La cultura del despilfarro

Cada vez con mayor insistencia las compa?¨ªas telef¨®nicas se empe?an en vendernos sus productos con mayor af¨¢n. En concreto, la compa?¨ªa telef¨®nica que yo utilizo, en el ¨²ltimo folleto que he recibido, te propone que "si quieres estrenar m¨®vil, puedes hacerlo gratis cada a?o". Para ello te ofrecen una gran variedad de modelos a cambio de puntos o pagando un suplemento.

Todo esto puede parecernos muy normal en estos tiempos en los que nos ha tocado vivir, pero si nos paramos a pensar en el gran despilfarro que supone consumir un producto que en realidad no nos hace falta el absurdo se hace patente, puesto que ya disponemos de un aparato que funciona perfectamente, que tiene todo y m¨¢s de lo que necesitamos y que puede durarnos a¨²n varios a?os. Y esto no es un hecho aislado. Algo parecido ocurre con los autom¨®viles, los ordenadores, los electrodom¨¦sticos y toda una larga lista de productos que ya han alcanzado un alto grado de sofisticaci¨®n.

Es cierto que el consumo produce riqueza, ya que genera que el dinero se mueva y que se creen puestos de trabajo para producir esta demanda, pero algo me dice que esto no puede a largo plazo ser beneficioso, algo me dice que producir por producir escapa de toda l¨®gica y que al mismo tiempo estamos produciendo una sociedad absolutamente dependiente y caprichosa, especialmente en los adolescentes, que son mucho m¨¢s manipulables.

Ya s¨¦ que esta reflexi¨®n puede parecer una idea ut¨®pica, pero ?acaso no se puede producir riqueza y bienestar de una manera m¨¢s beneficiosa y acorde con el medio ambiente? Es posible que los economistas, los cient¨ªficos o quiz¨¢s los pol¨ªticos que no ambicionan el poder conozcan la soluci¨®n a esta pregunta. Lo que est¨¢ claro, y m¨¢s despu¨¦s de esta fuerte crisis que estamos padeciendo, es que el sistema econ¨®mico que hemos llevado hasta ahora no funciona. Algo me dice que de seguir as¨ª vamos por un camino equivocado.