Para recomponer las relaciones Turqu¨ªa-UE
Hace tan solo cinco meses, Osama bin Laden estaba vivo, Hosni Mubarak ten¨ªa un dominio firme de Egipto y Zine el Abidine ben Ali gobernaba T¨²nez con mano de hierro. Hoy, la rebeli¨®n popular y el cambio pol¨ªtico se han extendido por toda la regi¨®n. Hemos presenciado una represi¨®n brutal de las protestas en Siria y Yemen, la entrada de tropas saud¨ªes en Bahr¨¦in y una batalla a¨²n no concluida por Libia.
Para Europa, la "primavera ¨¢rabe" debe hacer que se vuelva a centrar la atenci¨®n en una cuesti¨®n en gran medida pasada por alto en los ¨²ltimos meses: los beneficios de la adhesi¨®n plena de Turqu¨ªa a la Uni¨®n Europea. Dadas las tremendas oportunidades que ofrecen las circunstancias actuales, las ventajas para Europa de la adhesi¨®n de Turqu¨ªa han de resultar evidentes.
Con la "primavera ¨¢rabe" las ventajas de la adhesi¨®n turca resultan evidentes
La adhesi¨®n es mi sue?o y seguir¨¦ luchando por hacerlo realidad
Como Recep Tayyip Erdogan ha sido elegido para un nuevo mandato como primer ministro de Turqu¨ªa y Polonia, pa¨ªs muy consciente de la importancia de la posici¨®n estrat¨¦gica de Europa en el mundo, ocupar¨¢ la presidencia de la UE al final de este mes, ahora es el momento de que la Uni¨®n y Turqu¨ªa reanuden y recompongan sus negociaciones sobre la adhesi¨®n de Turqu¨ªa.
El beneficio que Turqu¨ªa puede aportar a Europa resultaba visible aun antes de la "primavera ¨¢rabe". Europa es, por definici¨®n, culturalmente diversa, por lo que la diversidad es el destino de la UE y, para que Europa pase a ser un activo protagonista mundial, y no un museo, necesita las nuevas perspectivas y energ¨ªa del pueblo de Turqu¨ªa.
En la actualidad, Europa es a un tiempo mayor y diferente en comparaci¨®n con la Europa de 1999, cuando se invit¨® a Turqu¨ªa a iniciar el proceso de adhesi¨®n. Tambi¨¦n est¨¢ experimentando una profunda crisis econ¨®mica, que estall¨® hacia el momento en que se aprob¨® por fin el Tratado de Lisboa para adaptarse a la ampliaci¨®n de la UE. Si se hubiera aprobado ese tratado en 2005, como se pretend¨ªa, ya se habr¨ªa estado aplicando durante seis a?os y la presi¨®n ejercida por la crisis en la gobernaci¨®n econ¨®mica de la UE, tan visible en los recientes problemas de la zona del euro, habr¨ªa sido mucho m¨¢s abordable.
Pero la UE siempre afronta problemas, los resuelve y sigue avanzando. Hoy, no tenemos un Ministerio de Econom¨ªa, pero estamos a punto de tener algo similar. Asimismo, el Banco Central Europeo tiene hoy capacidades que nadie imaginaba en 1997, pongamos por caso.
Un importante imperativo que Europa debe abordar a¨²n es el de la migraci¨®n, que solo llegar¨¢ a ser un problema mayor con el tiempo. De aqu¨ª a 2050, la fuerza laboral de Europa se reducir¨¢ en 70 millones. Para mantener nuestra econom¨ªa, es necesaria la migraci¨®n y unas fronteras de la UE abiertas... y afrontar los movimientos populistas en Europa deseosos de excluir a "los de fuera".
La Turqu¨ªa de hoy tambi¨¦n ha cambiado espectacularmente desde 1999, tanto pol¨ªtica como econ¨®micamente, cosa que tiene mucho que ver con el proceso de adhesi¨®n a la UE. De hecho, sin la atracci¨®n de la UE -su poder "blando"-, esos cambios no se habr¨ªan producido.
Econ¨®micamente, Turqu¨ªa est¨¢ ahora en el G-20 y est¨¢ desempe?ando un papel eficaz en ¨¦l y, pol¨ªticamente, Turqu¨ªa ha surgido como una potencia con iniciativa regional, papel que se toma extraordinariamente en serio.
Concluidas las recientes elecciones parlamentarias y a punto de aprobarse una nueva Constituci¨®n, Turqu¨ªa est¨¢ acerc¨¢ndose a un momento que har¨¢ ¨¦poca. Yo fui miembro de la Comisi¨®n Constitucional espa?ola que formul¨® la Constituci¨®n espa?ola en 1975 y 1976, tras la muerte de Franco, por lo que s¨¦ lo que es pasar de una dictadura a la democracia y lo importante que es que se formule una Constituci¨®n por consenso.
La relaci¨®n Turqu¨ªa-UE comenz¨® con un acuerdo de asociaci¨®n firmado en 1963. Ahora han comenzado las negociaciones sobre la adhesi¨®n y hay que iniciar el examen de 35 "cap¨ªtulos", que abarcan desde la agricultura hasta la energ¨ªa, pasando por la competencia, el medio ambiente, el empleo, la pol¨ªtica social y dem¨¢s. Ya hemos iniciado el de 19 cap¨ªtulos... menos de los que nos gustar¨ªa, pero el verdadero problema estriba en que solo hemos dado por concluidouno y, lo que es peor, el ritmo de las negociaciones se ha aminorado. En realidad, en la segunda mitad de 2010, nada sucedi¨®. Espero que en 2011 se logren avances s¨®lidos.
Turqu¨ªa y la UE se necesitan mutuamente. Ahora corresponden a la UE el 75% de toda la inversi¨®n extranjera en Turqu¨ªa y la mitad, aproximadamente, de sus exportaciones y turismo procedente del exterior. Asimismo, la seguridad energ¨¦tica de Europa depende de la cooperaci¨®n con Turqu¨ªa en materia de tr¨¢nsito del petr¨®leo y del gas natural procedentes del Asia central y de Oriente Pr¨®ximo.
Tambi¨¦n nos necesitamos pol¨ªticamente. Los vecinos de Turqu¨ªa son nuestros vecinos; sus problemas, nuestros problemas. Los beneficios en materia de seguridad y las ventajas estrat¨¦gicas para la UE de tener como miembro a Turqu¨ªa ser¨ªan numerosas, comenzando por la relaci¨®n entre la UE y la OTAN, de la que Turqu¨ªa es miembro desde hace mucho. Asimismo, la participaci¨®n de la UE en la resoluci¨®n de los problemas actuales de la regi¨®n mediterr¨¢nea ser¨ªa mucho m¨¢s f¨¢cil gracias a la concertaci¨®n con Turqu¨ªa.
En Bosnia-Herzegovina, la cooperaci¨®n UE-Turqu¨ªa es fundamental para lograr una soluci¨®n duradera.
En 1999, Turqu¨ªa no quiso pasar a ser un candidato a la adhesi¨®n, porque sus dirigentes consideraron que las condiciones ser¨ªan demasiado duras. Yo estaba all¨ª, habl¨¦ con el primer ministro B¨¹lent Ecevit a medianoche y despu¨¦s con el presidente S¨¹ley-man Demirel y, dos d¨ªas despu¨¦s, Ecevit estaba en Helsinki para declarar oficialmente el deseo de Turqu¨ªa de llegar a ser miembro de la UE y dijimos: Turqu¨ªa ser¨¢ miembro de la UE. Yo apoy¨¦ la firma de aquel documento; lo mismo har¨ªa ahora.
En estos tiempos, dif¨ªciles e imprevisibles, pero cargados de esperanza, el mundo necesita que Turqu¨ªa y la UE colaboren juntos. Eso no significa reunirse de vez en cuando y despu¨¦s decidir c¨®mo abordar determinado problema. Significa algo mucho m¨¢s profundo y muy concreto. Significa la adhesi¨®n de Turqu¨ªa a la UE. Ese es mi sue?o y seguir¨¦ luchando por hacerlo realidad.
Javier Solana, ex alto representante de la Uni¨®n Europea para la Pol¨ªtica Exterior y de Seguridad Com¨²n y ex secretario general de la OTAN, es profesor distinguido de Pol¨ªtica Exterior en la Brookings Institution y presidente del Centro ESADE para la Econom¨ªa y la Geopol¨ªtica Mundiales. ? Project Syndicate, 2011. Traducido del ingl¨¦s por Carlos Manzano.
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