Gates deja el Pent¨¢gono tras planear la salida de Irak y Afganist¨¢n

Robert Gates, "uno de los mejores y m¨¢s duraderos secretarios de Defensa de la historia de Estados Unidos", en palabras de Barack Obama, dej¨® ayer su cargo despu¨¦s de haber encauzado hacia su conclusi¨®n las dos guerras que estaban en su apogeo cuando lo asumi¨®. En estos cinco a?os, Gates ha puesto en marcha tambi¨¦n la renovaci¨®n del Ej¨¦rcito para mejorar su tecnolog¨ªa y reducir su gasto.

De todas las cualidades que Obama destac¨® en la ceremonia de despedida, "un patriota, un hombre honrado y con sentido com¨²n, uno de los mejores servidores p¨²blicos de este pa¨ªs", quiz¨¢ la que m¨¢s destaca es la del sentido com¨²n. Gates, al que suceder¨¢ el actual director de la CIA, Leon Panetta, ha llevado el pragmatismo y la l¨®gica en un puesto en el que muchas veces a lo largo de la historia norteamericana se ha impuesto la ideolog¨ªa y la pasi¨®n.

Leon Panetta, actual director de la CIA, le sucede en el cargo

La mera presencia de Gates, un conservador republicano, en una Administraci¨®n dem¨®crata es, como destac¨® Obama, un ejercicio de pragmatismo y de colaboraci¨®n bipartidista. "La integridad de Gates es un recordatorio, especialmente para la gente aqu¨ª en Washington, de que anteponer el civismo y el respeto al partidismo no es la reliquia de una era pasada", manifest¨® el presidente.

Gates fue elegido secretario de Defensa en 2006 por George Bush, al que ya ayud¨® a reconducir dos guerras que naufragaban a manos de insensatos neocon. Obama le pidi¨® continuar en su puesto dos a?os m¨¢s como reconocimiento al trabajo que estaba haciendo y como prueba de la voluntad integradora de su Gobierno. A comienzos de este a?o le pidi¨® resistir hasta el verano, justo hasta despu¨¦s del momento en que se hiciese p¨²blica la hoja de ruta final para salir de Afganist¨¢n.

Hoy Irak es casi un recuerdo y Afganist¨¢n poco m¨¢s de un inc¨®modo tr¨¢mite del que salir lo m¨¢s airoso posible. Y eso es as¨ª, en parte, gracias a la labor de Gates. Obama no siempre respald¨® su prudencia: rechaz¨® su consejo de bombardear, en lugar de asaltar, la mansi¨®n de Osama bin Laden, y aceler¨® ligeramente el ritmo de salida de Afganist¨¢n que hab¨ªa sugerido el Pent¨¢gono. Pero el instinto centrista y conciliador de Gates siempre ha coincidido plenamente con el estilo de mando de Obama.

Gates ha sido tambi¨¦n importante en el inicio de una fase de nuevo desarrollo tecnol¨®gico para proteger mejor la vida de los soldados y abaratar el coste econ¨®mico de las guerras. Modernos sistemas de protecci¨®n de veh¨ªculos contra las bombas y aviones sin tripulaci¨®n, drones, han entrado en funcionamiento estos ¨²ltimos a?os con buenos resultados.

Su ¨²ltima obra fue la de presentarle al presidente un proyecto para reducir 700.000 millones de d¨®lares en el gasto militar. Le tocar¨¢ a Panetta desarrollar ese plan, pero Obama cuenta con la ventaja de que podr¨¢ hacer frente a la f¨¦rrea resistencia republicana a bajar el presupuesto de Defensa con un proyecto articulado por un respetado republicano.

Panetta se dedicar¨¢ a partir de hoy, en gran medida, a completar el trabajo de Gates. Su cargo en la CIA ser¨¢ ocupado por el general David Petraeus, que era hasta ahora el jefe de la operaci¨®n militar en Afganist¨¢n y cuyo nombramiento fue confirmado ayer por el Senado.