El hijo de Gaddafi excarcela a 214 presos islamistas

Seif el Islam, el hijo predilecto del l¨ªder libio Muammar el Gaddafi, logr¨® que su sue?o se hiciera ayer realidad: "Reunir alrededor de un t¨¦ a los dirigentes del Grupo Isl¨¢mico Combatiente Libio [GICL, vinculado a Al Qaeda] y a la direcci¨®n de la Seguridad Nacional".

El t¨¦ lo tomaron en el patio de la c¨¢rcel de Abu Salim, en Tr¨ªpoli, antes de que 214 presos islamistas fueran liberados, 34 de ellos del GICL, incluidos el que fue su m¨¢ximo jefe, Abdelhakim Belhaj; su responsable militar, Khaled Cherif, y su ide¨®logo, Sami Saadi.

Su liberaci¨®n ha sido posible porque "han revisado su noci¨®n de yihad [guerra santa]", seg¨²n explic¨® el martes por la noche el propio Seif el Islam, de 37 a?os, el hijo aparentemente designado por Gaddafi para sucederle.

Uno de los liberados es un antiguo jefe de la rama local de Al Qaeda

La Fundaci¨®n Gaddafi, que ¨¦l encabeza, puso en marcha en 2007 un programa de rehabilitaci¨®n de presos por terrorismo "de lo m¨¢s profesional", asegura Jean-Pierre Filiu, autor del libro Las nueve vidas de Al Qaeda (Par¨ªs, 2009).

"Aunque es multifac¨¦tico, el programa se ha centrado en rebatir enfoques religiosos de los islamistas como, por ejemplo, que la ley isl¨¢mica permite matar a infieles o que Libia puede ser considerado como un pa¨ªs infiel", explica Fernando Reinares, investigador del Real Instituto Elcano que asisti¨® en Tr¨ªpoli a la excarcelaci¨®n masiva junto con otros 18 acad¨¦micos.

"La rehabilitaci¨®n es una iniciativa personal de Seif el Islam, quien ha puesto un extraordinario empe?o en su puesta en pr¨¢ctica, no siempre bien aceptada por los responsables de la seguridad interior" de Libia, se?ala Reinares.

El hijo del l¨ªder libio revel¨® datos in¨¦ditos sobre el alcance de la rehabilitaci¨®n. "Desde que empez¨® el programa, 705 islamistas han sido liberados, pero 409 siguen encarcelados", precis¨®. "232 ser¨¢n puestos en libertad pr¨®ximamente", anunci¨®. Al cabo de un tiempo todos los presos ser¨¢n excarcelados.

"Estamos a punto de cerrar una etapa tr¨¢gica", concluy¨® Seif el Islam. "Es un acontecimiento hist¨®rico (...)". Durante ese periodo negro de la segunda mitad de los a?os noventa "el balance de los enfrentamientos entre islamistas y fuerzas de seguridad se elev¨® a 177 muertos entre los primeros y 165 entre las segundas".

"Desde luego", confirma Reinares, "el programa permite dar por terminado un cap¨ªtulo de los m¨¢s dolorosos y oscuros de la reciente historia de Libia". Se pregunta, no obstante, si los beneficios de la rehabilitaci¨®n quedar¨¢n "circunscritos a Libia" -Seif el Islam recalc¨® el car¨¢cter musulm¨¢n del pa¨ªs, en el que el consumo de alcohol est¨¢ prohibido- o se extender¨¢n a Afganist¨¢n e Irak, escenarios en los que los yihadistas libios han sido muy din¨¢micos.

Fundado hace 14 a?os en Afganist¨¢n, el Grupo Isl¨¢mico Combatiente Libio sigue existiendo, y hace dos a?os reforz¨® incluso p¨²blicamente sus lazos con la direcci¨®n central de Al Qaeda, pero su actividad en Libia es inexistente y fuera de sus fronteras ha quedado muy mermada. Un misil estadounidense mat¨® en 2008 en Pakist¨¢n a Abu Laith al Libi, su principal l¨ªder.

Las organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos no se han pronunciado sobre las excarcelaciones de islamistas, pero la estadounidense Human Rights Watch (HRW) critic¨® a Libia hace meses por mantener en prisi¨®n a reos que hab¨ªan cumplido su condena.