La Catalu?a taurina existe

Har¨¢ cosa de un mes, en la fiesta mayor de Santpedor (Bages), durante el fin de semana hubo tres sueltas de reses bravas. Como cada a?o. El viernes que viene y hasta el 19 de julio, los vecinos de Santa B¨¤rbara (Montsi¨¤) tendr¨¢n cada d¨ªa, excepto el domingo 12, un acto con astados: ya sean tardes de vaquillas, toros embolados o bous caplla?ats. Algunos d¨ªas coincidir¨¢n con las fiestas de Jes¨²s (al lado de Tortosa), en cuya plaza del 14 al 18 de julio habr¨¢ toros de la "prestigiosa ganader¨ªa de Pere Fumad¨®, Lo Charnego", seg¨²n reza en la propaganda.

?Es conocido a que en Catalu?a hay cuatro ganader¨ªas taurinas? ?Y que la Monumental no es la ¨²nica plaza de Catalu?a, sino que tambi¨¦n hay cosos fijos en Tarragona y en Olot? ?Que en decenas de pueblos de Catalu?a, m¨¢s all¨¢ de Cardona, no faltan en sus fiestas mayores encierros y corridas, los populares correbous? ?Es Catalu?a antitaurina?

Este dilema hamletiano parece atormentar a algunos catalanes al coincidir esta tarde el hist¨®rico encierro de Jos¨¦ Tom¨¢s con seis toros en la Monumental de Barcelona, su plaza talism¨¢n, lo que sin duda constituye el acontecimiento taurino del a?o, con la entrada en el Parlament de una iniciativa legislativa popular (ILP) para prohibir los toros en Catalu?a. La plataforma Prou! present¨® en la C¨¢mara 180.000 firmas. El diestro de Galapagar (Madrid) agot¨® las entradas, 19.000 localidades, en s¨®lo 50 minutos, y en Internet la reventa alcanza los 3.000 euros.

"Los diputados no pueden hacer o¨ªdos sordos a lo que opinan la mayor¨ªa de los catalanes", afirm¨® Jennifer Berengueras, miembro de la promotora. ?Es ¨¦sa la voluntad del pueblo? Que se lo pregunten a los habitantes de Cardona (Bages), que mat¨® su ¨²ltimo toro en 1990, en cumplimiento de la ley de protecci¨®n de los animales que s¨®lo permite corridas con muerte en las plazas fijas, pero que sigue manteniendo el correbou en su ADN. La disyuntiva es tal que el PSC y CiU sopesan dar libertad de voto a sus diputados en la propuesta, porque en ambas bancadas hay partidarios de las actividades taurinas.

Pese a que taurinos tan renombrados y autorizados como Rosa Gil, due?a de Casa Leopoldo, mantienen: "A la fiesta no hace falta que la maten porque se muere sola", nadie -ni ella- m¨ªnimamente informado pone en duda que se trata de una afici¨®n de gran arraigo, tambi¨¦n en Catalu?a, mal que les pese a algunos. Gil recuerda que Barcelona, pese a haber sido declarada ciudad antitaurina por el Ayuntamiento hace cinco a?os, lleg¨® a ser la capital taurina del mundo, parafraseando a Salvador Boix, cr¨ªtico taurino y hoy apoderado de Jos¨¦ Tom¨¢s (v¨¦ase EL PA?S del 5 de abril de 2004). Entre 1914 y 1923 funcionaban a pleno rendimiento tres plazas de primera categor¨ªa -la Monumental, las Arenas y el Tor¨ªn, en la Barceloneta, derribada-, hasta que el turismo y El Cordob¨¦s cambiaron el mundo de la tauromaquia, en Barcelona y en todas partes: la decadencia a la que alude la restauradora.

As¨ª es que no hay que confundir las cosas ni limitar el debate a la capital catalana. La Diputaci¨®n de Tarragona, controlada por CiU, est¨¢ renovando la plaza de toros de la ciudad, con aforo para 8.000 personas, con una inversi¨®n de 24 millones de euros. Y en Olot (Garrotxa), que puede presumir de tener el segundo coso taurino m¨¢s antiguo de Espa?a, construido a mediados del siglo XIX, los propietarios de la plaza est¨¢n en pugna judicial con el Ayuntamiento, que est¨¢ incumpliendo el acuerdo sobre el uso p¨²blico de la instalaci¨®n a cambio de mantener festejos taurinos.

Las ¨²ltimas plazas que se echaron al suelo en Catalu?a fueron las de Lloret (Selva) y Girona, derribadas en 2006 y 2005, respectivamente. El coso de Figueres (Alt Empord¨¤) sufre la misma suerte que la plaza de las Arenas: transformaci¨®n en un centro l¨²dico-comercial, s¨®lo se salva la fachada.

La afici¨®n a la tauromaquia se extiende por todo el territorio, como lo demuestran las numeros¨ªsimas localidades, de norte a sur, que programan actos con reses bravas desde tiempos inmemoriales como parte de la cultura catalana, que es en realidad mediterr¨¢nea. Cardona, Santpedor, Santa B¨¤rbara y Jes¨²s son s¨®lo cuatro ejemplos. Hay tambi¨¦n festejos en Alcanar y Amposta (Montsi¨¤), Roquetes y L'Ampolla (Baix Ebre). Y en Roses (Alt Empord¨¤), Torroella de Montgr¨ª (Baix Empord¨¤), Vidreres (Selva), Badalona (Barcelon¨¨s) y Vilanova i la Geltr¨² (Garraf). Basta con echar un vistazo a la web bouscatalunya.forogeneral.es.

Los festejos tienen especial arraigo en Tarragona y las tierras del Ebro, donde hay tres ganader¨ªas. S¨ª, s¨ª, con toros bravos, con encastes Domecq. Dos en Alfara de Carles, las de Jos¨¦ Mur y Rogelio Mart¨ª, y la tercera en Ports de Beseit, la de Lo Charnego, como le gusta que le llamen a Pere Fumad¨®, aseguran quienes lo conocen bien.