Lorenzo de B¨¦lgica la vuelve a liar

El pr¨ªncipe Lorenzo ha vuelto a liarla. El hijo peque?o de Alberto y Paola, reyes de los belgas, de 47 a?os y 12? en la l¨ªnea de sucesi¨®n al trono, se hab¨ªa visto antes implicado en historias excesivas de chicas, velocidad y lujo, y ahora salta a la escena a prop¨®sito de una historia que le coloca en Congo, uno de los m¨¢s delicados asuntos para la pol¨ªtica exterior belga.

Lo de Lorenzo ha ido trascendiendo con cuentagotas, pero suficientemente corrosivas como para que los flamencos del arco parlamentario, en general, y los separatistas en particular, se hayan cebado en el pr¨ªncipe y reclamado que se le retiren los 310.000 euros que recibe anualmente como dotaci¨®n real.

El asunto es turbio desde su origen -atribuido por Lorenzo a una traici¨®n del jefe de Gabinete de su padre, cortesano al que el pr¨ªncipe acusa de quererle repetidamente buscar la ruina, ahora con la filtraci¨®n de una conflictiva visita a Congo- y no est¨¢ exento de contradicciones y puntos oscuros, sobre l¨ªmites transgredidos y responsabilidades despreciadas.

La nueva crisis viene a cuenta de un viaje de una semana realizado el mes pasado por Lorenzo a Congo, en sus palabras un viaje de trabajo y cient¨ªfico en nombre de una fundaci¨®n dedicada al medio ambiente y a la reforestaci¨®n que ¨¦l preside. Congo tiene previsto celebrar elecciones parlamentarias y presidenciales a finales de a?o y B¨¦lgica, palacio incluido, desea aparecer exquisitamente neutral, lo que supone que ninguna autoridad debe ser vista junto a tal o cual candidato.

El rey Alberto pidi¨® a Lorenzo que no viajara y lo mismo hizo el primer ministro en funciones, Yves Leterme. Pero el pr¨ªncipe ten¨ªa otras ideas y se dej¨® invitar por el Gobierno y otras personalidades congole?as, para frustraci¨®n y malestar de los desobedecidos, que le vieron pasearse por el pa¨ªs y ser recibido, brevemente, por Kabila.

"Lo que dice la prensa de que el rey est¨¢ enfadado se corresponde con la realidad", revela al diario Le Soir una fuente oficial de palacio. "En los pr¨®ximos d¨ªas tendr¨¦ una conversaci¨®n con el pr¨ªncipe para recordarle sus obligaciones", declar¨® Leterme en la C¨¢mara de Representantes. "El pr¨ªncipe debe ser consciente del necesario equilibrio a guardar entre sus derechos y sus obligaciones", insisti¨®. Y de ah¨ª a la cuesti¨®n de los 310.000 euros. "A la luz de ese equilibrio hay que plantear la cuesti¨®n de la dotaci¨®n. No tengo dudas de que el pr¨ªncipe elegir¨¢ claramente".