Primarias de rebajas

Jordi Hereu y Montserrat Tura se enfrentar¨¢n el pr¨®ximo 19 de febrero en las primeras elecciones primarias, valga la redundancia, que el Partit dels Socialistes celebra en su historia. Si Catalu?a y Espa?a fuesen pa¨ªses acostumbrados a primarias, con partidos que presentan listas abiertas y donde los ciudadanos fijan libremente el orden de candidatos, seguramente todo este procedimiento ser¨ªa completamente normal. Pero parafraseando lo que anta?o se dec¨ªa sobre la perversa relaci¨®n entre el pescado y el pobre, cuando las primarias entran en un partido es que uno de los dos est¨¢ mal. Y es que no se tiene recuerdo de unas primarias que hayan terminado bien. Por su excepcionalidad, cada vez que se convocan es porque el socialismo -ya sea el PSC o el PSOE- se halla al borde del precipicio. Los aparatos las toleran como recurso cuando ya no queda nada en la despensa. Y ya se sabe, en situaci¨®n de necesidad o todos caen en la sima o los militantes acaban chocando con la voluntad de la direcci¨®n. Ah¨ª tenemos a Josep Borrell contra Joaqu¨ªn Almunia y, m¨¢s recientemente, el culebr¨®n que promete un final con grandes escenas de acci¨®n entre Tom¨¢s G¨®mez y Trinidad Jim¨¦nez.

Con todo lo rebajadas que est¨¦n, los candidatos deben tomar las primarias en serio y presentar sus proyectos

Est¨¢ visto que hay que aguardar alguna cat¨¢strofe natural o sobrevenida para que el socialismo nos depare unas elecciones primarias, aunque sean de rebajas. Y con todas sus limitaciones, las que el pr¨®ximo d¨ªa 19 de febrero organiza el PSC en Barcelona son una peque?a bocanada de aire fresco en la gran habitaci¨®n del viciado y taciturno socialismo catal¨¢n. Ante la derrota que vaticinan las encuestas para el PSC en la capital catalana, la direcci¨®n nacional ha decidido hacer de la necesidad virtud. As¨ª que ante la imposibilidad de lograr que Hereu se retire, el PSC ha optado por abrir primarias. La federaci¨®n de Barcelona, que ha batallado incansablemente para evitar que el alcalde fuese defenestrado, ha decidido eliminar el blindaje del 40% de avales para quien se presente como candidato. Todo un detalle de juego limpio y tambi¨¦n una muestra de que, cuando todo funciona como un reloj, el poder no es cosa de broma y hay que evitar sobresaltos. Por eso el porcentaje del 40% permite que un alcalde resista mejor que la carrocer¨ªa de los m¨ªticos Panzer IV nazis.

Si alg¨²n curioso quiere consultar v¨ªa Internet el reglamento de primarias, no podr¨¢. El libro de la sabidur¨ªa partidista queda reservado a los grandes hermeneutas. No es p¨²blico. Es como si, de pronto, resucitara de aquel himno de la desaparecida RDA el pasaje, Die Partei hat immer Rect, (el partido siempre tiene raz¨®n).

Con todo lo rebajadas que est¨¦n, estas primarias son las ¨²nicas realmente existentes y los candidatos deben tomarlas en serio. Han de molestarse en hacer llegar a sus simpatizantes y militantes su visi¨®n sobre qu¨¦ hacer con el turismo en Ciutat Vella, c¨®mo acabar con la corrupci¨®n de los funcionarios municipales en la concesi¨®n de licencias, c¨®mo parar el grado de guetizaci¨®n de la periferia de Barcelona, c¨®mo hacer compatible la ciudad de las personas con la ciudad millor botiga del m¨®n. En fin, cosas que en general preocupan al electorado de izquierdas que ha conseguido sobrevivir al tripartito.

Hay quien echa en cara a Tura su condici¨®n de cunera, pues no ha nacido en Barcelona y exhibe orgullosa su pertenencia a Cal Pinyonaire de Mollet del Vall¨¨s. Parad¨®jicamente a Bartomeu Mu?oz, ex alcalde socialista de Santa Coloma de Gramenet imputado judicialmente por el caso Pretoria, nadie le reproch¨®, mientras ejerc¨ªa el cargo, que viviese en el elegante y exclusivo Tur¨® Parc de Barcelona.

La ventaja de Hereu es que tiene mejor conocimiento de la ciudad que Tura. En cambio, la ex consejera cuenta con un perfil pol¨ªtico del que renquea el alcalde. As¨ª que puestos a primarias de rebajas veamos qu¨¦ da de s¨ª la fiesta. Los argumentos deben ir m¨¢s all¨¢ del intento publicitario de eclipsar la actividad del opositor Xavier Trias, al que las encuestas dan hasta como ahora ganador. Para conocer el desenlace solo quedan cuatro meses.