La temperatura a la que arden las canciones

A veces lo normal acaba siendo lo m¨¢s marciano. Y esa era pr¨¢cticamente la ¨²nica v¨ªa que le quedaba a Iv¨¢n Ferreiro si quer¨ªa sacar adelante lo de hacer un disco de ciencia-ficci¨®n con su hermano Amaro. Otro requisito era descontextualizar escenarios, ponerse a hablar de los otros por una vez y tratar de cantarle, por ejemplo, a "la mala hostia", concepto no tan dado a la sublimaci¨®n como el socorrido asunto amoroso. As¨ª le sali¨® Fahrenheit 451, el primer sencillo y germen del disco en el que Ferreiro llama hijos de puta, cerdos e ignorantes a todos los que le rodean. "Es que tiene mucho sentido si eres Montag [el bombero que quemaba libros en la novela de Ray Bradbury] y un d¨ªa descubres que Moby Dick es de puta madre", explica en una sala en la que su discogr¨¢fica cronometra e interrumpe una tras otra las entrevistas de los periodistas mientras Iv¨¢n y su hermano dan pausada cuenta de una caja de cigarrillos. Una imagen que define mucho su manera de trabajar. "Nosotros hacemos canciones y ellos [la discogr¨¢fica] las venden. A m¨ª no me gustar¨ªa ser un artista independiente y tener que pensar de d¨®nde saco el dinero para grabar. Uno se aburguesa con muchas cosas. No con las canciones, pero en otras quieres una cierta comodidad", explica. ?Y el aura de independencia de su m¨²sica? "Es que es la ¨²nica manera de serlo. El que no depende de la compa?¨ªa depende de su pap¨¢ o del trabajo de puta madre de publicista que tiene. A nosotros nos funciona bien porque no esperan que seamos m¨¢s de lo que somos. Las compa?¨ªas son negocios, no ONG encargadas de culturizar a la gente. Y si tienes la suerte de que lo que haces es negocio, pues cojonudo".

"La industria es hoy m¨¢s fiable porque las ratas han saltado del barco"

"Solo te da la independencia el estar en una discogr¨¢fica"

Y lo suyo lo es. Hace la m¨²sica que le da la gana y se vende. Es capaz de llenar Joy Eslava tres d¨ªas seguidos y tocar casi entero un disco que no ha salido todav¨ªa y nadie conoce. Y la gente encantada. Por eso esa industria le trata tan bien. Su anterior disco, por ejemplo, lo colg¨® entero en la web antes de publicarse. Nadie se quej¨®. "La industria es hoy m¨¢s fiable que antes porque es un barco que se hunde y los que quedan son los que quieren remar. Las ratas ya han saltado cagando hostias. Han mejorado algunas cosas", explica Ferreiro antes de la segunda interrupci¨®n de una empleada de la compa?¨ªa. "El pirateo tiene parte de culpa de la crisis, pero es que Sony, que se queja de ello, fabrica CD v¨ªrgenes. Hace 400 a?os me hubiera tocado hablar con el conde de Gondomar para que me diera por culo, para que luego me diera dinero justo antes de hacer una obra para su hija la duquesita... As¨ª que no estamos tan mal", reflexiona.

Por cierto, Picnic extraterrestre, el tercer disco en solitario del ex l¨ªder de Los Piratas, coge prestado el t¨ªtulo de una novela rusa de ciencia-ficci¨®n de la que Andrei Tarkovski se sac¨® luego de la manga la pel¨ªcula Stalker. Son canciones sencillas, casi deconstruidas. Recorre diferentes estados de ¨¢nimo y aplica ese sentido de la normalidad radical que a veces hace que las cosas hoy parezcan tan extra?as: "La verdad, estos d¨ªas prefiero ver Supervivientes en la tele que escuchar m¨²sica".