La huella de Garnier en Jerez
Un palacio obra del arquitecto franc¨¦s alberga la escuela de arte ecuestre
En este caso, la importancia de la forma est¨¢ muy pareja a la importancia del fondo. La Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre, con sede en Jerez de la Frontera (C¨¢diz), cuenta con el respeto del mundo del caballo en los cinco continentes. Su espect¨¢culo de equitaci¨®n C¨®mo bailan los caballos andaluces es demandado en los m¨¢s altos eventos, porque su presencia da prestigio.
Pero esa actividad, adem¨¢s, est¨¢ envuelta en un magn¨ªfico paquete. La Real Escuela tiene su sede en uno de lo espacios m¨¢s elegantes de Andaluc¨ªa: el recreo de las cadenas, un conjunto de 3.500 metros cuadrados dise?ado por el arquitecto franc¨¦s Charles Garnier, el autor de la ?pera de Par¨ªs y del Casino de Montecarlo, y rodeado por un refinado laberinto de jardines.
El edificio es un tesoro legado por los ilustrados jerezanos
El espect¨¢culo 'C¨®mo bailan los caballos andaluces' es un referente
Se trata de un tesoro poco conocido legado por los ilustrados jerezanos. A mediados del siglo XIX, el negocio del vino de Jerez experimentaba una gran prosperidad. En mitad de esa bonanza, la familia Pemart¨ªn Laborde impuls¨® la creaci¨®n de un conjunto de gran belleza y simbolismo. El palacio era una muestra de amor hacia Cristina Hern¨¢ndez de Pemart¨ªn, cuyas siglas (CHP) a¨²n figuran grabadas en la vidriera de la ventana principal del palacio.
Los grandes salones del bajo y la primera planta, presentaban frescos, bronces y m¨¢rmoles que a¨²n se conservan intactos. En la fachada, dos figuras aleg¨®ricas recuerdan que estamos en la ciudad de la vi?a. Garnier eligi¨® las im¨¢genes en m¨¢rmol de Dionisio, el dios griego del vino, y su hom¨®logo romano, el dios Baco. En la planta baja, el comedor y tres grandes salones. En el primer piso, los dormitorios y, en la segunda, las estancias del servicio.
La residencia fue inaugurada con toda pompa en 1864, en una ceremonia a la que asisti¨® Francisco Mar¨ªa de As¨ªs, el marido de la reina Isabel II, que concedi¨® al conjunto el privilegio de colocar cadenas en los accesos, un hecho que, con el paso del tiempo, dar¨ªa nombre al recinto, hoy recreo de las cadenas.
El magn¨ªfico edificio muestra hoy sus mejores galas. Fue rehabilitado entre 1984 y 1987, tras a?os de abandono y olvido. El actual visitante encuentra hoy un diferente uso, pero la misma impactante arquitectura. El Centro de Interpretaci¨®n del Arte Ecuestre ocupa el s¨®tano. El Centro de Documentaci¨®n del Caballo y los museos est¨¢n en la planta baja. El segundo piso, hoy muy reformado, est¨¢ adaptado como centro de congresos.
Aunque los jardines del recreo han cedido espacio a la ciudad moderna (han perdido el estanque, la r¨ªa y la gruta original), a¨²n conservan un gran valor bot¨¢nico y paisaj¨ªstico. Como el de Mar¨ªa Luisa en Sevilla, es un exponente del inter¨¦s de la sociedad andaluza del XIX por las nuevas especies arb¨®reas, tras el desarrollo de la navegaci¨®n oce¨¢nica.
En los a?os 60 y 70 del pasado siglo, el jard¨ªn, como el propio palacio, languidecieron. El actual dise?o de la zona verde corresponde a la rehabilitaci¨®n efectuada en los a?os 80 con especies mediterr¨¢neas. Hoy, de nuevo, se trata de un espacio vulnerable: las plagas y las heridas de los troncos m¨¢s antiguos han puesto en riesgo su continuidad.
La Escuela Andaluza del Arte Ecuestre es un centro de referencia internacional en materia equina. Tiene aulas de formaci¨®n, criaderos, hospital y espect¨¢culo. Su ballet C¨®mo bailan los caballos andaluces, sobre coreograf¨ªa de doma cl¨¢sica y equitaci¨®n tradicional, logra a veces que el espectador dude de sus propios sentidos. Mas parece una suerte de magia que una habilidad aprendida. Si busca la nobleza del caballo andaluz, b¨²squela aqu¨ª.
Escuela Andaluza del Arte Ecuestre. de lunes a s¨¢bado, de 10.00 a 14.00. El espect¨¢culo
c¨®mo bailan los caballos andaluces celebra los martes y jueves. El resto de la semana est¨¢n abiertos sus museos y fondos documentales. Precio: seg¨²n el tipo de visita.
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