La obesidad crece en los pa¨ªses que menos gastan en su comida

"Los precios de los alimentos subir¨¢n. No puede continuar esta espiral de precios bajos, no es sostenible". David Bosshart, director del Gottlieb Duttweiler Institut de Z¨²rich, una entidad especializada prospectiva sobre tendencias de consumo, se convirti¨® ayer en protagonista del congreso de la Asociaci¨®n Espa?ola de Codificaci¨®n Comercial, la impulsora del c¨®digo de barras, dedicado a las frutas y hortalizas en Valencia. Seg¨²n Bosshart, es clave reivindicar el valor de la comida. "Una manzana tiene unos costes asociados a la tierra, al granjero, a un entorno sostenible. Mientras que un iPad de Apple (manzana) se puede comprar en China, falsificado, por 80 d¨®lares (65 euros)". En la tienda oficial de Apple se vende a 479 euros.

Cuando un pa¨ªs se concentra en la producci¨®n industrial y prescinde de la importancia de la comida, se producen distorsiones. Los estadounidenses y los alemanes son los que menos porcentaje de su renta destinan a la compra de alimentos; apenas dedican a comida el 8,5% de los ingresos familiares. No conceden importancia a la cocina. Como resultado, Estados Unidos y Alemania son los dos pa¨ªses con mayor porcentaje de personas obesas en todo el mundo.

En Espa?a, el porcentaje de la renta familiar dedicado a comida es algo inferior al 15%. Bosshart cit¨® expresamente el caso de Jap¨®n, donde la comida est¨¢ rodeada de ceremonia y es una ocasi¨®n para la vida social. Los japoneses, "una de las sociedades m¨¢s avanzadas del mundo para casi todo", record¨® Bosshart, dedican el 24% de la renta familiar a comida. La obesidad no es un problema en Jap¨®n.

El experto suizo apunt¨® que "Europa est¨¢ en declive"; que "los buenos tiempos (1990-2010) no volver¨¢n"; que los d¨®lares van a parar a pa¨ªses que arrojan grandes crecimientos (Brasil, Rusia, India y China); y que los europeos debemos esforzarnos en "crear nichos que sean rentables".

En el otro lado de la balanza se?al¨® que unos 250 millones de personas aspiran a instalarse en Europa; que la calidad de vida y los servicios m¨¦dicos de los europeos son los mejores del mundo; y que los vinos espa?oles y franceses no tienen parang¨®n. A favor de Espa?a, jugar¨ªa, adem¨¢s, "la inteligencia de la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol" frente a "la arrogancia demostrada por los jugadores franceses derrotados". "Despu¨¦s de ganar el mundial, los espa?oles deber¨ªan explicar que juegan as¨ª de bien porque tienen los mejores cocineros del mundo".

Bosshart insisti¨® en el concepto de "capitalismo er¨®tico", en la vertiente sexy del vino frente a la cerveza o el atractivo de la textura y el olor de la fruta fresca. La necesidad de introducir atractivos sensoriales en las tiendas. Y la vertiente humana. El experto augur¨® que es clave recuperar el trato directo con el cliente. "El supermercado ha muerto", sentenci¨® sobre la gran superficie impersonal, "el granjero que es capaz de mostrar su vinculaci¨®n con el producto y explicar un par de recetas es el h¨¦roe del futuro" de la industria agroalimentaria.

Bosshart reivindic¨® un poco de romance y mucha fantas¨ªa para vestir las tiendas del futuro porque, aunque el socialismo y el capitalismo meramente acumulativo parecen haber pasado a la historia, augur¨® que la pasi¨®n por ir de compras, tan femenina, tiene un gran futuro.