Lamela se escuda en los t¨¦cnicos y defiende su denuncia contra Montes

Un inmigrante, sorprendido ayer por la concentraci¨®n con pancartas a las puertas de los juzgados madrile?os de Plaza de Castilla, pregunt¨® qu¨¦ pasaba. "Un pol¨ªtico dijo que un m¨¦dico de la sanidad p¨²blica mataba a la gente, era mentira y ahora hay un juicio contra ¨¦l", le respondi¨® un se?or de mediana edad, tambi¨¦n observador de la escena. Un sencillo resumen del caso Legan¨¦s. El pol¨ªtico es el ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid Manuel Lamela. El m¨¦dico, Luis Montes, ex jefe de urgencias del Hospital Severo Ochoa de Legan¨¦s. Ambos estaban en Plaza de Castilla, pero esta vez el investigado era Lamela. "Es de justicia que declaren las autoridades sanitarias madrile?as", se congratul¨® Montes, acompa?ado de un centenar de simpatizantes. "Igual que nosotros tuvimos que ir cada 15 d¨ªas a los juzgados durante 2007".

Montes acudi¨® a la puertas del juzgado junto a un centenar de simpatizantes

Lamela sali¨® tranquilo del sal¨®n de actos de los juzgados, donde se celebr¨® la declaraci¨®n durante casi una hora y media, y expres¨® que todo hab¨ªa ido "muy bien". "No tengo por qu¨¦ defender mi inocencia", dijo a los periodistas. "?Soy culpable de algo?".

Seis m¨¦dicos

Los seis m¨¦dicos que elaboraron el informe que sirvi¨® de base para la imputaci¨®n de Luis Montes -integrantes de la llamada comisi¨®n Lamela- desfilaron a lo largo de todo el d¨ªa ante Coro Cill¨¢n, la magistrada del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 43. Eran los jefes de servicio de oncolog¨ªa de La Paz y del 12 de Octubre, el jefe de pediatr¨ªa de Alcorc¨®n, el jefe de servicio de anestesia del Cl¨ªnico San Carlos, una psiquiatra del Ram¨®n y Cajal y un inspector.

Manuel Lamela declin¨® hacer declaraciones. Dijo que en la hemeroteca estaba bien clara su posici¨®n. "Yo tampoco tengo nada nuevo que a?adir", se?al¨® el onc¨®logo Hern¨¢n Cort¨¦s-Funes. "Estoy convencido de lo que hice. Analizamos hechos objetivos, vimos ciertas cosas y las probamos. Eran casos muy claros. Cuando era dudoso lo dijimos. ?El porqu¨¦ de esta querella? Ser¨¢ af¨¢n de notoriedad. Yo qu¨¦ s¨¦". Los m¨¦dicos insistieron en que se hab¨ªan limitado a aplicar criterios t¨¦cnicos.

Los supuestos casos "muy claros" de irregularidades en las sedaciones a los enfermos terminales quedaron en nada. El procedimiento judicial contra Montes fue archivado sin menci¨®n a mala praxis alguna. Una vez concluido, Montes y su ex compa?ero en el Severo Ochoa Miguel ?ngel L¨®pez Varas se querellaron por denuncia falsa y falsedad contra Lamela y los seis m¨¦dicos. Acusan al ex consejero de Esperanza Aguirre de fabricar un caso en contra de la evidencia emp¨ªrica, de sus propios inspectores -que en 2003 hab¨ªan descartado la mala praxis-, y de un informe de 2005, elaborado tras la denuncia an¨®nima que dio origen al caso, que afirmaba que del examen de las historias cl¨ªnicas no pod¨ªan extraerse conclusiones v¨¢lidas. Tras esta ¨²ltima investigaci¨®n, Manuel Lamela nombr¨® a dedo un comit¨¦ de expertos -los ahora querellados- que concluyeron que en 73 casos la sedaci¨®n "fue realizada fuera de la lex artis".

"Lamela ha defendido su actuaci¨®n escud¨¢ndose en el informe de sus t¨¦cnicos", se?ala la abogada de Luis Montes, Mar¨ªa Jes¨²s D¨ªaz Veiga. "Y ha reconocido que s¨®lo le importaban las conclusiones, que casualmente fueron las que ¨¦l quer¨ªa, y no el m¨¦todo utilizado por su comit¨¦ de expertos. Esto es muy relevante, porque demuestra que la ¨²nica intenci¨®n era incriminar. Las declaraciones de los querellados han dejado claro que hubo un grave problema de metodolog¨ªa. Las historias cl¨ªnicas ten¨ªan problemas de legibilidad, faltaba informaci¨®n y los inspectores anteriores hab¨ªan determinado que no se pod¨ªan sacar conclusiones definitivas. Sin embargo, estos m¨¦dicos, sin conocimiento de c¨®mo se trabaja en las urgencias y sin entrevistar a los implicados, se aventuraron a hacer acusaciones grav¨ªsimas estudiando en un mes 169 historias, algunas de 300 y 400 folios".

La letrada asegura que los m¨¦dicos se contradijeron ayer. "No han sabido decir ni cu¨¢ndo se reun¨ªan. Unos aseguran que pidieron peritos porque las historias eran ilegibles y otros, que se le¨ªan bien. Fue una chapuza hecha con prisa porque, como han reconocido, el caso era medi¨¢tico".