500 veces Nadal

Es 2002 y el argentino Marcelo Charpentier est¨¢ de un humor de perros. "?Me gan¨® un pibe de 16 a?os!", le ruge a un amigo tras perder en Barcelona contra un chaval que tan s¨®lo lleva unos meses como profesional. Mariano Hood, que es quien recibe el bufido y el que ve a su amigo "indignado y recaliente", se sorprende. "?Pero, hombre, Chapu!", le contesta, "?vos sab¨¦s lo que juega el pibe este? ?Va a ser un grande!".

Han pasado ocho a?os. El ni?o se ha hecho hombre y ha cumplido los pron¨®sticos: hoy (alrededor de las 9.00, Canal+), Rafael Nadal juega contra el alem¨¢n Philippe Kohlschreiber para llegar a los octavos de final del Abierto de Australia. Es su partido 500 como profesional. Nadie en la historia de su deporte ha llegado m¨¢s r¨¢pido a la marca de 400 victorias (lleva 407 por 92 derrotas). Nadie, quiz¨¢s solo Bjon Borg, ha amasado tantos grandes (seis), tantas Copas Davis (tres) y tantos ¨¦xitos (oro ol¨ªmpico, el n¨²mero uno mundial) en tan poco tiempo. Nadal, especializado en romper marcas de precocidad, tiene 23 a?os y es un tenista r¨¦cord enfrentado a la tit¨¢nica tarea de convertir su presente en un reflejo merecedor de su pasado. Dos datos ponen en perspectiva la importancia de sus marcas: Juan Carlos Ferrero, ex n¨²mero uno de 29 a?os, lleva 421 victorias por las 407 del mallorqu¨ªn. Y Fernando Verdasco, que, como ¨¦l, se hizo profesional en 2001, ha disputado 86 encuentros menos. Es el precio del ¨¦xito. Hoy, en Melbourne y ante el peligroso Kohlschreiber, arranca para Nadal un nuevo torneo. En Australia ya se juega en serio.

"Quiz¨¢s no haya ganado un trofeo en mucho tiempo [desde mayo de 2009], pero Nadal se ha dado oportunidades para hacerlo una y otra vez", razona Roger Federer tras vencer con facilidad al rumano Hanescu (6-2, 6-3 y 6-2); "ha tenido dificultades ¨²ltimamente contra los top 10, pero es el tipo con el que ninguno de los diez mejores querr¨ªa encontrarse. A¨²n tiene y siempre tendr¨¢ la fortaleza mental y el juego f¨ªsico. Ganar¨¢ un torneo muy pronto. Una vez que lo haga, lo que casi logr¨® en Doha con varios puntos de partido contra Davydenko, volver¨¢ a coger la racha".

Empapado en sudor y con la camiseta azul marcando curvas, Federer coge antes un micr¨®fono, mira al palco y saluda al pr¨ªncipe Guillermo de Inglaterra: "Su Alteza Real, bienvenido al mundo del tenis". Bienvenido, podr¨ªa haber dicho Federer, a la dureza de los torneos grandes, en los que ayer Nicol¨¢s Almagro pas¨® a la tercera ronda con la mano izquierda rota (6-4, 6-2, 3-6, 4-6 y 6-3 al alem¨¢n Becker). Bienvenido al espect¨¢culo de Fernando Verdasco, que destroz¨® por 6-1, 6-2 y 6-2 al ucranio Sergeyev mientras se preparaba para un cuadro de espanto (Koubek, en tercera; Davydenko, en octavos; Federer, en cuartos). Y bienvenido al reino de Nadal, que en 2009 logr¨® en Melbourne su sexto grande y ahora vive un momento de redefinici¨®n: apartado de las pistas el verano pasado por una tendinitis de inserci¨®n y con 500 partidos ya en las piernas, busca soluciones en las f¨®rmulas que le llevaron hasta el pin¨¢culo de su deporte. Nadal revisita los caminos que sigui¨® de ni?o.

"Yo alucinaba con la madurez deportiva que ten¨ªa con 16 a?itos reci¨¦n cumplidos, cuando gan¨® su primer future", cuenta Toni Colom, t¨¦cnico que le acompa?¨® en sus a?os formativos; "siempre fue positivo, con humildad, con mucho entusiasmo, concentraci¨®n, con fe infinita en sus posibilidades y en su capacidad de sacrificio... Siempre convencido de que con trabajo se consigue llegar a la cima. Entonces, yo me iniciaba en la competici¨®n y pocas cosas le pod¨ªa ense?ar, pero ¨¦l valoraba mi ilusi¨®n y me respetaba, lo que no ocurre frecuentemente en la educaci¨®n de hoy en d¨ªa. ?l sabe, y su t¨ªo siempre se lo ha inculcado, que el entrenamiento es provechoso al final dependiendo de si ¨¦l pone de su parte, no del que tiene enfrente".

Nadal s¨®lo se fija en s¨ª mismo. Hoy vive su primera prueba seria. Ma?ana, en Melbourne o donde sea, sigue la guerra.