El dinero m¨®vil se extiende en ?frica por la falta de oficinas bancarias
Las operadoras que ofrecen servicios financieros se han duplicado en un a?o en los pa¨ªses en desarrollo
El mayor banco de Kenya es un tel¨¦fono. M-Pesa, el servicio de la operador Safaricom permite recibir y enviar dinero a trav¨¦s del m¨®vil. Una bendici¨®n en un pa¨ªs donde s¨®lo tres de cada diez personas tiene acceso a los servicios bancarios b¨¢sicos.
Soluciones similares a M-Pesa, que en un a?o ha crecido el 200%, se han extendido por Zambia, Tanzania, Sur¨¢frica, Filipinas, Pakist¨¢n, Afganist¨¢n... 70 pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, principalmente de ?frica, Asia y Latinoam¨¦rica. Si el a?o pasado se desplegaron 54 servicios de dinero m¨®vil, a final de a?o ser¨¢n 120.
La pasada semana se reunieron en Barcelona las empresas dedicadas al mercado incipiente del dinero m¨®vil, la GSM MMU. La anterior, y primera, fue el pasado a?o en El Cairo. La gran cuesti¨®n: ?Funcionar¨¢? Nadie tiene suficiente experiencia y, desde luego, la del mundo desarrollado no vale. El servicio viene a remediar la falta de oficinas bancarias en zonas rurales (el 70% de la poblaci¨®n africana), y a dar servicio a la gente que vive con menos de dos d¨®lares al d¨ªa.
S¨®lo tres de cada diez kenianos tiene acceso a servicios bancarios b¨¢sicos, pero cuatro de cada diez s¨ª que tienen un m¨®vil. Y en los pr¨®ximos a?os seguir¨¢ creciendo la penetraci¨®n del m¨®vil en ?frica (ahora es del 49% y en 2012 ser¨¢ del 60%).
Seis millones de clientes
Aunque a ojos occidentales parezca una cifra baja, es un fen¨®meno frente a la penetraci¨®n de servicios m¨¢s b¨¢sicos. En la presentaci¨®n de la reuni¨®n de Barcelona, la periodista Siki Mgabadeli explicaba: "Hace unos d¨ªas me llam¨® feliz mi madre porque hab¨ªa llegado la luz el¨¦ctrica al pueblo. Su m¨®vil, sin embargo, lo tiene desde 1999".
M-Pesa, de la operadora Safaricom, filial de Vodafone, en dos a?os ha captado seis millones de clientes, m¨¢s que la poblaci¨®n bancaria del pa¨ªs. M-Pesa le da a Safaricom el 4,1% de sus ingresos (0,6% el a?o anterior).
Los participantes de la cumbre barcelonesa, principalmente operadoras, destacaron que la expansi¨®n de estas experiencias dependen de las barreras regulatorias de cada pa¨ªs.
El ¨¦xito de M-Pesa en Kenya y de varios operadoras en Filipinas ha animado a muchos otros a extender servicios financieros similares en pa¨ªses en desarrollo. En todos los casos, la operadora es garante del movimiento del dinero, sin necesidad de un banco o cuenta corriente. De esta forma el cliente evita trasladarse a la oficina m¨¢s cercana (a menudo a decenas de kil¨®metros) o darle el dinero a un taxista, sistema m¨¢s habitual, barato y arriesgado. No s¨®lo es cuesti¨®n de tiempo, el dinero m¨®vil tiene menos comisiones que la banca y sin un l¨ªmite de dinero transferido, pensando en micropagos, caracter¨ªsticas que hacen que en Filipinas un 16% de los clientes de este sistema hayan abandonado los servicios bancarios.
La estrategia de captaci¨®n es la tradicional: personas que recorren los pueblos para captar al cliente del m¨®vil y convencerle de que no necesita cuenta bancaria para enviar o recibir dinero; que su tel¨¦fono lo hace antes y m¨¢s barato.
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