Zuckerberg: "Las revoluciones populares no las hace Facebook"
El fundador de la red social dice que la cre¨® sin pensar en que ser¨ªa una empresa
El ¨²nico tipo en camiseta de toda una sala era ¨¦l: Mark Zuckerberg, de 27 a?os, multimillonario, creador de la empresa m¨¢s exitosa de los ¨²ltimos tiempos, con m¨¢s de 500 millones de seguidores. Un rato antes hab¨ªa visitado a Nicolas Sarkozy en el El¨ªseo con traje y corbata, pero despu¨¦s clausur¨® el congreso que ha reunido en Par¨ªs a destacadas figuras de Internet, el eG-8, disfrazado de s¨ª mismo, con la camiseta verde y el pantal¨®n vaquero de siempre, explicando con aparente franqueza que lo ¨²nico que quer¨ªa al concebir Facebook era poner en contacto a la gente que ten¨ªa alrededor con la gente que ten¨ªa cerca. Zuckerberg cerr¨® las dos jornadas de discusi¨®n sobre Internet que terminar¨¢n con un pu?ado de conclusiones que los organizadores enviar¨¢n a los l¨ªderes de los pa¨ªses m¨¢s poderosos del mundo, el G-8, que se re¨²nen hoy y ma?ana en Deauville (Francia). Entre estas conclusiones, que se har¨¢n p¨²blicas all¨ª, se piden medidas para proteger los derechos de propiedad intelectual, para luchar mejor contra la violaci¨®n de la intimidad o contra la pederastia. Pero el estado de las mismas era ayer tan inconcreto y vaporoso que la cumbre termin¨® sin presentar un documento concreto.
La cumbre termina sin presentar el documento de conclusiones
Los patrocinadores del evento afirman que enviar¨¢n un texto final al G-8
Una delegaci¨®n especial ser¨¢ la encargada de elaborar y hacer llegar estas recomendaciones. Est¨¢ compuesta, entre otros, por Eric Schmidt, presidente de Google y el propio Zuckerberg.
?l se encarg¨® de cerrar el congreso. La sala se encontraba repleta, todo el mundo quer¨ªa ver de cerca al inventor de la amistad a distancia. Maurice L¨¦vy, presidente de Publicis, uno de los grupos empresariales de Internet m¨¢s importantes del mundo y organizador del eG-8, le pregunt¨®: "?Cu¨¢l es el secreto de Facebook?" A juicio de su creador, la mayor red social del planeta, creada hace siete a?os, se basa en dos cosas: "La posibilidad de que se pueda compartir cosas con tus amigos y el hecho de que la identidad de la gente que entra en Facebook es real. Hay otros sitios en Internet donde uno puede adquirir una identidad ficticia. Pero el secreto de Facebook es que prima la identidad real". Zuckerberg insisti¨® varias veces en que "no es biogr¨¢fico" el retrato ¨¢spero que hace de ¨¦l la reciente y c¨¦lebre pel¨ªcula La red social, del director David Fincher. Y se mostr¨® simp¨¢tico, ocurrente y modesto: "Es un honor venir aqu¨ª a discutir sobre estas cosas de Internet. Las revoluciones ¨¢rabes recientes no han existido gracias a Facebook. Pensar eso ser¨ªa arrogante e irreal. Se han dado porque la gente de all¨ª se ha hecho con las riendas de su destino. Aunque Internet ha ayudado, claro".
Para explicar el origen de su revolucionaria idea, Zuckerberg record¨® que en la universidad cursaba inform¨¢tica y psicolog¨ªa y que Facebook obedece a una mezcla de las dos disciplinas que le interesaban de estudiante. No olvid¨® su faceta de empresario. Y advirti¨® a los participantes en la charla, muchos empresarios o aspirantes a empresarios en el mundo digital, que Internet es el feroz campo de la m¨¢s dura competencia, donde sobrevive s¨®lo el mejor.
El creador de Facebook coment¨® la ¨²ltima pol¨¦mica alrededor de su red social: si se debe o no abrir a menores de 13 a?os. Zuckerberg asegur¨® que ¨¦l nunca ha pedido una rebaja de la edad legal para acceder a Facebook, como, seg¨²n ¨¦l, se ha querido hacer creer, sino que se circunscribi¨® a se?alar las limitaciones que su red social tiene para desarrollarse como herramienta para la educaci¨®n o la escuela.
Una persona del p¨²blico le pidi¨® una recomendaci¨®n para crear una empresa y ¨¦l se limit¨® a responder que el mejor consejo es creer en lo que uno hace. "Yo cre¨¦ Facebook sin saber que estaba creando una empresa. Yo cre¨ª que hac¨ªa otra cosa".
As¨ª cerr¨® el mago de las relaciones sociales por Internet un congreso en el que se ha discutido muy vivamente sobre los derechos de los creadores. En la sesi¨®n de la ma?ana, el jurista Lawrence Lessig asegur¨® que la ley antidescargas francesa, conocida como Ley Hadopi, aprobada el a?o pasado, ya est¨¢ muerta. En su intervenci¨®n, a?adi¨® que no se trata de discutir si se deben proteger o no los derechos de autor, sino de c¨®mo hacerlo en la era digital. Luego, tras se?alar que las innovaciones determinantes proceden de j¨®venes ajenos al mundo acad¨¦mico, a?adi¨®: "No podemos confiar en las respuestas aportadas por los Gobiernos. Cada vez que dan una, ha sido para favorecer a quienes ya est¨¢n en el sistema sin aportar ninguna soluci¨®n a aquellos que innovan". E insisti¨® en que la f¨®rmula francesa -que corta la conexi¨®n al internauta reincidente en las descargas ilegales- ni sirve ni servir¨¢. "El futuro de Internet no ha sido invitado a este foro de Par¨ªs. Y lo menos que podemos hacer nosotros es proteger este futuro que est¨¢ ausente de esta sala".
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