Ciberp@¨ªs se traslada a la web y al diario

Este es el ¨²ltimo n¨²mero de Ciberp@¨ªs que se publica como suplemento de los jueves. Pero no se trata de un adi¨®s. Al contrario. El diario abre una nueva etapa en la informaci¨®n tecnol¨®gica. El mismo equipo period¨ªstico de Ciberp@¨ªs, reforzado, contribuir¨¢ a dinamizar los contenidos informativos de la web, con una clara apuesta por la informaci¨®n en torno a las nuevas tecnolog¨ªas. Adem¨¢s, diariamente, a partir del lunes, se publicar¨¢ una p¨¢gina en el peri¨®dico con la misma filosof¨ªa que ha inspirado este suplemento, la atenci¨®n a las novedades en el planeta digital y, sobre todo, a la cultura de uso que los ciudadanos imponen, apoyando determinadas apuestas e ignorando otras.

El 12 de marzo de 1998 se publicaba el primer n¨²mero del suplemento Ciberp@¨ªs. La portada estaba encabezada por una informaci¨®n sobre la avalancha de asaltos pirata en EE UU en organismos oficiales y por el truco digital que estaba detr¨¢s del filme de Alejandro Amen¨¢bar Abre los ojos. La direcci¨®n del diario decidi¨® abrir este espacio en un contexto informativo muy distinto del actual. Las publicaciones generalistas pr¨¢cticamente ignoraban lo que empezaba a suceder en Internet (la web apenas ten¨ªa ocho a?os) y las noticias sobre nuevos programas y m¨¢quinas se consideraba un patrimonio de publicaciones especializadas. Hace 12 a?os, apenas un mill¨®n y medio de espa?oles hab¨ªan usado Internet en el ¨²ltimo mes, m¨¢s como herramienta de trabajo que como un mayordomo imprescindible de su vida. Por aquel entonces, en muchos ¨¢mbitos se ve¨ªan las nuevas tecnolog¨ªas como un fetiche sospechoso. Como recordamos en el n¨²mero 500, cada nueva tecnolog¨ªa tras sus l¨®gicos accidentes, antes de que hubiera trenes no hab¨ªa descarrilamientos, pero ello no ha de imponer un discurso refractario a las mismas, sobre todo, como es el caso, cuando van a cambiar radicalmente nuestras vidas. Ciberp@¨ªs naci¨® para difundir la cultura digital y para reflexionar entre todos sobre los horizontes que se abr¨ªan. Y 12 a?os m¨¢s tarde, la convivencia del ciudadano con las tecnolog¨ªas es algo cotidiano. EL PA?S apuesta, pues, porque ello tambi¨¦n tenga un reflejo en el d¨ªa a d¨ªa, sin que el lector tenga que aguardar a una publicaci¨®n semanal. La tecnolog¨ªa, como sujeto de noticias y an¨¢lisis, es un ¨ªtem cotidiano y como tal debe tener su reflejo en las p¨¢ginas diarias. Nueva etapa, pues, para la que el diario espera seguir contando con el apoyo, sin arrinconar la cr¨ªtica, como ha sido hasta ahora, de sus lectores en este proyecto.