Las convulsiones del mundo
Hace quince a?os Patrizia Sandretto cre¨® en Tur¨ªn una fundaci¨®n para acoger y exhibir su entonces incipiente pasi¨®n por el coleccionismo de obras de arte actual. La colecci¨®n de la Fundazione Sandretto Re Rebaudengo es, por tanto, reciente pero copiosa en obras e intensa en significados. En ella no hay un tema, estilo, g¨¦nero, tipo de obra o pa¨ªs que vertebre el discurso, lo cual no quiere decir que lo coleccionado carezca de sentido. Hay, no obstante, algunas pautas que, aunque no sirven para explicar el papel espec¨ªfico que cumple cada una de las piezas en la colecci¨®n, permiten entender el conjunto. La primera de ellas es que las obras responden al gusto personal de quien las colecciona, sin embargo, lo reunido no permite trazar un retrato certero de su personalidad. La variedad y la disparidad de las obras nos ofrecen un perfil err¨¢tico, peculiar y caprichoso de la propietaria, pero, sin duda, Patrizia Sandretto no debe responder a ¨¦l. Las breves palabras con las que abre el cat¨¢logo nos informan de que su inter¨¦s radica en la adquisici¨®n de obras de artistas j¨®venes o, mejor dicho, no definitivamente encumbrados, a los que, en muchos casos, ha conocido y tratado personalmente y, en algunos, ayudado a producir o exhibir la obra. Se tratar¨ªa de algo as¨ª como del establecimiento de unas afinidades electivas entre la comitente y los artistas que le permiten generar una relaci¨®n de empat¨ªa que se refleja en la colecci¨®n.
Esp¨ªritu y espacio. Colecci¨®n Sandretto Re Rebaudengo
Sala de Arte Santander
Ciudad Grupo Santander
Boadilla del Monte (Madrid)
Hasta el 29 de abril
Sin embargo, el conjunto de lo exhibido, a pesar de los esfuerzos del comisario, Francesco Bonami, por establecer analog¨ªas entre las piezas, parece ca¨®tico y desconcertante, desigual y contradictorio. ?A qu¨¦ se debe esa sensaci¨®n? Sin duda es ah¨ª donde radica el aut¨¦ntico "tema" de la colecci¨®n y no en el ambiguo y poco explicado t¨ªtulo elegido para su presentaci¨®n en Espa?a: Esp¨ªritu y espacio.
La otra clave para interpretar la colecci¨®n se sit¨²a en la rabiosa actualidad de que hacen gala las obras, lo que conduce a que el perfil que traza la colecci¨®n no es tanto el de su propietaria como el del momento en que se generan las piezas, siguiendo la idea de que el arte puede reflejar el esp¨ªritu de su ¨¦poca, es decir, de la sociedad que lo produce y consume, siendo el artista un mero heraldo que transmuta en obra material las inquietudes y avatares de la comunidad a la que pertenece. A mediados del siglo XVIII Federico II de Prusia cre¨® en Potsdam, con la ayuda de la m¨²sica, la jardiner¨ªa y el arte, Sansoucis, un lugar en el que poder aislarse de los sucesos turbadores que sacud¨ªan el mundo. Entonces el "gran arte", a trav¨¦s de la belleza y la armon¨ªa, permit¨ªa ese tipo de consolaci¨®n, de regocijo en el disfrute privado, pero la colecci¨®n que posee la Fundazione Sandretto Re Rebaudengo parece, por el contrario, tener una voluntad p¨²blica y querer sumergir a los espectadores en las paradojas y contradicciones del mundo actual, en esa vor¨¢gine de sucesos y desprop¨®sitos, dif¨ªcilmente explicables, con los que cotidianamente nos sacuden los peri¨®dicos. En este sentido, la colecci¨®n es un reflejo de nuestra ¨¦poca, aunque ¨¦ste quede tamizado por el gusto o el capricho personal de su coleccionista quien, a trav¨¦s de las obras, capta las palpitaciones y las convulsiones del mundo.
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