Espa?a encuentra su l¨ªmite

Espa?a tan solo podr¨¢ disputar la medalla de bronce a Suecia, en el Campeonato del Mundo sueco, despu¨¦s de perder anoche frente a Dinamarca. El equipo de Valero Rivera luch¨® hasta la extenuaci¨®n, nunca agot¨® sus fuerzas y se mantuvo en el partido hasta los ¨²ltimos minutos. Pero los daneses se mostraron como un conjunto m¨¢s compacto y, con el apoyo de los 4.500 espectadores del pabell¨®n de Kristianstad, se metieron en la final del campeonato con todos los m¨¦ritos. En el ¨²ltimo partido se enfrentar¨¢n ma?ana a la temible Francia en lo que ser¨¢ un duelo entre las dos mejores selecciones del momento.

Valero sorprendi¨® colocando a Hombrados en el equipo inicial. Los jugadores daneses lo celebraron porque ya hab¨ªan anunciado que su principal temor era encontrarse a Sterbik bajo los palos. Lo cierto es que la defensa en 5-1 no estaba ajustada al principio y eso tampoco ayud¨® al portero madrile?o. Hab¨ªan transcurrido 15 minutos cuando Dinamarca se marchaba ya en el marcador por cuatro goles (6-10). Rivera tom¨® entonces la decisi¨®n de dar entrada a Sterbik.

El t¨¦cnico sorprendi¨® alineando de entrada a Hombrados en vez de al temido Sterbik

El conjunto espa?ol luch¨® con todas sus fuerzas y se mantuvo vivo hasta el final

El acierto del cambio se not¨® casi de forma inmediata. La presencia de Sterbik actu¨® como una losa en la mentalidad de los daneses, que comenzaron a mostrar debilidades en el ataque. Segu¨ªan moviendo bien el bal¨®n, pero en el momento de realizar el lanzamiento ve¨ªan al portero del Ciudad Real y parec¨ªan obnubilarse. Las ideas se les cruzaron de tal forma que el decorado cambi¨® de forma espectacular. Aquel dominio inicial se transform¨® en temor. Y, de golpe, Espa?a logr¨® un parcial de 4-0 y empat¨® el partido, dejando a los daneses nueve minutos sin marcar (10-10).

Sin embargo, aquello eran solo los escarceos iniciales. Nada se estaba decidiendo todav¨ªa. Espa?a hab¨ªa salvado la primera situaci¨®n complicada. Y fue capaz de mantener la igualdad hasta el descanso (12-12). Pero la calidad del equipo dan¨¦s segu¨ªa siendo incuestionable. Nadie hab¨ªa tirado la toalla. Sus lanzadores, Hansen, Sondergaard y Christiansen, recuperaron r¨¢pidamente su efectividad, la entrada de Noddesbo y de Knudsen en el pivote dinamiz¨® el ataque y la buena conducci¨®n de Spellerberg y Boesen en los momentos en que estaban en la pista permitieron a Dinamarca recuperar la compostura.

El partido volv¨ªa a abrirse del todo. Dinamarca mostraba de nuevo su potencial y explicaba por qu¨¦ hab¨ªa llegado a las semifinales habiendo ganado holgadamente todos sus partidos. Al margen de su cerrada defensa en 6-0, detr¨¢s hab¨ªa un portero, Landin, que se estaba convirtiendo en un muro para Alberto Entrerr¨ªos y Gurbindo. Sin estos dos jugadores, era evidente que Espa?a se quedaba sin tiro exterior y que los daneses ten¨ªan motivos para sentirse mucho m¨¢s fuertes en su tenaz cerrojo.

No obstante, Espa?a segu¨ªa estando all¨ª, agazapada, sin perder la concentraci¨®n defensiva, robando balones, manteniendo la igualdad en el marcador (16-17). Y lo hac¨ªa sin contar con hombres tan fundamentales como Alberto Entrerr¨ªos y Aguinagalde, con una primera l¨ªnea con Ra¨²l en el centro y Ca?ellas y Gurbindo en los laterales y con Garabaya en el pivote por primera vez en el torneo.

Un m¨¦rito incuestionable que permiti¨® dar un largo tiempo de reflexi¨®n a Alberto Entrerr¨ªos hasta que pudo volver con las ideas m¨¢s claras. Despu¨¦s, Valero volvi¨® a dar entrada a Hombrados y, con esta recomposici¨®n del equipo espa?ol, se lleg¨® con empate a 23 a cinco minutos del final. Pero despu¨¦s Dinamarca sac¨® a relucir su calidad. Landin par¨® como un condenado y Hansen y Sondergaard cerraron las puertas a Espa?a a una final que jugar¨¢n la selecci¨®n danesa y la francesa.

La supremac¨ªa de Francia, vencedora por 29-26 del cuadro anfitri¨®n, Suecia, en las otras semifinales se antoja incuestionable. En los ¨²ltimos a?os tan solo Espa?a ha conseguido empatarle -tres veces seguidas-, pero nadie ha podido frenar su escalada hasta la cumbre del balonmano mundial.

El equipo que dirige Claude Onesta es el ¨²nico que ha ganado consecutivamente las tres grandes coronas: los Juegos Ol¨ªmpicos de Pek¨ªn 2008, el Mundial de Croacia 2009 y el Europeo de Austria 2010.

Ayer entr¨® con todos los m¨¦ritos en su cuarta final seguida en una gran competici¨®n al superar con holgura a Suecia ante 12.500 hinchas entregados a su selecci¨®n. Espa?a pelear¨¢ por acompa?arles en el podio final.