"El movimiento neonazi est¨¢ en su mejor momento"

No se llama Antonio Salas pero el periodista utiliza este seud¨®nimo tras haberse infiltrado entre los cabezas rapadas espa?oles para hacer un reportaje. Acaba de declarar en el juicio contra 15 supuestos miembros de la banda neonazi Hammerskin Espa?a, porque durante su investigaci¨®n, que fue clave para el proceso, conoci¨® a algunos de los acusados. Era el testigo protegido 0304. Celoso de mantener su identidad oculta, contesta a las preguntas por correo electr¨®nico.

Pregunta. ?Ha sufrido amenazas desde que se inici¨® el juicio?

Respuesta. Recibo amenazas desde 2002, cuando se emiti¨® la primera versi¨®n de mi reportaje. Pero unos d¨ªas antes del juicio l¨®gicamente el odio de los skins se multiplic¨®. Seg¨²n pude averiguar, gracias a dos skingirls, hace unos meses estaban recaudando dinero para contratar un sicario que evitase mi declaraci¨®n.

"Los nazis ped¨ªan dinero para que un sicario evitase mi declaraci¨®n"

P. Pero al final se sent¨® durante tres horas a escasos metros de los acusados...

R. Al principio estaba un poco tenso. Sab¨ªa que sus abogados intentar¨ªan desacreditar mi investigaci¨®n para defender a sus clientes. Por eso prefer¨ª remitirme exclusivamente a lo que est¨¢ grabado en Diario de un skin [t¨ªtulo del reportaje y del libro surgidos de su trabajo]. Pero volver a sentarme en la misma sala que mis antiguos camaradas y percibir su odio a trav¨¦s de la mampara que nos separaba no fue agradable.

P. ?C¨®mo se vive siendo miembro de un grupo neonazi?

R. Con violencia. La violencia impregna cada minuto de tu d¨ªa. En el gimnasio, en las gradas, en los conciertos. Tu forma de vestir, la m¨²sica que escuchas, las arengas pol¨ªticas que memorizas. Todo en la vida de un skinhead neonazi irradia violencia.

P. ?Son conscientes de la posible ilegalidad de lo que hacen?

R. Los skins odian a los polic¨ªas y ser detenidos. Por eso intentan mimetizar sus actividades con todo tipo de claves. La cruz c¨¦ltica sustituye a la esv¨¢stica tradicional, la vestimenta casual (ropa normal) a la est¨¦tica skinhead y las claves num¨¦ricas (88, 14) a los saludos nazis. Esto evidencia los intentos por mantener clandestinas sus actividades. Saben que lo que hacen no est¨¢ bien.

P. ?Cu¨¢les son sus fines?

R.

Los neonazis aspiran a conseguir un IV Reich en Europa. Los skinheads s¨®lo son la punta del iceberg. Existen partidos pol¨ªticos, distribuidoras discogr¨¢ficas, asociaciones culturales, que intentan utilizar el descontento de muchos europeos con la inmigraci¨®n ilegal, el paro y la crisis para buscar ese poder pol¨ªtico.

P. Debido a otra investigaci¨®n, usted todav¨ªa mantiene contacto con algunos de estos grupos. ?C¨®mo ve su futuro en Espa?a?

R. El movimiento neonazi ha cambiado mucho en los ¨²ltimos cuatro a?os. Est¨¢ en su mejor momento desde la muerte de Franco. Despu¨¦s de Hammerskin van a ser juzgadas otras organizaciones de neonazis como Blood & Honour. Distribuidoras bibliogr¨¢ficas y librer¨ªas revisionistas, como Kalki o Europa, tambi¨¦n est¨¢n en procesos judiciales. Creo que hay muchos ojos puestos en este juicio porque podr¨ªa sentar un precedente a escala europea. Ahora m¨¢s que nunca debemos estar muy atentos de quienes intentan convertir las diferencias raciales, el paro o la crisis en una plataforma pol¨ªtica. Hitler hizo exactamente eso entre la Primera y la Segunda Guerra Mundial.