Memorias de un perrito pop
Un libro sobre Snoopy fija la enorme influencia de la serie de Charles Schulz
"?Te lo juro por Snoopy!" fue el grito de guerra de toda una generaci¨®n pija, que utiliz¨® al simp¨¢tico perro que dorm¨ªa sobre su caseta e hizo de ¨¦l algo m¨¢s que un s¨ªmbolo para convertirlo en el icono de un modelo de sociedad consumista basada en marcas y logotipos como identificadores de clase. Una asimilaci¨®n no exenta de l¨®gica: respond¨ªa a la omnipresencia de los personajes de Carlitos y Snoopy en ese aire que respiramos compuesto de ox¨ªgeno y publicidad, protagonistas de miles de campa?as y representados en objetos de todo tipo, desde el m¨¢s min¨²sculo al m¨¢s grande, desde el m¨¢s absurdo al m¨¢s cotidiano.
Ese ¨¦xito planetario fagocit¨® en buena medida toda lectura o an¨¢lisis posterior de la serie que durante 50 a?os dibuj¨® puntualmente Charles Schulz. Diez a?os despu¨¦s del fallecimiento de su creador, la aparici¨®n de Schulz, Carlitos y Snoopy: una biograf¨ªa, de David Michaelis (EsPop Ediciones) permite una aproximaci¨®n a la serie creada en 1950 gracias a un triple enfoque: en primer lugar, la cr¨®nica biogr¨¢fica exhaustiva y minuciosa, que narra la vida del creador con una apabullante avalancha de datos. Un relato que aborda desde los detalles m¨¢s superficiales hasta aquellos m¨¢s personales, componiendo un perfecto retrato del hijo de un barbero inmigrante que crecer¨ªa como un hombre t¨ªmido de fuertes principios religiosos pero con una vocaci¨®n art¨ªstica determinada y firme que terminar¨ªa siendo ejemplo perfecto del sue?o americano.
Fue m¨¢s que un icono generacional, fue un s¨ªmbolo de la sociedad consumista
En segundo lugar, la propia cronolog¨ªa de la evoluci¨®n de una serie que ya naci¨® de forma at¨ªpica: los personajes de Schulz se alejaban de las habituales series protagonizadas por ni?os que aparec¨ªan en la prensa de la ¨¦poca, herederas del modelo de gamberretes descarados impuesto por Yellow Kid o The Kantzejammers Kids (los antecedentes de nuestros Zipi y Zape), para abordar problemas de adultos con un planteamiento introspectivo, casi existencialista, in¨¦dito para una tira diaria. Una nueva forma de entender la historieta que Michaelis va relacionando con acierto con la propia vida de su autor, intentando completar ese rompecabezas nunca resuelto de la verdadera personalidad de Charlie Brown, pero tambi¨¦n explicando las razones que han hecho de la serie una inspiraci¨®n y ejemplo a seguir para autores tan dispares como Quino, Bill Watterson, Chris Ware o Matt Groening.
Y en tercer lugar, con un escrupuloso an¨¢lisis de las razones que convirtieron la serie y sus personajes en un fen¨®meno medi¨¢tico y sociocultural sin precedentes. Desde esa serie que se iniciaba con poca confianza, relegada a un formato min¨²sculo para aprovechar espacios en blanco de las p¨¢ginas de los peri¨®dicos (el tama?o de "cuatro sellos de correos", seg¨²n el autor) y bautizada con un nombre poco afortunado que el autor rechazaba como rid¨ªculo, Peanuts (cacahuetes), hasta tener millones y millones de lectores que la llevaron a ser la serie de prensa con m¨¢s ¨¦xito de la historia, iniciadora del concepto moderno del merchandising.
Una triple v¨ªa de an¨¢lisis, desarrollada en paralelo, que aporta una nueva perspectiva a la obra de Schulz, permitiendo que el lector cuantifique la importancia de la obra mucho m¨¢s all¨¢ de sus logros econ¨®micos y entender las razones que llevaron a la serie a convertirse en un icono de la cultura de masas, capaz incluso de lograr que su primera incursi¨®n en los dibujos animados sustituyera al ?Qu¨¦ bello es vivir! de Capra como sin¨®nimo de fechas navide?as a la vez que sus tiras protagonizaban sesudos debates en las universidades y eran objeto de tesis doctorales.
Babelia
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