Las adversidades se ceban con Merkel

El descalabro en las elecciones regionales de Mecklemburgo-Pomerania Anterior de los partidos de la coalici¨®n de centro-derecha que preside Angela Merkel confirm¨® ayer la principal tendencia pol¨ªtica del supera?o electoral alem¨¢n. El Partido Liberal Dem¨®crata (FDP) no alcanzaron el umbral del 5% y se quedan fuera del Parlamento de Schwerin. Es un paso m¨¢s hacia la insignificancia pol¨ªtica. La Uni¨®n Democr¨¢tica Cristiana (CDU) de Merkel cay¨® cinco puntos con respecto a las elecciones de 2006. El Partido Socialdem¨®crata (SPD) repite como primera fuerza pol¨ªtica de la regi¨®n b¨¢ltica, sumando 6,5 puntos en comparaci¨®n con las ¨²ltimas elecciones. Completa el panorama un nuevo gran ¨¦xito de Los Verdes, que sumando cinco puntos conquist¨® ayer el ¨²ltimo de los 16 l?nder alemanes cuyo parlamento se les resist¨ªa. El partido La Izquierda, tradicionalmente fuerte en el Este alem¨¢n, se mantiene cerca del 18% de los votos. Los neonazis del Partido Nacional Dem¨®crata (NPD) pierden apoyos, pero conservan su representaci¨®n parlamentaria gracias al 5,5% de los votos.

Los democristianos caen cinco puntos en el feudo pol¨ªtico de la dirigente

Los neonazis del NPD mantienen su representaci¨®n en la regi¨®n b¨¢ltica

Es improbable que Merkel esperara ayer buenas noticias de la regi¨®n que es su feudo pol¨ªtico y a la que representa como diputada en la C¨¢mara Baja federal (Bundestag). Mecklemburgo-Pomerania Anterior tiene poco m¨¢s de 1,5 millones de habitantes, menos que Hamburgo. Particularidades regionales como la inquietante presencia de los neonazis en su Landtag demuestran que los resultados electorales del land no son extrapolables al conjunto de Alemania. Pero sumada a las anteriores derrotas regionales de Baden-W¨¹rttemberg, Renania-Palatinado o Hamburgo, la debacle que encajaron ayer los partidos de la coalici¨®n de Merkel puede servir de veleta para los vientos pol¨ªticos en Alemania. No soplan a favor de la coalici¨®n de Merkel.

Aparte del calvario pol¨ªtico del FDP, del que la derrota de ayer fue solo una estaci¨®n m¨¢s, tambi¨¦n la CDU de Merkel atraviesa un largo periodo de dificultades. Las peripecias del rescate del euro han vuelto a poner contra las cuerdas a la canciller, amenazada ahora por la p¨¦rdida de confianza parlamentaria en sus propias filas. Caben dudas de que logre los apoyos necesarios entre los parlamentarios democristianos y liberales del Bundestag para aprobar la reforma del fondo de estabilizaci¨®n del euro. Se votar¨¢ a finales de septiembre, pero hace tiempo que suenan voces discordantes en ambas bancadas parlamentarias. La reforma fue decidida en la cumbre extraordinaria de Bruselas el pasado 21 de julio. La oposici¨®n socialdem¨®crata ya ha anunciado su apoyo a la ley que permitir¨¢ la esta participaci¨®n alemana, pero depender de los votos de la oposici¨®n supondr¨ªa una humillaci¨®n para Merkel y pondr¨ªa en duda su autoridad para terminar la legislatura al frente de un Gobierno incapaz de imponer su propia mayor¨ªa.

En Alemania, muchos ciudadanos consideran que los est¨¢n convirtiendo en los paganos de pa¨ªses mal gestionados como Grecia, que false¨® sus cuentas para ingresar en el euro. Las esperas de Merkel se perciben a menudo como cambios de opini¨®n, que muchos alemanes no comprenden.

A Merkel le ha tocado ahora capear el fuego amigo de dos viejas glorias de la pol¨ªtica alemana. El democristiano Helmut Kohl (CDU), que fue canciller de Alemania entre 1982 y 1998, y el socialdem¨®crata Helmut Schmidt (SPD), jefe del Gobierno entre 1974 y 1982, han arremetido en la ¨²ltima semana contra la pol¨ªtica europea de la canciller. Para Kohl, Angela Merkel "carece de br¨²jula". A lo que Schmidt a?adi¨® que "es importante que Alemania sea fiable", cosa que a su juicio no se percibe "ni en Londres ni en Par¨ªs".

Merkel ha encontrado esta semana el inopinado apoyo de su antecesor en la Canciller¨ªa Gerhard Schr?der (SPD). Considera que "ha sentado las bases" para salvar el euro. Claro que, como le afean sus cr¨ªticos, Schr?der era canciller de Alemania cuando se permiti¨® a Grecia entrar en la Uni¨®n Monetaria.