El irreverente Yang
Tiger Woods se atasca con los segundos golpes y con el 'putt' para ceder el t¨ªtulo del US PGA al golfista coreano, primer asi¨¢tico en ganar un 'grande'
Cuando desde la megafon¨ªa entonaron la retah¨ªla de t¨ªtulos en su zurr¨®n, se coloc¨® sobre el tee, en la salida del hoyo 1. Sobrio, con la mirada penetrante y la cabeza fr¨ªa. De repente, la lluvia remiti¨® y un par de rayos de sol asomaron de entre las nubes para iluminar el campo. Hac¨ªa nueve minutos, ca¨ªa un aguacero tremendo. Hasta el tiempo parec¨ªa respetar a Tiger Woods, que sali¨® como l¨ªder en la ¨²ltima jornada del US PGA. La estad¨ªstica era tan esclarecedora como abrumadora: las 14 veces que Tiger lleg¨® a la ¨²ltima jornada en cabeza, gan¨® el grande. Pero al irreverente coreano Yang le daban lo mismo los n¨²meros y la historia -ser¨ªa el 15? major de Woods, a s¨®lo tres del r¨¦cord de Jack Nicklaus-, y se coron¨® por primera vez en un grande con un ¨²ltimo golpe sensacional. Se aprovech¨® del inconsistente Tiger, que no tuvo su d¨ªa con el putt y se convirti¨® en el primer as¨ªatico en ganar un major.
El coreano empez¨® a jugar al golf a los 19 a?os. A los 24, se hizo profesional
Tiger lleg¨® 14 veces l¨ªder al ¨²ltimo d¨ªa de un 'grande'. En todas gan¨®. Hasta ayer
Para Yong-Eun Yang (Jeju-do, Corea; 1972), la pareja de baile ayer de Tiger, el golf es una diversi¨®n y, sobre todo, una obsesi¨®n. As¨ª lo decidi¨® a los 19 a?os, cuando cogi¨® por primera vez un palo por consejo de un amigo. Y s¨®lo volvi¨® a soltarlo por obligaci¨®n, para cumplir el servicio militar de su pa¨ªs. Acabado el deber, decidi¨® emigrar a Nueva Zelanda para meterse de lleno en el mundo del golf y mejorar su juego. Funcion¨® de f¨¢bula porque a los 24 ya era profesional. Su eclosi¨®n, sin embargo, no se produjo hasta hace dos a?os, cuando se impuso en el HBSC. Ese d¨ªa le gan¨® a Woods, que se qued¨® a un soplido del t¨ªtulo. Tras vencer en este curso en el Honda Clasics, Yang se present¨® en la ¨²ltima jornada del US PGA a la par de Tiger, hasta el punto que incluso compart¨ªan la estad¨ªstica de golpes para ganarse el green y proporcionarse opciones de birdie (74%) en el torneo. "Estoy nervioso porque s¨¦ que habr¨¢ mucha gente mir¨¢ndonos y analiz¨¢ndonos", convino el jugador antes del d¨ªa decisivo; "pero afronto el reto con muchas ganas. Creo que si cojo ritmo, jugar¨¦ bien". Lo hizo de rechupete.
Por detr¨¢s, nadie cejaba en su empe?o de echarle el lazo a Tiger. El dan¨¦s Soren Kjeldsen se repon¨ªa de dos bogeys con tres birdies consecutivos; el surafricano Ernie Els atinaba un poco m¨¢s de lo habitual con su putt y se encaramaba a las posiciones punteras; y el norteamericano Lucas Glover (¨²ltimo campe¨®n del Open de Estados Unidos) ten¨ªa altibajos pero no se desprend¨ªa del grupo cabecero. S¨ª que se descolg¨®, sorpresivamente, el irland¨¦s Padraigh Harrington. "Es extremadamente trabajador, muy paciente y siempre conf¨ªa en su juego. Siempre le he admirado", expres¨® Tiger antes de jugar. Pero Paddy se lio en el hoyo 8. Un par 3 lo resolvi¨® en ocho golpes. Una cat¨¢strofe que le descart¨® para el t¨ªtulo. Poco a poco, tras Harrington, se ir¨ªan desgranando los dem¨¢s rivales. Menos el descarado Yang.
Gestos, caranto?as y alg¨²n que otro aspaviento sobre el c¨¦sped de Hazeltine. Tiger se mostraba muy impreciso. Se quedaba corto, largo o desviado en los segundos golpes. La posici¨®n de las banderas, esquinadas y complicadas sobre el green, se le atragant¨® m¨¢s de lo previsto. Con el putt era peor. Acostumbrado a embocar desde una distancia media, ayer sus bolas ped¨ªan un taxi al buscar hoyo; pasaban de largo. As¨ª le ocurri¨® en el hoyo 1, 10, 13 y 16. Demasiados birdies perdidos.
El momento determinante e incisivo estuvo en el hoyo 14. Yang, desde el rough, se invent¨® un magn¨ªfico chip -emular con el hierro un golpe de putt para elevar la bola y que ruede- que acab¨® por embocar. Eagle de categor¨ªa. Tiger, menos acertado, se conform¨® con el birdie. Por primera vez en el torneo, Tiger -con una tarjeta de +2- perdi¨® el liderato. A un golpe de distancia; a falta de cuatro hoyos. Yang mantuvo la serenidad y el nivel hasta el ¨²ltimo hoyo, cuando se invent¨® un tiro, por encima del ¨¢rbol y a 160 metros, que plant¨® al lado de bandera. La irreverencia m¨¢gica de Yang.
Clasificaci¨®n: 1. Y. E. Yang (Corea). 280. 2. T. Woods (EE UU) 282. 19. ?. Quir¨®s; 290. 32. G. Fern¨¢ndez-Casta?o. 292. 36. M. A. Jim¨¦nez. 293
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