"Ha llegado el momento de buscar un acuerdo realista para el S¨¢hara"
Atribuye su nuevo cargo a la confianza que tiene en ella Rodr¨ªguez Zapatero. Espera que Marruecos y el Polisario busquen una soluci¨®n para el S¨¢hara y es optimista sobre la cumbre de la Uni¨®n por el Mediterr¨¢neo en Barcelona.
Trinidad Jim¨¦nez (M¨¢laga, 1962) se ha subido al despacho de ministra de Asuntos Exteriores y Cooperaci¨®n, en la planta 13 del complejo madrile?o Torres ?gora, como a un tren en marcha. El lunes se estren¨® en Luxemburgo, discutiendo con sus colegas de la UE la pol¨ªtica hacia Cuba, y ayer, pocas horas despu¨¦s de recibir a EL PA?S, vol¨® a Argentina para asistir al funeral de N¨¦stor Kirchner. Contesta segura y sin papeles, como si nunca se hubiera ido de una casa donde fue secretaria de Estado para Iberoam¨¦rica de 2006 a 2009; como si no hubiera pasado el ¨²ltimo a?o y medio bregando con la gripe A o la ley antitabaco y los tres ¨²ltimos meses disputando la batalla por la candidatura socialista a la presidencia de la Comunidad de Madrid, de la que sali¨® derrotada, aunque sin rasgu?os aparentes.
"Cubillas no est¨¢ ya en manos de la pol¨ªtica, sino de la justicia"
"Todas las partes buscan una excusa para estar el 21 en la cumbre de Barcelona"
"No entiendo que se considere un dem¨¦rito en pol¨ªtica ser leal"
"Todos los pa¨ªses reconocen que algo se est¨¢ moviendo en La Habana"
Pregunta. Si hubiese ganado a Tom¨¢s G¨®mez, hoy no estar¨ªa aqu¨ª. ?No hay mal que por bien no venga?
Respuesta. Es verdad que en pol¨ªtica no siempre he elegido lo que m¨¢s me apetece, sino lo que cre¨ªa que pod¨ªa ser m¨¢s ¨²til. Cuando me present¨¦ a las primarias lo hice para ganar. No me hice ning¨²n otro planteamiento, porque ten¨ªa que concentrar todo mi esfuerzo en ese objetivo. Lo que no puedo negar es que ser ministra de Asuntos Exteriores y Cooperaci¨®n es un gran privilegio, y adem¨¢s una gran responsabilidad.
P. Su nombramiento se ha interpretado como una forma de recompensar su lealtad.
R. Cuando el presidente me llam¨®, me dijo: "Si no estuviera completamente seguro de que vas a hacer un gran trabajo, nunca te nombrar¨ªa". Supongo que el principal factor es la confianza en la tarea que pueda desarrollar, pero tampoco entiendo que pueda considerarse un dem¨¦rito en pol¨ªtica ser leal. En un Gobierno y en un partido la lealtad es un factor fundamental.
P. ?Est¨¢ superada la Posici¨®n Com¨²n de la UE sobre Cuba o sigue plenamente vigente?
R. El hecho de que los 27 pa¨ªses hayamos decidido otorgar un mandato a la Alta Representante [Catherine Ashton] para que inicie conversaciones con el Gobierno cubano tiene enorme trascendencia. Es un dato que va m¨¢s all¨¢ de la formalidad de si se mantiene o no la posici¨®n.
P. El canciller cubano ha replicado con desd¨¦n: "Que no sue?e Europa en normalizar relaciones mientras haya Posici¨®n Com¨²n".
R. Su pretensi¨®n era la derogaci¨®n de la Posici¨®n Com¨²n. Como no se logr¨® esa formalidad, mantienen cierto escepticismo. En diplomacia es muy dif¨ªcil lograr las cosas en un solo paso.
P. ?Se atreve a poner fecha de caducidad a la Posici¨®n Com¨²n?
R. Para m¨ª ya ni siquiera cuenta. Desde el momento en que Ashton empiece a negociar, la Posici¨®n Com¨²n queda en suspenso, congelada. Vamos a ver hasta donde se llega...
P. Cuba ha liberado a 42 presos, pero siguen entre rejas quienes se niegan a venir a Espa?a.
R. Hemos defendido que los excarcelados puedan quedarse en Cuba. Y tambi¨¦n que quienes han venido a Espa?a tengan posibilidad de volver. Por eso es muy importante que conserven sus casas y propiedades.
P. Demostrar que no se cambia c¨¢rcel por exilio convencer¨ªa a los pa¨ªses m¨¢s esc¨¦pticos...
R. Todos los pa¨ªses reconocen que algo se est¨¢ moviendo en La Habana. Todos. Con independencia de que unos crean que el movimiento es m¨¢s intenso y otros lo consideren un gesto menor. La UE est¨¢ a la expectativa para ver cu¨¢l ser¨¢ el siguiente paso. Igual que La Habana.
P. ?Extraditar¨¢ Venezuela al etarra Arturo Cubillas?
R. El Consejo de Ministros ha decidido tramitar su extradici¨®n, a petici¨®n de la Audiencia Nacional. Veremos c¨®mo reacciona el Gobierno de Caracas. Cubillas tiene la nacionalidad venezolana, por lo que se podr¨ªa denegar su extradici¨®n pero, en virtud del acuerdo bilateral, deber¨ªa responder de las acusaciones en Venezuela. A partir de ahora, el tema ya no est¨¢ en manos de la pol¨ªtica, sino de la Justicia.
R. Lo que s¨ª est¨¢ en manos de la pol¨ªtica es mantenerlo o no en un cargo de confianza en el Gobierno de Ch¨¢vez.
R. Estamos trabajando con todos los Gobiernos para que colaboren activamente en la lucha contra ETA. Con Venezuela tambi¨¦n. Ya ha habido resultados y vamos a seguir trabajando. Creo que lo m¨¢s eficaz es mantener una actitud de di¨¢logo permanente, desde el respeto.
P. Moratinos cit¨® el conflicto del S¨¢hara como un asunto que dejaba pendiente. ?Vale la pena enfrascarse en ¨¦l?
R. Hay que intentarlo. Es verdad que hemos suscrito todas las resoluciones de la ONU que hablan del derecho a la autodeterminaci¨®n del pueblo saharaui pero, para que se haga realidad, tiene que haber un acuerdo entre las partes. Nosotros podemos ayudar, pero ya ha llegado el momento de que las partes se sienten y busquen una soluci¨®n realista. ?C¨®mo se satisface ese derecho? Eso deben decidirlo Marruecos y el Frente Polisario. Me alegro de que hayan decidido mantener conversaciones en Nueva York la pr¨®xima semana.
P. ?Espa?a ve bien el plan marroqu¨ª de autonom¨ªa?
R. Espa?a ver¨¢ bien lo que sea fruto del acuerdo entre las dos partes.
P. La muerte de un adolescente por disparos de la Gendarmer¨ªa marroqu¨ª ha elevado la tensi¨®n en la acampada de protesta saharaui cerca de El Aai¨²n.
R. Habl¨¦ con mi hom¨®logo marroqu¨ª [Taieb Fassi-Fihri] porque me llam¨® para felicitarme. Me explic¨® en qu¨¦ circunstancias se produjo la muerte de este joven y me dijo que el m¨¢ximo inter¨¦s de Marruecos era mantener un di¨¢logo con quienes est¨¢n en el campamento para evitar un estallido de violencia. Creo que ese di¨¢logo ha dado sus frutos y espero que se pueda hallar una soluci¨®n.
P. ?Condena usted lo sucedido?
R. Claro que lamentamos, y as¨ª se lo dije al ministro, la muerte de este joven, pero el propio Fassi-Fihri me dijo que iba a ser objeto de una investigaci¨®n y, hasta que concluya, una m¨ªnima prudencia debe imperar a la hora de manifestarme, sobre todo cuando me dio todo tipo de explicaciones sin que yo se las pidiera.
P. ?Le cont¨® Moratinos cu¨¢l fue la causa de la crisis de Melilla durante el pasado verano?
R. Para m¨ª est¨¢ claro que fue un incidente fronterizo. Espa?a y Marruecos mantenemos posiciones muy diferentes sobre Ceuta y Melilla. Para nosotros no hay ninguna duda sobre la soberan¨ªa. No es un asunto que forme parte siquiera de nuestras conversaciones bilaterales. Cada uno conoce la posici¨®n del otro.
P. ?Se celebrar¨¢ finalmente la cumbre de la Uni¨®n por el Mediterr¨¢neo (UPM), prevista en Barcelona el 21 de noviembre?
R. Espero que s¨ª. Una vez que hemos logrado elegir secretario, encontrar sede... posponer de nuevo la reuni¨®n podr¨ªa interpretarse como que la Uni¨®n por el Mediterr¨¢neo no consigue arrancar. Es muy importante el conflicto entre israel¨ªes y palestinos y es verdad que la UPM se cre¨® en parte para que los pa¨ªses de la regi¨®n arropen el proceso de di¨¢logo, pero deber¨ªamos evitar que la pol¨ªtica euromediterr¨¢nea est¨¦ condicionada exclusivamente por este asunto. Creo que todos los pa¨ªses, incluidos israel¨ªes y palestinos, estamos buscando una excusa para poder reunirnos. Espero que de aqu¨ª al d¨ªa 21 podamos tener alguna se?al positiva.
P. ?Vendr¨¢ Obama?
R. Indudablemente ser¨ªa un elemento muy positivo, pero a¨²n no podemos aventurar la presencia del presidente Obama.
P. Usted ha llegado a un ministerio cuya c¨²pula renov¨® su predecesor en los ¨²ltimos tres meses. ?Planea hacer cambios?
R. En funci¨®n del an¨¢lisis que haga sobre cu¨¢les son los elementos en los que me gustar¨ªa poner mayor ¨¦nfasis, con el objetivo de reforzar determinadas lineas de trabajo, tomar¨¦ las decisiones que tenga que tomar. Pero no voy a tomar una decisi¨®n sin un an¨¢lisis previo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.