Un abrazo para Lotina

Algo de bipolar tiene el Deportivo, que a ratos parece el peor equipo de la Liga y en ocasiones muestra recursos para navegar por la clasificaci¨®n sin agobios. Ayer comenz¨® el partido en descenso y lo acab¨® cuatro escalones sobre ¨¦l tras lograr su primera victoria en 40 d¨ªas ante un Villarreal apocado, superado por un oponente en ebullici¨®n que guard¨® el gol de Lopo como un tesoro y no le dio opci¨®n.

Lotina demand¨® durante largo tiempo especialistas que trabajaran por la banda. Ayer, porque algunos est¨¢n lesionados, no han dado la talla o ambas cosas, se apa?¨® sin ellos. Dise?¨® una suerte de cuadrado m¨¢gico en la medular en la que los flancos apenas se ocupaban. Tampoco es que le sobrara magia, pero, al menos, no le falt¨® intensidad.

Azuzado por Juan Dom¨ªnguez, el Deportivo se lanz¨® a por el Villarreal, que recibi¨® el embate con la suficiencia del que se sabe superior. Junt¨® las l¨ªneas y se agrup¨® en torno a Marchena, que, como mediocentro, traz¨® una raya y jug¨® al filo de la expulsi¨®n. Cuando lo necesit¨®, fue cori¨¢ceo el Villarreal para defender su porter¨ªa, que apenas sufri¨® alg¨²n susto cuando el conjunto de Lotina imprimi¨® m¨¢s velocidad a la pelota en los ¨²ltimos 30 metros. Esa es la diferencia entre los buenos y el resto. Quienes tienen esa capacidad para trabajar con frenes¨ª en la zona de la verdad tienen mucho ganado. Si a ello le unen remate, quiz¨¢ se apelliden Messi o Cristiano. Adri¨¢n es L¨®pez ?lvarez y se empe?a en dilapidar en el ¨¢rea todo lo bueno que hace fuera de ella. Como cuando atraves¨® como un espectro el espacio entre dos zagueros para plantarse ante Diego L¨®pez, que le apag¨® la luz.

El d¨ªa y la noche de Adri¨¢n llegaron justamente a la media hora de partido, cuando el Deportivo mengu¨®. Apareci¨® entonces el f¨²tbol combinativo del Villarreal. Garrido hab¨ªa intercambiado la posici¨®n de Cani y Cazorla, que desde la izquierda encontr¨® m¨¢s tiempo y espacio. Recul¨® el Deportivo y Aranzubia tuvo que sacar con una mano prodigiosa un remate de cabeza de Gonzalo a la salida de un c¨®rner. Nada pareci¨® cambiar tras el descanso, pero s¨ª lo hizo cuando el Deportivo encontr¨® el gol. Una vez m¨¢s, la estrategia, una falta que toc¨® en el ¨¢rea Juan Rodr¨ªguez y remat¨® Lopo a la red. Como cuando el ¨²ltimo d¨ªa de octubre un gol suyo abri¨® el camino para salvar a Lotina de las brasas de la destituci¨®n, el central corri¨® a abrazar al t¨¦cnico.