Las ultralujosas islas de los famosos se hunden

Angelina Jolie y Brad Pitt van a tener dificultades para disfrutar la isla privada que hace dos a?os compraron en The World, una de las urbanizaciones m¨¢s exclusivas del planeta que se est¨¢ construyendo en Dubai. O se estaba construyendo, porque las obras est¨¢n paradas. Los problemas crediticios de ese emirato ponen en entredicho el futuro de los megaproyectos inmobiliarios que hab¨ªan atra¨ªdo no s¨®lo a esa pareja, sino a otros muchos famosos como David Beckham o Naomi Campbell, en busca tanto de un lugar especial en el que refugiarse como de las ventajosas condiciones fiscales que ofrece la ciudad-Estado.

Todo empez¨® con una palmera. No una datilera cualquiera, sino The Palm, un complejo residencial en forma de palmera que desde 2001 se est¨¢ levantando sobre islas ganadas al mar frente a la playa de Jumeirah. El incre¨ªble proyecto supuso el lanzamiento de Nakheel Properties, la rama inmobiliaria de Dubai World, el consorcio p¨²blico con el que el jeque de Dubai, Mohamed bin Rachid al Maktum, quiso hacer de su emirato el centro del mundo y que hoy debe 60.000 millones de d¨®lares. En una esquina del desierto de Arabia, sin apenas petr¨®leo y con escasos atractivos naturales, hab¨ªa que echar mucha imaginaci¨®n para llamar la atenci¨®n.

La crisis del emirato paraliza las obras de una exclusiva urbanizaci¨®n

El ¨¦xito de la idea fue tal que Nakheel, que en ¨¢rabe significa palmera, enseguida puso en marcha otras dos urbanizaciones gemelas en Yebel Ali y Deira (hoy parada). Pero no contentos con convertir la antigua costa de los piratas en un palmeral, los promotores se lanzaron a construir The World, un conjunto de 300 islas que dibujan el mapa del mundo, e incluso planearon The Universe, un atlas del sistema solar.

Los ricos y famosos se convirtieron en el objetivo obvio. La tentaci¨®n era imposible de resistir para aquellos con bolsillos a la altura de sus egos. Dubai les ofrec¨ªa tener no s¨®lo su propia isla, sino su propio pa¨ªs o estrella. La privacidad est¨¢ asegurada porque las propiedades s¨®lo iban a ser accesibles con barco. Adem¨¢s, cada una se tunea al gusto del cliente. Y todo ello libre de impuestos.

Enseguida un desfile de caras conocidas empez¨® a frecuentar el emirato y calculadas filtraciones daban cuenta de que Jolie y Pitt iban a hacerse con Etiop¨ªa o que Sir Richard Branson, el propietario de Virgin, aspiraba a ocupar Inglaterra, y el cantante Rod Stewart, Escocia. Aunque no hay datos precisos de las cantidades entregadas a cuenta por famosos u otros inversores no tan c¨¦lebres, la reserva de las propiedades exig¨ªa el pago del 70% de su valor, que variaba en funci¨®n del tama?o. El responsable del consorcio que compr¨® Irlanda por 38 millones de d¨®lares en 2007, se suicid¨® a principios de este a?o.