Murray pasa al ataque ante Nadal

"Siendo sincero, me sorprende estar aqu¨ª". Aqu¨ª es en las semifinales de Roland Garros, en las que Andy Murray juega hoy (14.00, Teledeporte y Canal+) contra Rafael Nadal. Aqu¨ª es en el templo de la tierra, una superficie en la que el n¨²mero cuatro mundial solo ha ganado el 56% de sus encuentros por el 78% en hierba y el 76% en cemento. Aqu¨ª, su ¨¦xito se explica a trav¨¦s de un nombre: ?lex Corretja. El que fuera n¨²mero dos, doble finalista en Par¨ªs y que le aconsej¨® desde 2008 hasta abril pasado, habla a diario con el tenista brit¨¢nico. Corretja y su trabajo est¨¢n detr¨¢s de una derecha y un convencimiento que nunca tuvo Murray.

"Antes, en tierra, Andy ten¨ªa una sensaci¨®n inc¨®moda porque no se hab¨ªa entrenado mucho en esa superficie", explica el maestro de maestros de 1998 y bronce ol¨ªmpico en Sidney 2000. "Pero yo siempre cre¨ª que pod¨ªa jugar bien, que deb¨ªa buscar m¨¢s cosas, jugar menos pasivo. Necesitaba equilibrar su juego. Si juega todo el rato a la contra, tiene menos posibilidades. Antes, pese a que su movilidad es muy buena, le costaba un poco patinar. Adem¨¢s, ¨¦l est¨¢ acostumbrado a jugar sin pegar mucho, empujando la pelota y aprovechando la superficie cuando es r¨¢pida", sigue el espa?ol, compa?ero de cenas del brit¨¢nico en las citas de Barcelona y Madrid, cuando ya se hab¨ªa extinguido su v¨ªnculo profesional; "en tierra hay que pegarle duro. Los contrarios le hac¨ªan correr y ¨¦l sent¨ªa que no dominaba. Le sacaba de sus casillas tener que tirar m¨¢s fuerte...".

"Frente a Rafa, puede mantener el peloteo sin ser arrollado", advierte el t¨¦cnico

A Murray, que ahora trabaja con Daniel Valleverd¨², un venezolano de 25 a?os especialista en identificar las debilidades de los contrarios y al que conoci¨® cuando ambos estudiaban en la Academia S¨¢nchez-Casal, le espera el ogro de la tierra. Nadal acude a la cita tras ir de menos a m¨¢s en el torneo, como dicen los libros que se debe competir en un grande. De entrada, se encontr¨® con una pelota nueva y de bote vivo e incontrolable. Su reacci¨®n fue inmediata. Camale¨®nico como es, el n¨²mero uno, que encuerda siempre su raqueta a 25 kilos de tensi¨®n, subi¨® a 25,5, seg¨²n Babolat, el encordador de la competici¨®n. Buscaba ganar control. Cuando lo logr¨®, y antes de medirse al sueco Soderling en los cuartos, apost¨® por ganar un poco m¨¢s de potencia: 24,5 kilos.

Murray ha llegado a la pen¨²ltima ronda sin contender con ning¨²n gran especialista. Su esfuerzo mental, sin embargo, ha sido terrible. Super¨® un tobillo hecho polvo tras una ca¨ªda. Tambi¨¦n, la mala din¨¢mica de su curso. Tras la final del Abierto de Australia, perdida contra Djokovic, cay¨® a la primera en los tres torneos siguientes y contra rivales sin alcurnia alguna: el n¨²mero 20, el 143 y el 118. La tierra fue un b¨¢lsamo. En tres citas, solo se ha inclinado ante Nadal (Montecarlo, donde gan¨® un set), Djokovic (Roma, donde sac¨® por el partido) y Bellucci, que algo estar¨ªa haciendo bien en Madrid cuando luego lleg¨® a dominar por una manga y un break arriba al serbio. ?Qu¨¦ ha cambiado en su juego y su cabeza?

"Invertimos much¨ªsimas horas en la derecha", cuenta Corretja, que habla desde su profunda admiraci¨®n hacia Nadal. "Antes golpeaba poco; ahora, m¨¢s. A Andy el estilo de Rafa no le va mal porque lo que mejor hace son las derechas y los reveses cruzados. Puede mantener el peloteo sin ser arrollado, aunque f¨ªsica y psicol¨®gicamente, en tierra y a cinco sets, Rafa es m¨¢s fuerte", sigue; "el ejemplo de Djokovic le puede servir: mucho talento y un poco desordenado hasta ahora. Con sacrificio y orden, puede ganar cualquier torneo".