Al Villarreal se le acumulan los problemas
El M¨¢laga aprovecha la mala noche del conjunto castellonense y Senna se lesiona
El M¨¢laga sab¨ªa que pod¨ªa ser su noche. Aprovech¨® las ausencias, el cansancio y la mirada distra¨ªda del Villarreal, excitado en la Champions, relajado en la Liga. Con un rato de buen juego le alcanz¨® para marcar un gol. Despu¨¦s se tap¨® hasta las cejas y le cundi¨®. Con menos tacto y falto de precisi¨®n, el Villarreal se dej¨® los tres puntos en juego y perdi¨® a Senna, que tuvo que abandonar el terreno de juego por problemas musculares que le impedir¨¢n con toda seguridad estar disponible ante el Arsenal. Senna dej¨® el campo a falta de un cuarto de hora y cuando a Pellegrini ya hab¨ªa efectuado los tres cambios.
El t¨¦cnico dispuso en la alineaci¨®n de todos los centrocampistas sanos que tiene en n¨®mina, con Bruno desplazado al costado izquierdo, una posici¨®n postiza para un organizador, con Senna y Eguren acompa?ando. Tres jugadores casi id¨¦nticos que restaban dinamismo al juego amarillo. La densidad del calendario pasa factura a una plantilla escasa en efectivos y de ilimitadas ambiciones. A¨²n as¨ª, el Villarreal se present¨® reconocible. En sus formas, despliegue y gestos. Imposible cambiar. El conjunto castellonense s¨®lo tiene un patr¨®n y un registro.
La presentaci¨®n y el nudo de los partidos del Villarreal es el mismo en la mayor¨ªa. La suavidad y tacto le define. Ibagaza es un claro exponente de lo que representa el equipo amarillo. Lo que cambia de vez en cuando es la pasi¨®n, intensidad y seriedad con la que afronta los partidos, m¨¢s si la Liga de Campeones est¨¢ a la vista. Sucedi¨® una vez m¨¢s ayer. Cercano en la clasificaci¨®n, la importancia del choque ante el M¨¢laga quedaba fuera de toda duda. El ambiente fr¨ªo de El Madrigal no lo consider¨® as¨ª. No se intu¨ªa ni emoci¨®n ni pasi¨®n. Si el conjunto malacitano ten¨ªa previsto ganar los tres puntos ante un rival de empaque como el Villarreal, anoche era la ocasi¨®n. Identificable tambi¨¦n en su puesta en escena, el M¨¢laga se presenta como un equipo al que hay que prestarle mucha atenci¨®n como visitante. Peligros¨ªsimo. Bien posicionado defensivamente, su l¨ªnea de ataque no tiene desperdicio. Con Adri¨¢n como ¨²nico punta movi¨¦ndose de un lado a otro, el desequilibrio llega en la l¨ªnea de tres que secunda al delantero. Eliseu, Baha y Duda, se mueven en territorios dif¨ªciles de defender: a las espaldas de los centrocampistas.
Lo comprob¨® el Villarreal. Un bal¨®n largo al espacio vac¨ªo, entre el lateral y el central, le lleg¨® a Duda. En su intento desesperado de apagar el fuego, Gonzalo se tir¨® al suelo ante el amague de disparo. La zurda de seda del portugu¨¦s hizo el resto. Despu¨¦s del gol, se escondi¨® el M¨¢laga. Intent¨® cambiar de traje a su equipo Pellegrini con la entrada de Llorente y Guille Franco. Pero no era el d¨ªa del Villarreal.
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