les pidi¨® perd¨®n.