"En ocasiones uno tiene que dar morfina sin miedo"
Baja del taxi sonriente, relajado pese al agotamiento propio de un d¨ªa de promoci¨®n. La copa de vino y el aperitivo ayudan a ver las cosas de otra manera. Nuno Lobo Antunes (Lisboa, 1954) tiene una mirada azul muy serena, que inspira confianza. Esta ¨²ltima se la gan¨® de sus pacientes en el hospital Memorial de Nueva York, donde ejerci¨® 10 a?os de onc¨®logo pedi¨¢trico. De las historias all¨ª vividas se ha "liberado" en un libro que presenta ahora en castellano: Lo siento mucho.
El m¨¦dico metido a escritor va en mangas de camisa, muy informal. Poco rastro han dejado los a?os de EE UU sobre su car¨¢cter latino, asegura. Lobo Antunes disfrut¨® de una carrera de ¨¦xito al otro lado del Atl¨¢ntico y volvi¨® a su tierra "por amor". Rosa y Ana, dos preciosidades de tres y cinco a?os (saca el port¨¢til para ense?arlas), son el fruto de su regreso.
Relatar sus vivencias como onc¨®logo ha sido para el escritor como un "exorcismo"
En su primera incursi¨®n en la literatura, Lobo Antunes ha tenido que afrontar el hecho de compartir los dos apellidos con Ant¨®nio, escritor consagrado y candidato al Nobel de Literatura en varias ocasiones. Frente al salpic¨®n de marisco se pincela una personalidad sentimental, c¨®mica y algo vanidosa. "Estoy muy orgulloso de haber tenido coraje para escribir siendo mi hermano quien es". No le gustan las comparaciones, pero da carpetazo al tema: "Ant¨®nio es como Stravinski y yo, como Julio Iglesias".
No se habla m¨¢s del hermano, y s¨ª de c¨®mo se siente al publicar sus virtudes y sus flaquezas, la b¨²squeda del valor necesario para afrontar cada d¨ªa los dramas de la enfermedad. Escribir el libro ha sido como un "exorcismo", explica con grandes pausas, "los fantasmas me visitaban pero ya no me persiguen m¨¢s". Lo siento era algo que el m¨¦dico ten¨ªa que repetir demasiado a menudo. "En EE UU es arriesgado tocar, pero en el fondo todos necesitamos que nos reconforten. Yo trataba de transmitirles 'yo siento lo que t¨² sientes; si t¨² me das un poco de tu dolor, yo lo asumo y t¨² est¨¢s mejor".
Las historias del libro derrochan vida, pero sobre todo muerte. Una de las m¨¢s estremecedoras es la de Simao, de 15 a?os, que decidi¨® abandonar la quimioterapia para disfrutar de sus ¨²ltimos d¨ªas en paz junto a su madre. "En las enfermedades cr¨®nicas el m¨¦dico tiene que ser compa?ero". Este cat¨®lico tiene sus convicciones muy claras. "La medicina no se destina s¨®lo a curar, sino a disminuir el sufrimiento, y puede que eso signifique acabar con la vida, pero yo tengo claro que en ocasiones uno tiene que dar morfina sin miedo a lo que pueda suceder".
El optimismo llega al tiempo de los postres caseros. La experiencia en EE UU le ha hecho "mejor persona, m¨¢s tolerante, que sabe poner sus prioridades donde debe". Despu¨¦s de a?os viendo a gente tan enferma, el m¨¦dico dice haber aprendido la lecci¨®n m¨¢s importante: "La vida es demasiado bonita. Si me enfado, siempre me pregunto: ?merece la pena?".
Es muy f¨¢cil conversar con Antunes y la sobremesa se hace corta. S¨®lo queda la misi¨®n de aclarar un malentendido: aunque le gusta la traducci¨®n al espa?ol, en portugu¨¦s el t¨ªtulo es m¨¢s rico: Sinto muito es, aparte de una disculpa, "siento mucho". "Es una pena", dice. Al menos los lectores ya lo saben, Lobo Antunes ha plasmado en este libro lo mucho que siente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.