Los residentes de la UE, esc¨¦pticos ante las elecciones
S¨®lo la quinta parte de los afincados en Alicante votar¨¢ el 7 de junio
Con cierta indiferencia y apat¨ªa aguarda la nutrida comunidad europea residente en Alicante las elecciones del pr¨®ximo 7 de junio. Algunos se sienten v¨ªctimas de los abusos urban¨ªsticos y consideran que estas elecciones servir¨¢n para frenar el urbanismo depredador, otros, la mayor¨ªa, se muestran m¨¢s bien incr¨¦dulos. Una prueba de ello es que solo una quinta parte de los ciudadanos de los 27 pa¨ªses residentes en Alicante han pedido participar en estos comicios.
Seg¨²n la Subdelegaci¨®n del Gobierno, del censo de 262.497 europeos censados han pedido por escrito su derecho a voto 53.110. Los extranjeros censados recibieron una carta en la que se les informaba que para poder participar deb¨ªan manifestar por escrito este inter¨¦s. El censo electoral de Alicante para estas pr¨®ximas elecciones est¨¢ integrado por 1.255.335 personas, incluidos los 19.244 alicantinos que residen habitualmente en el extranjero.
Sin embargo, los residentes afrontan este proceso electoral con cierta incredulidad. Thomas J. es checo y tiene 31 a?os. Trabaj¨® en unos astilleros en Vigo, luego fue a Huelva, a la campa?a de la fresa. Ahora es camarero en D¨¦nia. Terry Doyle, 66 a?os, brit¨¢nico, jubilado, ex empleado de banca. Propietario de un chal¨¦ en Benissa. Dos biograf¨ªas diferentes, dos formas distintas de entender Europa y el inminente proceso electoral.
Hace una d¨¦cada, cuando Thomas sali¨® de su pueblo natal cercano a Praga - "all¨ª las cosas nunca estuvieron demasiado bien, al menos no como aqu¨ª"-, la Rep¨²blica Checa no hab¨ªa ingresado en la Uni¨®n Europea. Lo hizo en 2004, mientras Thomas ya hab¨ªa vivido en Amberes, Gante y Dubl¨ªn. As¨ª que parad¨®jicamente este aut¨¦ntico ciudadano de Europa no es demasiado consciente de sus derechos como votante checo al Parlamento de Estrasburgo: "Es verdad que ahora la gente de mi pa¨ªs puede votar, pero no s¨¦ si servir¨¢ para algo", dice.
En cambio, Terry Doyle se sabe de memoria la estructura burocr¨¢tica de la Uni¨®n. Conoce cada instituci¨®n, cada foro, cada documento porque en 2001 se sinti¨® v¨ªctima de un abuso urban¨ªstico despu¨¦s de que un PAI que afect¨® a su chal¨¦ le obligara a pagar exorbitantes cargas de urbanizaci¨®n. Desde entonces, Doyle y otros muchos residentes ingleses han luchado para que Bruselas atajara "las injusticias de la Generalitat en el planeamiento de nuestro territorio".
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