Industria eliminar¨¢ trabas a la energ¨ªa solar en los hogares

Colocar una peque?a instalaci¨®n fotovoltaica en el tejado de una casa es una odisea. "Los papeles que hay que hacer para una peque?a instalaci¨®n de 10 kilovatios son los mismos que para un gran parque en suelo de 10 megavatios. Por eso nadie instala peque?os parques en los hogares", resume Javier Anta, presidente de la Asociaci¨®n de la Industria Fotovoltaica (Asif). El Ministerio de Industria admite que la situaci¨®n no es justa y ha preparado un borrador de real decreto de conexiones de instalaciones renovables de peque?a potencia que agiliza y limita las trabas que pueden poner las el¨¦ctricas a la conexi¨®n de estos paneles. La norma tambi¨¦n facilitar¨¢ la instalaci¨®n de peque?os molinos de viento en los tejados o de peque?as instalaciones que generen electricidad a partir del calor residual de los sistemas de calefacci¨®n.

El texto persigue ayudar al sector tras el pinchazo de la burbuja solar

Para enlazar una instalaci¨®n a la red se tarda ahora hasta ocho meses

Placas de s¨®lo un metro cuadrado permiten verter energ¨ªa a la red

En 2014, el precio para el consumidor ser¨¢ similar al de la electricidad

El decreto se tramita en medio de una mayor tormenta contra las renovables, con las empresas cayendo en Bolsa ante el previsible recorte de primas de Industria, y no alivia a un sector soliviantado contra el Gobierno.

David P¨¦rez, de la consultora Eclareon, especializada en renovables, resalta la importancia del cambio. "El decreto avanza hacia la generaci¨®n el¨¦ctrica distribuida, que se produzca muy cerca del punto de consumo", y no s¨®lo en grandes centrales alejadas de la civilizaci¨®n.

El decreto obliga a las el¨¦ctricas a aceptar las instalaciones en 10 d¨ªas y a conectarlas en 45. Actualmente, el plazo para conseguir conectar una instalaci¨®n renovable a la red puede superar los ochos meses, "si todo va bien", seg¨²n P¨¦rez. "Esto hace que los costes administrativos se disparen y no merezca la pena. Con la nueva norma, la compa?¨ªa el¨¦ctrica que distribuye la electricidad producida no tiene que dar su visto bueno. Bebe del sistema alem¨¢n, en el que la instalaci¨®n de paneles solares en los hogares es casi una notificaci¨®n. La reforma puede tener un efecto socializante y conseguir muchas instalaciones peque?as", resume Anta.

La situaci¨®n hab¨ªa llevado a la desesperaci¨®n a los partidarios de la energ¨ªa solar. La Fundaci¨®n Tierra, con sede en Barcelona, harta de "la burocracia que imped¨ªa el desarrollo de tecnolog¨ªa fotovoltaica en las casas" desarroll¨® un panel que se enchufa directamente. "Aunque no nos lo cuentan, los enchufes tambi¨¦n sirven para inyectar electricidad a la red", como resume Marta Pahissa desde esa fundaci¨®n. El panel, de 0,92 metros cuadrados y 805 euros, produce electricidad que la vierte a la red.

Aunque el nuevo decreto mantiene que para cobrar la prima por electricidad producida -lo que ha convertido a la fotovoltaica en un gran negocio hasta 2008- hace falta ser aceptado por Industria en el registro para que no se dispare la potencia instalada. Las primas a la solar el a?o pasado ascendieron a 2.688 millones, aunque la producci¨®n s¨®lo supuso el 2% del total.

El ecologista Ladislao Mart¨ªnez valora la nueva norma como "una forma de agilizar tr¨¢mites", pero advierte de que no compensa el recorte de primas que prepara el Gobierno: "Est¨¢ bien que ataquen a los especuladores, pero para eso podr¨ªan ejecutar los avales que pusieron quienes obtuvieron permiso para construir un huerto solar y no lo han hecho".

P¨¦rez destaca que el decreto abre la puerta a lo que en unos a?os puede ser un nuevo mercado: la generaci¨®n de electricidad solar fotovoltaica en casa sin prima para autoconsumo. El texto establece que el ministerio "podr¨¢ establecer un procedimiento que permita la venta y facturaci¨®n de la diferencia entre la energ¨ªa el¨¦ctrica neta producida por la instalaci¨®n de generaci¨®n y la energ¨ªa el¨¦ctrica consumida por el consumidor el¨¦ctrico. Dicho mecanismo tendr¨¢ por objeto el fomento del autoconsumo de la energ¨ªa el¨¦ctrica producida en el mismo lugar de su generaci¨®n". Es decir, que el consumidor produce electricidad en su casa y vende o compra la diferencia a la red. "Abre una espita que se va a convertir en un gran r¨ªo", resume P¨¦rez. "Se trata de la satisfacci¨®n de que cada uno produce y consume sus tomates", a?ade Anta.

La fotovoltaica ha puesto sus esperanzas en la "paridad con la red". Aunque sigue siendo cara, su precio cae a una velocidad de v¨¦rtigo y en 2014 puede rondar el precio que paga el consumidor por la electricidad. P¨¦rez afirma que en Canarias, una de las zonas con mayor insolaci¨®n, y por lo tanto mayor rendimiento de los paneles, la paridad de la red ya se est¨¢ rozando.