"No se ha hecho justicia"
Su padre mat¨® a su madre tras 42 a?os de maltrato - Los jueces le condenaron el viernes por homicidio - Ella ha hipotecado su casa para los gastos del juicio, cuyo fallo va a recurrir
Se ha quedado al borde de las l¨¢grimas al ver la sentencia que condena por homicidio -y no por asesinato- a su padre por haber matado a su madre. Mejor recurrir que llorar, ha decidido Natalia Serrano Lang. Y eso har¨¢, porque "no se ha hecho justicia". Llama asesino a su progenitor, contra el que declar¨® tras un biombo a finales de octubre, cuando se hab¨ªan cumplido dos a?os desde el d¨ªa fat¨ªdico: aquel 23 de septiembre de 2008 en que Antonio Serrano Checa mat¨® de 11 pu?aladas a su esposa, la alemana Christine Lang, en la casita de campo donde se hab¨ªa refugiado. Era la v¨ªspera de la vista de divorcio. La mujer lo hab¨ªa pedido tras 42 a?os de maltrato sin una sola denuncia.
Natalia Serrano (Fr¨¢ncfort, Alemania, 1966), administrativa en paro tras acabar su contrato en el Ministerio de Cultura y en tratamiento psicol¨®gico desde la muerte de su madre, ha hipotecado su casa para afrontar los gastos del juicio. Siente "terror" a que su padre -condenado a 15 a?os de prisi¨®n- pueda salir de la c¨¢rcel en alg¨²n momento.
"Las instituciones se vuelcan al principio. Ahora me siento sola"
"Me enter¨¦ de c¨®mo hab¨ªa muerto por una providencia del juzgado"
"Llegas a creer que la violencia es algo normal y quedas atrapada"
"Mi madre me dijo: 'He escuchado a Gemma Nierga y soy una maltratada"
Pregunta. Hija del agresor y de la v¨ªctima. ?C¨®mo se vive con eso?
Respuesta. No es solo una tragedia tremenda. Vivir con ello es superdif¨ªcil. Es algo que vas a tener ah¨ª el resto de tu vida. El dolor se ir¨¢ mitigando, pero siempre va a estar ah¨ª. Tambi¨¦n est¨¢n los problemas burocr¨¢ticos, legales, financieros con los que uno se encuentra luego.
P. Adem¨¢s de la tragedia...
R. Los funcionarios dan por hecho que uno sabe c¨®mo funciona todo lo que viene despu¨¦s, y no es as¨ª. Seis d¨ªas despu¨¦s del asesinato de mi madre me llamaron para que me presentara en los juzgados sin saber para qu¨¦. Me encontr¨¦ con el juez instructor, la fiscal¨ªa y la abogada defensora. Me interrogaron y yo iba sin abogado, sin nada.
P. ?Se sinti¨® indefensa?
R. Totalmente. Me di cuenta de que, o me andaba lista, o la maquinaria de la burocracia y la legislaci¨®n me iba a comer viva. En lugar de sentarme a llorar a mi madre, cosa que hac¨ªa en la intimidad y por las noches, busqu¨¦ un buen abogado y vi c¨®mo actuar. No he tenido tiempo para el duelo.
P. ?Nadie asesora a las v¨ªctimas colaterales?
R. No. La intenci¨®n es muy buena. Al principio se vuelcan, pero me siento sola, desamparada por las instituciones. Me enter¨¦ de c¨®mo hab¨ªa muerto mi madre por una providencia del juzgado.
P. ?Se ha sentido culpable de la muerte de su madre?
R. No, y eso que hay gente lo ha intentado con comentarios como "?por qu¨¦ no te llevaste a tu madre?", "?por qu¨¦ no denunciaste los malos tratos?".
P. ?Por qu¨¦ no lo hizo?
R. Porque llevarse a la persona no arregla el problema. La iba a acoger cuando se produjera el divorcio. Solo cuando hab¨ªa muerto me enter¨¦ de que le hab¨ªan ofrecido una casa de acogida porque ten¨ªa un perfil de riesgo. Cuando contaba lo violento que era mi padre, la gente me dec¨ªa que no era para tanto.
P. ?Se llega a considerar que la violencia es normal cuando se convive con ella?
R. S¨ª. Hubo una ¨¦poca en la que yo pas¨¦ por un sometimiento similar en una relaci¨®n de pareja. Lo hablaba con mi madre y ella me dec¨ªa "hija, es que los hombres son as¨ª". Hasta que un d¨ªa dije ?qu¨¦ van a ser as¨ª! Entonces volv¨ª a la lucha de explicarle que ella no pod¨ªa seguir as¨ª.
P. ?Qu¨¦ edad ten¨ªa usted?
R. Cerca de 30 a?os. Mi madre ven¨ªa de una situaci¨®n muy dif¨ªcil. Hija de la guerra, con un padre violento que se ensa?aba con su mujer y con su hija. Mi padre se encarg¨® de continuar con ello. La aislaba y as¨ª ella no pod¨ªa ver que hab¨ªa otro tipo de vida. Empez¨® a descubrir eso cuando tomamos la decisi¨®n de que se divorciara.
P. Parece una condena hereditaria. Su abuela, su madre y usted han sufrido malos tratos.
R. S¨ª. Va pasando de generaci¨®n en generaci¨®n. Adoptamos los modelos de conducta que vemos en casa y si no tienes la posibilidad de salir de ese c¨ªrculo te crees que es algo normal y te quedas atrapada.
P. Su madre aguant¨® 42 a?os antes de pedir el divorcio.
R. Yo le di el empujoncito. Una tarde me dijo "hija, he estado escuchando un programa de Gemma Nierga
sobre mujeres maltratadas psicol¨®gicamente y, por lo que han contado, a m¨ª me parece que yo lo soy". Eso fue en agosto de 2007. Fue como quitar la espita de la granada. "?As¨ª te das cuenta, con todo lo que yo te he dicho durante a?os?", le contest¨¦. Ella estaba muy deprimida. Tan anulada que cuando la abogada le preguntaba algo me miraba para que contestara yo. Y eso una mujer que era enfermera de neonatos, hablaba cuatro idiomas y le interesaba la vida.
P. ?Por qu¨¦ qued¨® atrapada con esas cualidades?
R. Porque mi padre la ten¨ªa aterrorizada.
P. ?El detonante del crimen fue el divorcio?
R. No. Fue el dinero, el reparto de los bienes que hab¨ªa que hacer. ?l la ha matado porque no hizo su sant¨ªsima voluntad, como siempre hab¨ªa hecho.
P. ?Qu¨¦ siente hacia su padre?
R. Algo de indiferencia y una inmensa tristeza por c¨®mo nos ha destrozado la vida a todos, incluido a s¨ª mismo. No era necesario. Pod¨ªamos haber sido muy felices. Somos personas de clase media, una familia m¨¢s de Aluche [un barrio de Madrid]. Jam¨¢s le voy a perdonar la vida que le ha dado a mi madre, sobre todo el ¨²ltimo a?o.
P. ?En qu¨¦ se apoya para salir adelante?
R. En mi madre. Lo ¨²nico que quiso es que yo fuera feliz y lo intento por ella. Me gustar¨ªa luchar contra la violencia de g¨¦nero, pero no s¨¦ c¨®mo. Ojal¨¢ mi experiencia le sirva a alguien.
P. ?Qu¨¦ planes tiene?
R. Estoy muy despistada. He esperado el juicio para que hubiera una especie de corte y poder empezar. Pero ahora veo que no se ha acabado todo. Tendr¨¦ que estar pendiente del recurso, de si ¨¦l ha pedido reducci¨®n de condena, tercer grado... No me puedo olvidar aunque quiera. Es como si me acompa?ara un fantasma.

42 a?os de maltrato, 11 cuchilladas y un homicidio
- La alemana Christine Hedwig Lang y el espa?ol Antonio Serrano se casaron en octubre de 1965 en Suiza. Seg¨²n la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid, los malos tratos duraron desde la boda hasta la muerte de ella, en septiembre de 2008.
- La familia se instal¨® en Madrid en 1974 y abri¨® un bar. Al final, la mujer tuvo que ganarse la vida con un trabajo de asistenta. Era enfermera.
- La Audiencia Provincial ha condenado al marido a 13 a?os por homicidio con abuso de superioridad y agravante de parentesco. Descarta el asesinato por no considerar probada la alevos¨ªa. Considera atenuante que ¨¦l se entregara a la Guardia Civil. El fallo a?ade otros tres a?os de prisi¨®n por violencia de g¨¦nero habitual. Dicta alejamiento de la hija durante 20 a?os.
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