"M¨¦xico est¨¢ atado al pasado"

La diputada mexicana Josefina V¨¢zquez Mota (Ciudad de M¨¦xico, 1961) est¨¢ de buen humor. El viaje rel¨¢mpago de 36 horas a Madrid -"para la investigaci¨®n de un libro"- no le ha causado mayor mella. La coordinadora de la bancada del Partido Acci¨®n Nacional (PAN, derecha) en la C¨¢mara de Diputados en M¨¦xico afirma que la ins¨®lita alianza entre su partido y el Partido de la Revoluci¨®n Democr¨¢tica (PRD, izquierda) en las elecciones estatales del pasado 4 de julio "gener¨® pol¨¦mica", pero que su mayor legitimaci¨®n yace "en su agenda pol¨ªtica". En concreto, en su principal objetivo, quitar al PRI (Partido Revolucionario Institucional) tres de sus feudos hist¨®ricos, Oaxaca, Puebla y Sinaloa, que controlaba desde hace m¨¢s de 80 a?os. "La alianza impact¨® en los ciudadanos. Se demostr¨® que se pod¨ªa acabar con el carro completo", afirma V¨¢zquez Mota. Utiliza una expresi¨®n que data de la ¨¦poca en la que el PRI controlaba la presidencia de M¨¦xico (1929-2000), que se emplea cuando una sola fuerza pol¨ªtica gana todos los cargos en disputa. "Hac¨ªa muchos a?os que no ve¨ªa una esperanza as¨ª".

Aunque no todos comparten el entusiasmo. El ex secretario de Gobernaci¨®n (ministro de Interior), Fernando G¨®mez Mont, que dej¨® el Gabinete de Calder¨®n la semana pasada, renunci¨® al PAN en febrero para mostrar su desacuerdo.

Pregunta. El PRI perdi¨® tres de las elecciones estatales, pero gan¨® las otras 11. Despu¨¦s de haber quedado como tercera fuerza pol¨ªtica en 2006, el PRI recuper¨® la mayor¨ªa relativa en la C¨¢mara de Diputados en 2009. ?Cu¨¢l es el panorama real ante las elecciones presidenciales de 2012?

Respuesta. Hay que resolver las reglas del sistema pol¨ªtico mexicano. Las actuales no son adecuadas, estimulan la contradicci¨®n y evitan los acuerdos. En M¨¦xico existen poderes regionales muy poderosos. Hay una reforma pol¨ªtica pendiente y, si mantenemos las mismas reglas en 2012, construir¨ªamos un escenario mucho m¨¢s complejo.

P. Una encuesta difundida en marzo indica que la instituci¨®n peor valorada entre los mexicanos son los partidos pol¨ªticos, por debajo incluso de los bancos y la polic¨ªa. Solamente el 6% conf¨ªa en sus legisladores. ?A qu¨¦ responde el desencuentro entre un pueblo y sus representantes?

R. La figura del legislador en M¨¦xico no tiene la confianza que deber¨ªa tener un cargo de este tipo. Se trabaja de manera muy distante al ciudadano. Por extra?o que parezca, no se le ve como quien tiene la responsabilidad de construir leyes. Aunque tambi¨¦n es un M¨¦xico en peque?o. En el Congreso, vemos al pa¨ªs. As¨ª somos. Pero aqu¨ª tambi¨¦n ocurre que las reglas son obsoletas. Tenemos un reglamento de principios del siglo pasado. M¨¦xico funciona mirando al pasado.

P. ?Existe una aut¨¦ntica colaboraci¨®n en la guerra contra el crimen organizado entre el Gobierno federal y los Gobiernos regionales?

R. En las instituciones federales existen organismos de transparencia para rendir cuentas a los ciudadanos. En los poderes regionales esto todav¨ªa no existe y fomenta cacicazgos sin l¨ªmites. Falta construir un sistema federalista. Hay muchas ¨¢reas, no solo en la seguridad, donde no est¨¢ definida la responsabilidad de cada ¨®rgano de Gobierno. La gran mayor¨ªa de los delitos son responsabilidad de los Gobiernos locales, y hay pol¨ªticos, algunos de muy alto nivel, que responden: "Esos son problemas del Gobierno federal". El presidente ha convocado un di¨¢logo para hacer una pol¨ªtica de Estado y aclarar las competencias, pero M¨¦xico est¨¢ atado al pasado. Nada causa m¨¢s des¨¢nimo a los ciudadanos que observar una clase pol¨ªtica a la que le cuesta trabajo ponerse de acuerdo.

P. ?Qu¨¦ hace falta para que M¨¦xico tenga una mujer en la presidencia?

R. La presidencia no es una decisi¨®n de g¨¦nero. No es una cuesti¨®n de ser mujer u hombre, es saber qui¨¦n tiene la mejor propuesta para el pa¨ªs. Los votantes son los que decidir¨¢n si el pa¨ªs est¨¢ preparado, pero en M¨¦xico uno de cada cinco hogares es encabezado por una mujer. Existen m¨¢s de cinco millones de mujeres que son jefas de familia. Nadie les fue a preguntar si estaban listas.