Cardenal Pedro S. Shirayanagi, el 'Taranc¨®n' japon¨¦s

El 30 de diciembre, a las 6.45, ha dejado de latir el coraz¨®n del cardenal Pedro S. Shirayanagi, a los 81 a?os. El cardenal ha pasado los ¨²ltimos d¨ªas de su vida recogido en la enfermer¨ªa de los jesuitas en Tokio. La iglesia cat¨®lica en Jap¨®n, justamente al entonar el Ted¨¦um de fin de a?o, despide para la vida eterna al pastor que fue piloto y faro de la renovaci¨®n posconciliar en el ¨²ltimo cuarto del siglo XX y da gracias por la plenitud de su vida y la fecundidad de su acci¨®n pastoral.

Acab¨¢bamos de recibir la noticia del fallecimiento del te¨®logo Schillebeeckx cuando nos llega la noticia del fallecimiento del cardenal Shirayanagi, en los ¨²ltimos d¨ªas de este a?o, en el que despedimos tambi¨¦n al cardenal Kim, de Se¨²l. Se re¨²nen en la vida eterna tres grandes figuras de la Iglesia posconciliar, a cuya intercesi¨®n encomendaremos el camino vacilante de las comunidades cristianas en la segunda d¨¦cada del siglo XXI...

Deja un legado de convivencia intercultural e interreligiosa

Seiichi Shirayanagi, nacido en 1928 en Tokio y bautizado con el nombre de Pedro en la iglesia de Hachioji, fue ordenado sacerdote el 21 de diciembre de 1954. Obispo desde 1996, auxiliar de la di¨®cesis de Tokio con derecho a sucesi¨®n desde 1969, titular de la misma desde 1970 hasta su retiro en 2000, presidi¨® de 1983 a 1992 la Conferencia Episcopal japonesa.

Adem¨¢s de las muestras de recuerdo afectuoso desde todos los ¨¢ngulos del mundo cat¨®lico japon¨¦s, llegan entre los primeros p¨¦sames los de las confesiones cristianas hermanas y las otras religiones. El cardenal Shirayanagi promovi¨® celosamente el encuentro interreligioso y presidi¨® la secci¨®n japonesa de la Conferencia Mundial de las Religiones para la Paz.

Su ¨²ltima participaci¨®n p¨²blica de gran impacto en el mundo cat¨®lico japon¨¦s fue la homil¨ªa que predic¨® el 24 de noviembre de 2008, en la beatificaci¨®n de Pedro Kibe y compa?eros m¨¢rtires en Nagasaki.

El cardenal Shirayanagi deja un legado de caridad evang¨¦lica, fidelidad eclesial, apertura posconciliar, confraternidad asi¨¢tica y convivencia intercultural e interreligiosa.

Daremos gracias a Dios por su vida en la vigilia que se celebrar¨¢ el 4 de enero y en el funeral solemne del 5 de enero, ambas liturgias en la catedral de Tokio.

Sus hijos espirituales, incorporados al ministerio por su imposici¨®n de manos, juntando el dolor de la despedida con la alegr¨ªa de su entrada en el seno del Dios Padre y Madre, oramos por su descanso en el seno de misericordia, que testimoni¨® durante su vida, y nos encomendamos desde ahora a la intercesi¨®n de quien respira ya definitivamente en el Esp¨ªritu Vivificador.

Juan Mas¨ªa, jesuita residente en Kobe (Jap¨®n), fue director de la C¨¢tedra de Bio¨¦tica de la Universidad Pontificia de Comillas, en Madrid.