El pop salv¨® a la psicodelia

Es cierto, no parecen los mismos. En el Primavera Sound de 2008 eran un grupo de amigotes que habiendo libado m¨¢s de la cuenta disfrutaban de sus ocurrencias d¨¢ndose la casualidad que delante, f¨ªjese usted, hab¨ªa p¨²blico. Fue el suyo un concierto descacharrado y ca¨®tico que desdec¨ªa la sensaci¨®n de estar ante una banda con futuro. Por contra, la noche del jueves, en un Razzmatazz lleno con todas las entradas vendidas, MGMT parecieron un grupo m¨¢s serio, controlado, eficiente y disciplinado.

Pero no fue s¨®lo por esto por lo que pudo pensarse en que MGMT son una banda cuya popularidad no necesariamente ha tocado techo. La presencia de p¨²blico femenino de la franja 18-21 a?os y el buen resultado general de la actuaci¨®n provocar¨¢n de forma inexorable que la pr¨®xima vez acudan todos los amigos de estas avanzadas j¨®venes que el jueves eran como pioneras de su grupo de edad en un contexto dominado por personas m¨¢s adultas que ellas. Pero para todos, MGMT despleg¨® el encanto visual de su psicodelia, de sus sonoros c¨ªrculos en espiral, de sus melod¨ªas retorcidas, su sabor a?ejo y de un espect¨¢culo visual con paramecios. Psicodelia pop.

Aun con todo, lo m¨¢s destacable del grupo sigue siendo su apellido: pop. Cuando MGMT la clavan, lo hacen con canciones estimulantes, burbujeantes y llenas de euforia. En mayor o menor grado son temas como Electric feel, su inenarrable Kids o Time to pretend. No son muchas las canciones en las que una melod¨ªa afortunada da sentido a las derivaciones, que sin este apoyo quedan en meras especulaciones. Aun con todo, su concierto, concluido con un tema lento, hele ah¨ª narices, mostr¨® a una banda que a¨²n tiene camino para crecer en popularidad. Quiz¨¢s lo haga. Aunque necesita m¨¢s Kids.