La paz, no el olvido
Rutas, libros y exposiciones recuerdan al poeta M¨¤rius Torres en su centenario
"O Pare de la nit, de la pau i del silenci, / Jo vull la pau- per¨° no vull l'oblit", escribir¨¢, sin acritud ante la muerte inminente y sabida, con la serenidad que marc¨® su obra, el poeta Marius Torres el 1 de septiembre de 1942, apenas tres meses antes de fallecer. Quiz¨¢ lo ten¨ªa todo para ese olvido: por un lado, una tuberculosis que, con 25 a?os, le recluir¨ªa durante siete en el sanatorio de Puig d'Olena desde 1935; por otro, su estallido l¨ªrico en plena Guerra Civil. Ocurri¨® todo lo contrario: su muerte en plena juventud le ha convertido en un mito de la poes¨ªa catalana. Pero hay que recordar tambi¨¦n su verso, ocasi¨®n que brinda el centenario de su nacimiento, el 30 de agosto. As¨ª, dos d¨ªas antes, la Instituci¨® de les Lletres Catalanes promueve, con intenci¨®n de estabilizarla, una ruta literaria por Sant Quirze de Safaja, localidad donde yace el poeta y cercana al sanatorio que le acogi¨® en sus ¨²ltimos a?os.
El paseo dar¨¢ visibilidad a actos y ediciones que est¨¢n ya conmemorando al hijo del m¨¦dico Humbert Torres, alcalde de Lleida, y de la maestra Maria Pere?a, la que le inculc¨® la m¨²sica, tanto que le llev¨® a practicar la cr¨ªtica en publicaciones como La jornada. Una contundente nota suya ah¨ª puede leerse en la Biblioteca de Catalunya, que exhibe, hasta el 7 de agosto, sus fondos sobre el poeta.
En la misma vitrina, el Bolet¨ªn del Sindicato de M¨¦dicos de Catalu?a de 1934 recoge las altas con el m¨¦dico internista M¨¤rius Torres. Pero le perd¨ªa el arte po¨¦tico, que estallar¨¢ en el sanatorio. "Si quisiera resumir qu¨¦ me han aportado estos ¨²ltimos cuatro a?os, le dir¨ªa que, por un lado, la reafirmaci¨®n de mi vocaci¨®n, la consciencia que soy esencialmente esta cosa absurda: un poeta l¨ªrico", le confesaba a Carles Riba, a seis meses de morir. Lo har¨ªa, con su familia en el exilio, quedando in¨¦dito, pero habiendo presentado en 1937 una selecci¨®n po¨¦tica, Invencions, al premio Folguera, que pas¨® desapercibida. "Era para vencer cierta sensaci¨®n de impotencia en plena Guerra Civil, aunque no descartar¨ªa que quisiera ver si su poes¨ªa se valoraba", apunta Margarida Prats, autora del reciente Poesies de M¨¤rius Torres (Pag¨¨s), donde incorpora ocho poemas in¨¦ditos y presenta una definitiva ordenaci¨®n desde la salida en 1947 en M¨¦xico del libro que editara Joan Sales.
Prats abrir¨¢ el ciclo de conferencias Leer a M¨¤rius Torres, hoy, que en septiembre se realizar¨¢ en la biblioteca de Lleida, su ciudad, que ultima exposiciones (mariustorres.paeria.cat). Tambi¨¦n habr¨¢ lectura de poemas en el Horiginal de Barcelona. ?Resiste hoy su poes¨ªa, tan adusta de forma y fondo? "Su vigencia es total -exclama Prats- porque Torres trata el dolor, la guerra, el miedo... de una manera que un lector de hoy puede hacer suyo porque ha vaciado de toda particularidad". ?Y la forma? "Los j¨®venes se cogen a sus tankas, pero en sus sonetos su forma no es constricci¨®n. No, no hay en ¨¦l nada triste ni tenebroso". Gran poeta, pues.
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