El juez ve fallos del fiscal y absuelve a El Cuco del asesinato de Marta
El magistrado condena al menor a tres a?os de internamiento como encubridor
El juez de Menores de Sevilla Alejandro Vi¨¢n cree que no hay pruebas que demuestren que el menor Javier G. M., El Cuco, viol¨® y asesin¨® a Marta del Castillo en compa?¨ªa de Miguel Carca?o la noche del 24 de enero de 2009. El magistrado ha absuelto al menor, que entonces ten¨ªa 15 a?os, de los delitos de asesinato y agresi¨®n sexual que se le imputaban, pero le ha condenado como encubridor a dos a?os y 11 meses de internamiento en un centro cerrado y un mes m¨¢s en libertad vigilada. El joven ya ha cumplido nueve meses de ingreso preventivo en un centro, el m¨¢ximo que permite la ley, y desde noviembre de 2010 est¨¢ en un piso tutelado, por lo que, si se resta ese tiempo de la condena impuesta ahora por el juez, saldr¨¢ libre en unos meses.
No hay pruebas que le incriminen en la muerte y violaci¨®n de la joven
La condena como encubridor se basa en la autoinculpaci¨®n ante la polic¨ªa
Dado el tiempo que ya ha cumplido, el chico saldr¨¢ a la calle en meses
El magistrado est¨¢ convencido de que El Cuco sabe d¨®nde est¨¢ el cad¨¢ver
El hecho de que el juicio del menor se haya celebrado antes que el de los cuatro imputados adultos (para el que todav¨ªa no hay fecha) deja ahora una circunstancia cuanto menos llamativa: El Cuco es encubridor de un delito que no se ha juzgado. Al juez de menores le ha tocado ser el primero en dictar sentencia sobre lo que ocurri¨® la tarde en la que se perdi¨® el rastro de Marta y su conclusi¨®n es la siguiente: la menor y Carca?o fueron al piso de este y, una vez all¨ª, ¨¦l "le dio muerte". Despu¨¦s llam¨® a su amigo Samuel Ben¨ªtez y a El Cuco, que cogi¨® el coche de su madre y fue al lugar de los hechos, el piso donde estaban Carca?o y su hermano con el cuerpo de Marta. Seg¨²n el juez, los cuatro actuaron "de mutuo acuerdo" para hacer desaparecer el cad¨¢ver, "dando al mismo un destino que a d¨ªa de hoy se ignora completamente". Seg¨²n este relato, El Cuco es encubridor de un delito no juzgado pero que el juez cree que se cometi¨®: el homicidio o asesinato de Marta por parte de Carca?o.
El fallo cay¨® como "un jarro de agua helada" sobre la familia de la v¨ªctima, seg¨²n lo defini¨® el abuelo de la chica, que ten¨ªa 17 a?os cuando se cometi¨® el crimen. Pero lo cierto es que las acusaciones de asesinato y violaci¨®n por las que se juzg¨® a El Cuco adolecieron desde el principio de falta de pruebas, m¨¢s all¨¢ de lo narrado por Carca?o en una de las m¨²ltiples versiones que dio ante el juez durante las primeras semanas de instrucci¨®n del caso. Fue el 17 de marzo de 2009 (un mes despu¨¦s de su detenci¨®n), cuando Carca?o, exnovio de la v¨ªctima y principal acusado de su muerte, pidi¨® volver a declarar ante el juez y confes¨® su versi¨®n m¨¢s cruel: que ¨¦l y su amigo El Cuco, borrachos y drogados, violaron y mataron a la joven y luego se deshicieron del cuerpo arroj¨¢ndolo a un contenedor.
Los investigadores dudaron desde el principio de este relato, que muchos interpretaron como un intento desesperado de Carca?o de esquivar al jurado popular. Pero como tampoco hab¨ªa pruebas de que ninguna de las otras versiones dadas antes o despu¨¦s fuera verdad, esta fue la que se dio por buena y en ella se basaron las acusaciones.
El juez de Menores, sin embargo, no se la cree y lo argumenta ampliamente en la sentencia, tras lo cual concluye: "El Ministerio Fiscal y la acusaci¨®n particular pretenden que este juzgador se crea y considere como hechos probados irrefutables lo que ellos mismos cuestionan o ponen en duda".
El magistrado recuerda que esta misma versi¨®n de Carca?o excluye expresamente de toda participaci¨®n en los hechos a su hermano, la novia de este y su amigo Samuel, a los que, sin embargo, el fiscal y la acusaci¨®n particular han acusado de encubrimiento en el procedimiento que se sigue para juzgar a los cuatro imputados adultos. Si esta declaraci¨®n de Carca?o es la "¨²nica v¨¢lida y verdadera", apunta el juez, "no se comprenden" las acusaciones contra el hermano, la novia y el amigo, salvo que se acuda "al f¨¢cil recurso" de dar por v¨¢lido lo que les beneficia y no lo que les perjudica.
El juez critica, adem¨¢s, la labor del fiscal de Menores, por entender que ha vulnerado "la garant¨ªa de contradicci¨®n" del menor, ya que Carca?o le acus¨® de ser coautor de la violaci¨®n y asesinato de Marta durante una declaraci¨®n ante el juez que instruye la causa de los adultos, por lo que en la misma no estaba presente el abogado del menor. Lo correcto habr¨ªa sido, seg¨²n el magistrado Alejandro Vian, que el fiscal de Menores hubiera llamado a declarar a Carca?o para que el abogado de El Cuco tuviera la ocasi¨®n de interrogarle sobre las acusaciones que vert¨ªa hacia su defendido.
Una vez descartada la existencia de pruebas para acusar de violaci¨®n y asesinato al menor de edad, el juez argumenta por qu¨¦ s¨ª considera que es encubridor. Dos son las pruebas principales: la primera, la autoinculpaci¨®n del chico ante el grupo de Menores de la polic¨ªa el d¨ªa de su detenci¨®n, el 15 de febrero de 2009, ratificada al d¨ªa siguiente ante el fiscal. "Este juzgador no encuentra ning¨²n motivo v¨¢lido para que el menor acusado se declare autor de unos hechos tan graves si no tuvo ninguna intervenci¨®n en los mismos". El joven se desdijo en declaraciones posteriores y asegur¨® que se hab¨ªa autoinculpado por "presiones policiales", pero el juez no le cree. "Esta excusa es burda y es un recurso demasiado habitual y f¨¢cil cuando no se disponen de otras excusas".
La segunda prueba para condenar a El Cuco es el hallazgo de perfil gen¨¦tico del chico mezclado con el de Marta en el piso donde, supuestamente, se cometi¨® el crimen. Seg¨²n el juez, esta mezcla prueba que El Cuco "estuvo presente" en el piso el d¨ªa que se cometieron los hechos y que "tuvo contacto con el cuerpo de Marta".
El juez tiene tambi¨¦n "plena convicci¨®n" de que el menor "conoce el lugar exacto" en el que se encuentra el cad¨¢ver de la v¨ªctima o "el destino que dieron al mismo" o "cuando menos, dispone de datos ciertos que podr¨ªan llevar al lugar" en el que est¨¢ el cuerpo. El magistrado admite que El Cuco est¨¢ ejerciendo sus "derechos constitucionales" al negar conocer el destino del cad¨¢ver, pero cree que tiene "obligaci¨®n moral" con la familia y toda la sociedad de revelarlo.
El fiscal y la familia de la v¨ªctima, que ped¨ªan para El Cuco seis a?os de internamiento por violaci¨®n y asesinato, ya han anunciado que recurrir¨¢n la sentencia ante la Audiencia Provincial de Sevilla. Los padres de la joven improvisaron por la ma?ana una rueda de prensa en la puerta de su casa en la que afirmaron que la sentencia les produce "dolor, rabia, impotencia y decepci¨®n". La madre de la chica, que asegur¨® haber perdido su fe "en la justicia de las salas", afirm¨® que ya solo espera "la justicia carcelaria". El abogado del menor, Fernando de Pablo, que ped¨ªa la libre absoluci¨®n, dijo que estudiar¨¢ si recurre el fallo.
Un caso con muchas sombras
- La desaparici¨®n. La tarde del 24 de enero de 2009 Marta del Castillo, de 17 a?os, sale con su exnovio Miguel Carca?o y no vuelve a casa.
- Primeros detenidos. Tras 21 d¨ªas de b¨²squeda, la polic¨ªa detiene el 13 de febrero a Carca?o y a su amigo Samuel Ben¨ªtez. Ambos confiesan que el primero de ellos mat¨® a la chica y el otro le ayud¨® a tirar el cad¨¢ver al r¨ªo. Empieza la minuciosa b¨²squeda en el r¨ªo Guadalquivir.
- Un menor implicado. Dos d¨ªas m¨¢s tarde, es detenido Javier G., de 15 a?os, que confiesa que ayud¨® a deshacerse del cad¨¢ver. Tambi¨¦n implica al hermano de Miguel, Francisco Javier.
- Samuel se exculpa. Mientras Miguel Carca?o ratifica ante el juez su versi¨®n, su amigo Samuel asegura no tener nada que ver en los hechos y dice que confes¨® bajo acoso policial. Unos d¨ªas despu¨¦s, tambi¨¦n se exculpa el menor.
- Violaci¨®n. Miguel Carca?o pide declarar otra vez ante el juez y cambia su versi¨®n. Cuenta que junto al menor violaron y mataron a Marta y arrojaron su cuerpo a un contenedor. El juez ordena suspender el rastreo en el r¨ªo Guadalquivir y empezar a buscar el cuerpo en un vertedero.
- Ya hay pruebas. Tres d¨ªas despu¨¦s, la polic¨ªa afirma que tiene "pruebas irrefutables" contra los detenidos.
- Fin del internamiento. En noviembre de 2009, El Cuco agota el plazo m¨¢ximo de internamiento preventivo y es trasladado a un piso tutelado a espera de juicio.
- Juicio y sentencia. El menor es juzgado por violaci¨®n y asesinato en febrero de 2011. La sentencia, notificada ayer, le absuelve de estos delitos y le condena por encubrimiento.
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