El antih¨¦roe austriaco

Y tras m¨¢s de cuatro horas, Jurgen Melzer respir¨® aliviado. Luce el sol inclemente, el austriaco se pasea con aire distra¨ªdo entre dos guardaespaldas, y eso no tiene que ver con que ¨¦l y su novia, la nadadora Mirna Jukic, sean carne de la prensa rosa. Va en chanclas Melzer y oculta su rostro con una gorra de rapero. No parece nervioso, y es raro: a sus 29 a?os, nunca hab¨ªa pasado de tercera ronda en un grande. Jam¨¢s hab¨ªa ganado un partido importante. Casi al final de su carrera, sus compatriotas le miraban con desconfianza, perdedor es la etiqueta (ese partido contra Murray en el Abierto de Estados Unidos; ese encuentro contra Kohlschreiber en la Copa Davis; esos duelos a cinco sets perdidos despu¨¦s de ganar los dos primeros)... Hasta que el mi¨¦rcoles invirtio 4 horas y 15 minutos en remontar un 6-3, 6-2 y 2-0 al serbio Novak Djokovic (n¨²mero tres del mundo) para llegar a semifinales.

"Soy un jugador muy agresivo que intenta irse a la red para acortar los puntos, pero tambi¨¦n tengo el juego para mantener el ritmo desde el fondo", le explica Melzer a este diario. "Nadal, por supuesto, es otro animal diferente a los rivales que tuve hasta ahora".

Melzer juega al tenis y come con la izquierda, pero escribe y juega al ping-pong con la derecha. Melzer est¨¢ loco por el f¨²tbol. Melzer fue campe¨®n de Wimbledon j¨²nior despu¨¦s de lograr que descalificaran a Nalbandi¨¢n por llegar tarde a su semifinal, y lleva toda su carrera pagando un exceso de talento. Demasiadas armas, poco orden. Habla Joakim Nystrom, t¨¦cnico del n¨²mero 27: "Arrancamos con lo b¨¢sico. Dedic¨¢bamos media hora a que hiciera derechas cruzadas y otra media a reveses. '?Todas tienen que parecerse!', le dec¨ªa. Tiene toque, pero ten¨ªa demasiadas opciones, no sab¨ªa elegir, se gustaba demasiado. Le dije: 'Esto es aburrido, pero lo necesitas".

En Par¨ªs, David Ferrer y Djokovic han perdido contra Melzer, que juega r¨¢pido y de manera imprevisible, tiros planos y brillantes. "Joakim le ha puesto mucha paciencia a mi juego", dice el austriaco mientras brilla su colgante de Mickey Mouse la otra mitad, Minnie, en el cuello de su novia. "Ha trabajado que mis tiros sean m¨¢s seguros para que aguante y pueda esperar a mi oportunidad".

?Y c¨®mo lo ve Nystrom? "De 14 partidos, Rafa ganar¨ªa 14. ?Ojal¨¢ que este sea el decimoquinto!".