La ribera se lava la cara
El Parque Lineal del Manzanares estrena ampliaci¨®n despu¨¦s de estar durante a?os parado y haberse rescatado en 2009 con el dinero del Plan E
En el Parque Lineal, al lado de la Caja M¨¢gica, la tranquilidad del Manzanares compite con el fragor de la M-30. Patos, ¨¢rboles, y de fondo el rumor del tr¨¢fico. Una zona verde muy urbana en la que ayer el alcalde, Alberto Ruiz-Gallard¨®n, inaugur¨® una ampliaci¨®n de nueve hect¨¢reas que viene a fijar el l¨ªmite hasta el que llegar¨¢ Madrid R¨ªo, proyecto dise?ado para recuperar el uso l¨²dico del Manzanares.
Lo que inaugur¨® exactamente el alcalde fue la remodelaci¨®n de la llamada "zona de la cascada", aunque la cascada en realidad no sea tal. "?D¨®nde hay aqu¨ª una cascada?", preguntaba Ferm¨ªn quit¨¢ndose los auriculares mientras hac¨ªa footing. "Yo creo que se debe de referir a los chorros de agua de la fuente", aventuraba una paseante. Pero no, la cascada es en realidad un aliviadero del sistema de saneamiento coronado por una ca¨ªda de agua de un par de metros. Una caseta cubierta de pintadas se levanta en medio del puente de la presa. Despu¨¦s, el r¨ªo se escapa hacia las depuradoras.
Los tramos abiertos son estancos y entre ellos se pueden ver excavadoras
Un empleado de seguridad que no quiso dar su nombre, explicaba comprensivamente: "Lo de la cascada es que es simb¨®lico. El alcalde ni se ha acercado. Ha estado en el cerro. Es donde sub¨ªan los que robaban coches. All¨ª los quemaban y los tiraban luego al Manzanares. Ahora est¨¢ m¨¢s bonito, con unos pinitos y tal". Los pinitos son concretamente 853 ¨¢rboles y unos 6.000 arbustos; una inversi¨®n de 2,1 millones de euros y ocho meses de obras.
El cerro es un antiguo vertedero transformado en monte artificial. El s¨ªmbolo de la transformaci¨®n de la zona, refugio de toxic¨®manos y delincuentes, desde que se inaugur¨® en 2003 la primera fase del parque dise?ado por Ricardo Bofill. El proyecto, que no lleg¨® a ver la luz tras el despertar del sue?o ol¨ªmpico, inclu¨ªa piscinas, lagos, playas, campo de golf, club de equitaci¨®n, un pabell¨®n deportivo y dos auditorios. De momento, el punto y aparte son las pistas de tenis de la Caja M¨¢gica.
La crisis fue quien salv¨® a Madrid R¨ªo. La apuesta por recuperar el Manzanares con un gran jard¨ªn que cubrir¨ªa el espacio que liber¨® el soterramiento de la M-30 parec¨ªa sepultada hace un a?o. Entonces la depresi¨®n mundial oblig¨® a activar el Plan E y los ayuntamientos rescataron de sus cajones los proyectos que nunca pensaron que podr¨ªan financiar. Y ah¨ª resurgi¨® el Manzanares.
Hace unos meses, el r¨ªo engull¨® 43,7 millones, el grueso de los 277 millones de la segunda fase del nuevo Fondo Estatal de Inversi¨®n Local. Son 19 actuaciones que deber¨¢n estar acabadas a principios de 2011. El Ayuntamiento asegura que el final feliz de la historia ser¨¢n 270.000 metros cuadrados a disposici¨®n del ciudadano, de los que 190.000 corresponden a zonas verdes.
Lo que queda lejos por el momento es la conexi¨®n con el resto de zonas verdes. Deben construirse los senderos que lo unan al resto de la ciudad. Por ahora la ribera est¨¢ completamente troceada. Avanzando hacia el norte, la corriente parece desaparecer, embutida en paredes de hormig¨®n. Sus lindes no vuelven a ser transitables hasta el parque de Arganzuela, y con limitaciones, porque las excavadoras campan a sus anchas por la zona, presidida por un nuevo cartel¨®n del Plan E.
El r¨ªo se convierte a partir de ese momento en un barrizal en obras. A la altura del puente de la Ermita, lo m¨¢ximo que se puede encontrar es alg¨²n charco en el que brilla el sol. Las obras y los cartelones siguen por toda la avenida de Virgen del Puerto.
M¨¢s all¨¢ del puente del Rey todo seguir¨¢ igual. En sus or¨ªgenes estaba pensado que la renovaci¨®n continuara hasta el puente de los Franceses, pero no hay ninguna obra en marcha. Los vecinos de la zona se quejan. "En el paseo de la calle de Aniceto de las Marinas el suelo est¨¢ lleno de socavones, tenemos vagabundos que duermen debajo de los puentes, y en verano se infesta de cucarachas", protesta uno. Otro, el se?or Carranza, sonr¨ªe: "La verdad es que, para lo que lo disfrutamos, pod¨ªan tapiarlo". Un esc¨¦ptico con el proyecto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Alberto Ruiz-Gallard¨®n
- Obras municipales
- Actos oficiales
- R¨ªo Manzanares
- R¨ªos
- Gobierno municipal
- Parques y jardines
- Ayuntamientos
- Limpieza urbana
- Pol¨ªtica municipal
- Administraci¨®n local
- Madrid
- Agua
- Eventos
- Vivienda
- Comunidad de Madrid
- Areas urbanas
- Espacios naturales
- Espa?a
- Equipamiento urbano
- Administraci¨®n p¨²blica
- Urbanismo
- Pol¨ªtica
- Sociedad
- Medio ambiente