El tejido conjuntivo de la naci¨®n
En la Francia cl¨¢sica, en la ¨¦poca de los ¨²ltimos Valois y de los primeros Borbones, la literatura crea los rasgos distintivos de la naci¨®n francesa. Ni la poes¨ªa, ni el teatro, ni la novela, ni la elocuencia sagrada tienen un papel determinante en este momento cultural constituyente. Es la hora del ensayo, de las memorias, de los discursos, de las f¨¢bulas y de los cuentos. "La prosa pas¨® a ser a la vez asunto de Estado y v¨ªnculo social: el tejido conjuntivo de la naci¨®n francesa". As¨ª puede sintetizarse La diplomacia del ingenio de Marc Fumaroli. Un libro cl¨¢sico en los estudios literarios franceses, publicado en los a?os noventa, que ahora Acantilado recupera en espa?ol.
Marc Fumaroli es uno de los m¨¢s reconocidos especialistas del siglo XVII franc¨¦s. El libro re¨²ne 16 ensayos publicados a lo largo de los ¨²ltimos treinta a?os, dedicados a los grandes protagonistas de la eclosi¨®n de lo que ser¨ªa el modo franc¨¦s de entender el mundo. Los ensayos de Montaigne, las memorias del cardenal de Retz, el Discurso de Descartes, los cuentos de Perrault o las f¨¢bulas de La Fontaine son hitos destacados en la construcci¨®n cultural de la naci¨®n. No es que Fumaroli considere a Moli¨¨re, a Racine o a Bossuet, ajenos al esp¨ªritu franc¨¦s. Simplemente, cree que la verdadera singularidad de la cultura francesa en su dimensi¨®n m¨¢s pol¨ªtica y p¨²blica est¨¢ en la prosa del racionalismo filos¨®fico, del moralismo de las f¨¢bulas y de las sentencias, del pensamiento cr¨ªtico de los ensayos. Si a Italia le pierde la est¨¦tica, si Alemania est¨¢ atrapada por el esp¨ªritu metaf¨ªsico y trascendental, Francia es el lugar de la verdad y del racionalismo cr¨ªtico.
La diplomacia del ingenio. De Montaigne a La Fontaine
Marc Fumaroli
Traducci¨®n de Caridad Mart¨ªnez
Acantilado. Barcelona, 2011
704 p¨¢ginas. 39 euros
Este triunfo de la prosa es, para Fumaroli, "una excepci¨®n francesa". Por aquellos tiempos, el estilo nacional franc¨¦s se definir¨ªa "en fuerte ant¨ªtesis con Espa?a". El resultado fue "el triunfo de una prosa sin afectaci¨®n de arte" que "a¨²n perdura". "Mesura, deber, iron¨ªa" definen la b¨²squeda incesante que preside los Ensayos de Montaigne y que Fumaroli considera el fundamento de l'esprit franc¨¦s. Un esp¨ªritu que desconoce los ramalazos del ingenio espa?ol y se muestra pegado a la realidad y la experiencia. "De la inteligencia de su prosa", afirma Fumaroli, "pende el destino de los franceses".
Una pregunta se impone: ?tiene sentido todav¨ªa hablar de cultura nacional? ?Tiene sentido hablar del esp¨ªritu de una naci¨®n? Ciertamente podr¨ªamos decir, con Hegel, que hay rasgos distintivos en las maneras de hablar, de trabajar y de desear de los ciudadanos. La relaci¨®n, los h¨¢bitos, la historia, la tradici¨®n impregnan y definen ideas recibidas com¨²nmente aceptadas. Cultura humana hay una, pero muchas decantaciones de ella. Felizmente las culturas puras no existen y es en la contaminaci¨®n entre tradiciones distintas que se va formando el tejido cultural de la humanidad. Durante mucho tiempo la ecuaci¨®n de una lengua, una cultura, una naci¨®n igual a un Estado ha impregnado la modernidad, pero hace a?os que empez¨® la desacralizaci¨®n de esta f¨®rmula legitimadora de las pol¨ªticas nacionales. Fumaroli no pone tanto el ¨¦nfasis en la cultura como en los rasgos de la naci¨®n. La prosa no po¨¦tica ser¨ªa, en este sentido, el mecanismo que engarzar¨ªa cultura popular y cotidiana con alta cultura, ideas recibidas e ideas innovadoras, vida privada y vida p¨²blica, ciudadan¨ªa y pol¨ªtica. De hecho, en la Francia republicana, la ciudadan¨ªa ser¨¢ una pieza esencial de esta ciceroniana cultura. Los Ensayos de Montaigne como tejido conjuntivo de la naci¨®n.
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