Apolog¨ªa de la enfermedad
Utilizar un veh¨ªculo blindado y servirse de escoltas para proteger la vida no acaba con la intolerancia, sino que la fomenta; la instalaci¨®n de medidas de seguridad en las catedrales no resuelve el deseo de apropiarse de lo ajeno, sino que lo alienta; el uso del preservativo no previene el contagio del sida, sino que lo agrava... ?C¨®mo en el siglo XXI el m¨¢ximo responsable de una instituci¨®n tan relevante e influyente como la Iglesia cat¨®lica se atreve a lanzar mensajes cient¨ªficamente rebatibles e irresponsables en cuanto a la protecci¨®n de la salud se refiere? No se debe confundir a la gente introduciendo en el mismo saco las recomendaciones de tipo moral y las evidencias cient¨ªficas, y m¨¢s si el cortejo es con la muerte.
Declaraciones de esta naturaleza podr¨ªan ser calificadas como apolog¨ªa de la enfermedad.- Alejandro A. Prieto Orviz. Gij¨®n, Asturias
En el uso de la libertad de credo se deja al criterio del individuo el creer o dejar de creer en lo que desee, algo l¨®gico y razonable. Lo que no es razonable es la postura de la Iglesia espa?ola, que por desgracia sigue sin estar en el mundo real, en ese en el que la gente tiene ni?os que nacen enfermos y en el que los afortunados avances de la ciencia permiten curarlos gracias a la ingenier¨ªa gen¨¦tica, en ese en el que los enfermos agonizantes encuentran alivio a su dolor gracias a los medios paliativos, en ese en el que se facilita una interrupci¨®n de embarazo de ni?as de nueve a?os que han sido violadas.
?Por qu¨¦ la Iglesia se tiene que oponer a las soluciones que plantea la sociedad real a todo esto? Puestos a hacer comparaciones de trato entre ni?os y linces, a m¨ª se me ocurre otra comparaci¨®n: se podr¨ªa poner en una valla a una persona agonizando con dolor junto a un perro, tambi¨¦n agonizante, al que s¨ª est¨¢ permitido acabar con su sufrimiento, gracias a la bondad humana.
Quiz¨¢ el ir contra lo que realmente preocupa a las personas, sea lo que est¨¦ dejando a la Iglesia en una posici¨®n cada vez m¨¢s alejada de la sociedad, sobre todo de los j¨®venes, por los que pasa su futuro...
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