Interior investiga qui¨¦n desoy¨® la orden de no esposar a los detenidos de Palma

"Mi instrucci¨®n directa es que les respetaran como personas, que les dieran agua y ropa limpia y que la conducci¨®n fuera sin esposas". El delegado del Gobierno en Baleares, Ram¨®n Socias, ha abierto una investigaci¨®n para conocer qui¨¦n desobedeci¨® esta orden suya para que no se engrilletara el pasado s¨¢bado a los cinco cargos del PP detenidos en Mallorca en relaci¨®n con el esc¨¢ndalo del vel¨®dromo Palma Arena cuando fueron introducidos en los juzgados de la ciudad. La orden fue cursada a la Jefatura Superior de Polic¨ªa de Baleares, de ¨¦sta a la Brigada de Seguridad Ciudadana que, ya de forma verbal, la transmiti¨® de forma err¨®nea a los responsables directos del traslado. El comisario de Seguridad Ciudadana ha asumido el error de no haber dado a los agentes actuantes la orden de no esposar a los altos cargos del PP detenidos.

El PP admite que el delegado del Gobierno ya les ha pedido disculpas

El protocolo policial deja a discreci¨®n de los agentes el poner o no los grilletes

El ministro del Interior, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, confirm¨® ayer en rueda de prensa la apertura de la pesquisa, y afirm¨® que cuando se conozca qui¨¦n "de la cadena de mando" no cumpli¨® la instrucci¨®n "se tomar¨¢n las medidas adecuadas". El PP balear tambi¨¦n se pregunt¨® qui¨¦n desobedeci¨® la orden de Socias, quien, seg¨²n la presidenta del PP balear, Rosa Estar¨¤s, ya les ha confirmado que dio la orden de "no dar espect¨¢culo" y ha pedido disculpas por lo sucedido.

Efectivamente, dicha orden se curs¨®. Seg¨²n el Sindicato Unificado de Polic¨ªa (SUP), que ha abierto su propia indagaci¨®n, y otras fuentes policiales, el d¨ªa 7 el jefe superior de Polic¨ªa de Baleares orden¨® al comisario de la Brigada de Seguridad Ciudadana (responsable de los traslados) que al d¨ªa siguiente, s¨¢bado, los detenidos fueran llevados al juzgado en un furg¨®n separado de otros presos, sin esposar, y que previamente se les facilitase el cambio de ropa y un lugar donde asearse. Se decidi¨® que utilizaran el ba?o de los polic¨ªas, mejor dispuesto, y no el de los detenidos. Cuatro detenidos se asearon y cambiaron en el ba?o de los polic¨ªas de la comisar¨ªa y el quinto, no.

La orden se comunic¨® al inspector jefe de Conducciones. Pero ¨¦ste, seg¨²n fuentes de las pesquisas, ha asegurado que, por omisi¨®n, mala interpretaci¨®n u otra circunstancia, recibi¨® todas las instrucciones sobre el aseo y el tratamiento a los detenidos, pero no recuerda que el comisario jefe de la Brigada le transmitiera orden alguna de que fuesen sin esposar o esposados. El comisario jefe de Seguridad Ciudadana en Baleares ha asumido la responsabilidad en el error de trasladar las ¨®rdenes. Lo ha hecho para, seg¨²n fuentes de las pesquisas, no perjudicar a sus subordinados.

Lo cierto es que no existe ning¨²n protocolo que fije cu¨¢ndo un detenido tiene que ser esposado o no durante una conducci¨®n. La instrucci¨®n 12/2007 del secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, establece que dichos traslados se deber¨¢n hacer "proporcionando al detenido un trato digno y respetuoso con los derechos fundamentales, que sea compatible con las incomodidades" del traslado. Y luego se le dice a los agentes: "Se utilizar¨¢n los medios humanos y materiales que aconsejen las circunstancias en cada supuesto, teniendo en cuenta la peligrosidad del detenido, los hechos que se le imputan, la duraci¨®n del recorrido o cualquier otra circunstancia que pudiera ocurrir". Es decir, se deja la decisi¨®n al albur de los polic¨ªas actuantes.

Los tres agentes que hicieron el traslado aseguran que el traslado se hizo "como se hace normalmente con todas las personas detenidas" y que el esposamiento se efectu¨® "como habitualmente se viene haciendo en las conducciones diarias". Adem¨¢s, alegan una circunstancia excepcional: que dado que era un fin de semana, en plenas vacaciones de agosto, s¨®lo hab¨ªa tres polic¨ªas para el traslado y que, como hab¨ªa m¨¢s detenidos que agentes, aplicaron un m¨¦todo usual en estas circunstancias: esposar las manos derechas de dos de los detenidos. Adem¨¢s, entre los tres funcionarios s¨®lo reun¨ªan tres grilletes. Y explican que, si hubieran recibido la orden de no esposarlos, lo habr¨ªan hecho. Pero no les lleg¨®.

Otra cuesti¨®n, subrayada por el SUP, es qui¨¦n permiti¨® entrar a la prensa al patio interior de los juzgados, un recinto acotado, donde se pudieron tomar sin trabas im¨¢genes de los detenidos esposados. Los vigilantes privados no pusieron ning¨²n inconveniente. De hecho, ¨¦stos suelen aconsejar a los medios que cubren los juzgados que esperen y permanezcan en dicho patio, donde siempre ven a los detenidos.