"El ingreso de Rumania en la UE ha complicado las cosas en Moldavia"
El presidente de Moldavia, Vlad¨ªmir Voronin, de 67 a?os, hab¨ªa advertido a la UE de que el ingreso de Rumania complicar¨ªa las relaciones entre ambos pa¨ªses vecinos, unidos en parte por la lengua y la historia comunes. Para evitarlo, solicit¨® que los moldavos pudieran viajar sin visado por Europa. "Pero en Bruselas son duros de mollera", afirma Voronin a EL PA?S, mientras los obreros reemplazan los vidrios de la presidencia, pulverizados en los des¨®rdenes del 7 de abril.
Pregunta. Los manifestantes no parecen entender su pol¨ªtica proeuropea.
Respuesta. Les han metido en la cabeza que los comunistas no son capaces de integrarlos en Europa ni de observar las normas democr¨¢ticas y asegurar la libertad de informaci¨®n. Protesta un 2% o un 3% de la poblaci¨®n mentalizada por los partidos pol¨ªticos, pero la mayor¨ªa apoya nuestra l¨ªnea de integraci¨®n europea.
"A Europa queremos ir por Bruselas, no por Bucarest"
"Nuestro fin estrat¨¦gico en pol¨ªtica interior es unir el pa¨ªs"
P. Usted culpa al profesorado de influir en los j¨®venes. ?C¨®mo?
R. Los profesores de ense?anza media y superior han desempe?ado un papel muy destructivo, sobre todo en Chisinau, porque forman continuadores de (Ion) Antonescu (dictador rumano aliado de Hitler).
P. Los j¨®venes, que antes iban a Rumania sin visado, quieren viajar por Europa como sus vecinos. ?Ha complicado las cosas el ingreso de Rumania en la UE?
R. As¨ª es. Yo ya dije a la Comisi¨®n Europea que al aceptar a Rumania en la UE deber¨ªan haber abolido los visados para los ciudadanos de Moldavia y as¨ª nadie hubiera tomado el pasaporte rumano. La gente necesita ese pasaporte para viajar. Pero en la UE son duros de mollera. Lo plante¨¦ muchas veces y se lo he dicho hoy (por el s¨¢bado) a Javier Solana (alto representante de la pol¨ªtica exterior de la UE). Volveremos a insistir. A Europa, queremos ir por Bruselas, no por Bucarest.
P. ?C¨®mo puede ayudar la UE a estabilizar la situaci¨®n?
R. Hemos cumplido un plan de colaboraci¨®n con la UE de tres a?os y comenzamos a elaborar otro m¨¢s amplio. Espero que ese trabajo, interrumpido durante la campa?a electoral, se reanudar¨¢ en breve y que, cuando cumplamos el nuevo plan, recibiremos el estatus de miembro asociado de la UE.
P. Usted pide a Bruselas que anteponga los valores democr¨¢ticos a la solidaridad con Rumania. ?Qu¨¦ espera?
R. Nada bueno en el futuro pr¨®ximo. Rumania no es consciente de que est¨¢ en la UE y de que hay que observar algunas reglas. Rumania no puede renunciar a sus ansias expansionistas, y hasta ahora se niega a firmar el Tratado de Fronteras y el de relaciones interestatales con nosotros.
P. ?C¨®mo influye la situaci¨®n aqu¨ª en los separatistas del Transdni¨¦ster?
R. Negativamente, pero seguiremos conversando con ellos. Nuestro fin estrat¨¦gico en pol¨ªtica interior es unir el pa¨ªs.
P. ?La reunificaci¨®n est¨¢ m¨¢s cerca o m¨¢s lejos que antes?
R. M¨¢s cerca, porque nosotros no hemos derramado sangre y porque 505 empresas, pr¨¢cticamente todas las del Transdni¨¦ster, se han registrado en Moldavia, y cerca de 350.000 residentes en el Transdni¨¦ster recibieron pasaportes moldavos, y aqu¨ª vienen los estudiantes y miles de personas a trabajar todos los d¨ªas. Podr¨ªamos hacer m¨¢s, pero ellos se resisten.
P. ?Usted se enorgullec¨ªa de no haber reprimido una manifestaci¨®n en 1989 como ministro del Interior en la Moldavia sovi¨¦tica?
R. Ni entonces, ni en 2002, cuando la oposici¨®n pas¨® seis meses protestando, ni ahora. Si lo hubiera hecho, hubieran logrado su objetivo. Si hubi¨¦ramos dado fusiles y orden de disparar a las piernas a chicos inexpertos y de la misma edad que los atacantes se hubieran echado a temblar, y sabe Dios ad¨®nde hubieran apuntado. Hay m¨¢quinas especiales de agua a presi¨®n, pero no las tenemos.
P. ?D¨®nde estuvo durante el ataque?
R. Aqu¨ª, en el Parlamento. Mi escolta no permiti¨® que tocaran mi despacho. Cuando destrozaron los cristales y se produjeron corrientes de aire me traslad¨¦ al Gobierno. A ellos no les interesaba el resultado de las elecciones. El problema no es la falsificaci¨®n. Quer¨ªan aprovechar el momento y organizar una de esas operaciones codificadas como Revoluci¨®n de Colores. El mismo escenario que en Belgrado, en Tbilisi, en Bishkek y en Kiev. Aqu¨ª, en la entrada, fotografiamos a un yugoslavo con documentos de una instituci¨®n norteamericana. El 7 de abril hab¨ªa nueve personas de Serbia que dirig¨ªan los acontecimientos y agentes de los servicios de Seguridad de Rumania. Lo tenemos todo filmado y podemos identificar las caras de todas las fieras que pegaron a la polic¨ªa. Los detendremos y los procesaremos. Fue pillaje. Se llevaron la caja de la tesorer¨ªa y la polic¨ªa encontr¨® muebles del Parlamento en 18 viviendas.
P. Moldavia es un pa¨ªs fr¨¢gil que usted quiere consolidar como Estado neutral. ?Pasa por aqu¨ª la confrontaci¨®n entre Rusia y la OTAN?
R. Le dir¨¦ tres cosas. Ucrania quiere entrar en la OTAN con todas sus fuerzas. Rusia se niega porque distorsiona todo su equilibrio estrat¨¦gico y EE UU ha establecido dos bases militares en Rumania. Y nosotros nos quedamos como en una bolsa entre todos ellos. Y vea por qu¨¦ no se resuelve el problema de los del Transdni¨¦ster. No porque Voronin no les d¨¦ derechos. Yo mismo soy de all¨ª. Ni porque no queramos estar juntos, sino porque Rusia mantiene a ese cabezota de (Igor) Smirnov (el l¨ªder del Transdni¨¦ster), que cumple sus ¨®rdenes. Mantiene a todos los ministros, que son oficiales en activo del Servicio de Seguridad del Estado (de Rusia), y la cuesti¨®n no se resolver¨¢ mientras Rusia no resuelva el acuerdo de armas convencionales y de los flancos y de las bases norteamericanas que controlan el mar Negro.
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