"Para salvar a los pueblos, nunca hay acuerdo; para salvar las Bolsas, s¨ª"

Martine Aubry, primera secretaria del casi siempre convulso Partido Socialista franc¨¦s, ha conseguido acallar desde hace meses la enloquecedora jaula de grillos en la que se hab¨ªa convertido su formaci¨®n. Las ¨²ltimas elecciones regionales, celebradas en marzo, significaron no s¨®lo la victoria de la izquierda sobre el centro derecha de Sarkozy sino su consolidaci¨®n al frente de los socialistas franceses, hasta ahora siempre cuestionada por casi todos.

Tras un viaje a China y en medio de una campa?a contra la pol¨ªtica econ¨®mica de Nicolas Sarkozy, Aubry, de 60 a?os, alcaldesa de Lille y ex ministra, que asegura ni creer ni hacer caso a los sondeos, acept¨® dialogar con un grupo de periodistas europeos d¨ªas despu¨¦s del subid¨®n burs¨¢til tras la aprobaci¨®n por parte de la Uni¨®n Europea del fondo de rescate bancario.

"La austeridad puede acabar por ahogar el despegue de la econom¨ªa"

"Somos un partido en el que no hay ning¨²n l¨ªder que se imponga"

Ese fin de semana y esas negociaciones en Bruselas dejaron a Aubry un regusto amargo, seg¨²n confiesa: "No era un espect¨¢culo agradable ese, el de ver al grupo de dirigentes europeos encerrados un domingo por la tarde para cerrar un pacto antes de que abriera la bolsa. Era un poco la caricatura del sistema financiero-liberal. Da la impresi¨®n de que para salvar a los pueblos, como en el caso griego, nadie es capaz de ponerse de acuerdo. Pero cuando peligran las bolsas y los mercados, s¨ª. Por eso, el plan de rescate de Grecia ha sido tard¨ªo, hecho con muchas dudas y su tardanza ha hecho que las dudas vayan ahora a instalarse en Portugal y Espa?a". Y a?ade: "Con Grecia hac¨ªa falta un plan, claro, pero no s¨¦ si as¨ª de dr¨¢stico, porque si desencadena una crisis social, no servir¨¢".

Aubry, que concedi¨® la entrevista antes de que Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero anunciara su plan anti-d¨¦ficit en el Congreso, asegur¨®, a la hora de encarar la salida de la crisis "que una cosa es el rigor, que consiste en gestionar bien el dinero p¨²blico y otra la austeridad". "Esta puede ser injusta y puede acabar por ahogar el despegue de la econom¨ªa, y entonces no habremos hecho sino dar dos pasos atr¨¢s para coger impulso y saltar al abismo". "Ahora, con la crisis, es el momento de buscar las respuestas econ¨®micas del futuro", a?adi¨®.

A Nicolas Sarkozy le acusa, sobre todo, "de hablar mucho y no hacer nada, o de hacer precisamente lo contrario de lo que promete". "Todav¨ªa me acuerdo de su famoso discurso en Marsella, al principio de la crisis econ¨®mica, cuando parec¨ªa un l¨ªder anticapitalista, arremetiendo contra los bancos y los banqueros, asegurando que ¨¦l solo iba a arreglar el mundo". Y agrega: "?Y despu¨¦s de eso qu¨¦? ?D¨®nde est¨¢ la famosa regulaci¨®n de los bancos? ?Del sistema financiero? Tras un a?o no se ha hecho nada".

Con respecto al Partido Socialista (PS) admite que desde la elecci¨®n de Sarkozy y hasta hace unos meses "ha sido el escenario de una simple batalla de egos". "Y yo reconozco mi parte de culpa", a?ade. Ahora, tras el anuncio de unas elecciones primarias para elegir al candidato del PS contra Sarkozy en las elecciones presidenciales de 2012, todo se ha apaciguado. "Y tambi¨¦n porque ha habido un trabajo de fondo, de recoger ideas, las ideas ahogan los egos. Si no hay esa base detr¨¢s, nos puede pasar como en Italia, que el proyecto de izquierda se desinfle meses despu¨¦s de las votaciones".

Estas primarias, en las que podr¨¢ participar cualquier ciudadano franc¨¦s "comprometido con la izquierda", se disputar¨¢n, seguramente, el verano del a?o que viene. Hasta ahora, s¨®lo el alcalde de ?vry, Manuel Valls, de una generaci¨®n m¨¢s joven que Aubry, ha anunciado que se presentar¨¢. Pero hay varios dirigentes de peso bien emplazados que aguardan su momento para decidirse (o no): Fran?ois Hollande, ex primer secretario; S¨¦gol¨¨ne Royal, ex candidata presidencial; Dominique Strauss-Kahn, actual presidente del Fondo Monetario Internacional y la propia Martine Aubry. "Cr¨¦anme: ahora mismo, no s¨¦ qui¨¦n ser¨¢ el que, para entonces, estar¨¢ mejor colocado. Lo que s¨ª s¨¦ es a qui¨¦n no voy a apoyar. Todo lo dem¨¢s, puede cambiar. Ahora mismo somos un partido en el que no hay un l¨ªder que se imponga. Se impone el trabajo colectivo". Y resume en una frase parte de su filosof¨ªa: "En muchas reuniones que he tenido ¨²ltimamente, a lo largo de toda Francia, con militantes y simpatizantes, la gente me preguntaba y me inquir¨ªa no sobre su salario o su problema de esto o lo otro, sino por los valores. La elecci¨®n del 2012 girar¨¢ sobre los valores".