EMMA

Si zapeas ves menos, pero te entretienes m¨¢s. Esta ¨²ltima madrugada decid¨ª hacerlo y me encontr¨¦ nadando entre dos irrealidades; una hab¨ªa sido realidad, ocurri¨® en Espa?a, y la otra pasaba en Marte, lejos de nosotros pero sobre todo lejos de la realidad. La irrealidad que hab¨ªa sido realidad la emit¨ªa el canal de cine espa?ol en Digital + y era Solos en la madrugada, la pel¨ªcula que Jos¨¦ Luis Garci hizo en 1978 cuando a¨²n hab¨ªa polic¨ªas grises dentro de los estudios de radio. Y la irrealidad marciana ocurr¨ªa en alg¨²n lugar de EEUU, pero se llama Life on Mars, es una serie que emite Canal + y tiene a Harvey Keytel como gancho.

La primera es una pel¨ªcula que en su momento amortiz¨® el ¨¦xito y que luego amortiz¨® la historia. Fuimos como cuenta Garci en Solos en la madrugada. Hubo separados recientes como el desolado Jos¨¦ Sacrist¨¢n que hac¨ªa de su cara un poema para explicar que no hab¨ªa nada en la nevera ("Manolita, aqu¨ª no hay nada de nada", dec¨ªa una pizarra), y hab¨ªa mujeres como esa samaritana que interpretaba Emma Cohen. Encontrarse ah¨ª con Emma, que compart¨ªa elenco femenino con Mar¨ªa Casanova, fue una satisfacci¨®n enorme para el ojo: adviertes que la mujer que le dio a Fernando Fern¨¢n-G¨®mez amor, sentimiento y compa?¨ªa durante los mejores a?os de su vida siempre fue como es, y tambi¨¦n en el cine. Una luz en medio de la oscuridad. Y la verdad es que Garci necesitaba esa luz en aquella oscuridad: una Espa?a que empezaba a despertarse de viejas costumbres y adaptaba las nuevas como si abrazara un hierro candente. Y Emma era el hierro candente que ven¨ªa (lo dec¨ªa en el filme) de mayo del 68. Una revolucionaria que ahora calmaba la indolencia de un solitario.

Y en la serie de Keytel tambi¨¦n sal¨ªa una revolucionaria que pon¨ªa bombas para vengar la acci¨®n de la polic¨ªa contra el l¨ªder de su grupo de activismo pol¨ªtico. Al final result¨® que el l¨ªder hab¨ªa sido v¨ªctima de los celos, una simpleza; la polic¨ªa era inocente, pero la venganza ya estaba hecha. Ante ese regusto dif¨ªcil de digerir incluso en Marte volv¨ª a Emma, no una marciana sino un ser que se r¨ªe como la gente de carne y hueso.