Testigos del 'caso Bellver' se?alan que la obra junto al jard¨ªn fue "gigante"

La segunda jornada del juicio contra Jorge Bellver, concejal de Urbanismo de Valencia y diputado auton¨®mico, acusado de prevaricaci¨®n por autorizar la construcci¨®n de un aparcamiento junto a los Jardines de Monforte, Bien de Inter¨¦s Cultural, sin recabar el informe del departamento de Patrimonio de la Generalitat, sirvi¨® para poner de relieve la magnitud de la obra que se llev¨® a cabo a apenas "15 o 20 cent¨ªmetros del muro del jard¨ªn", seg¨²n admiti¨® uno de los testigos. "Excavamos un gigantesco vaso", explic¨® Javier Dom¨ªnguez, uno de los arquitectos del proyecto, de algo m¨¢s de 10 metros de profundidad.

Las calles adyacentes a los jardines est¨¢n protegidas por una orden de 1992 porque forman parte de su entorno. Los testigos que declararon en el Tribunal Superior de Justicia, casi todos empleados del Ayuntamiento de Valencia y de las empresas que construyeron el aparcamiento, el Grupo Enrique Ortiz y Secopsa, tambi¨¦n admitieron que dicho entorno fue alterado de forma sustancial.

Para realizar el aparcamiento subterr¨¢neo de tres plantas fue necesario levantar toda la calzada y las aceras; trasplantar los ¨¢rboles de la calle de Severo Ochoa; colocar pantallas protectoras, e instalar gr¨²as. La obra, que dur¨® dos a?os, ha dejado de forma permanente las rampas de acceso al aparcamiento y un ascensor.

A pesar de la cercan¨ªa con los jardines, los testigos negaron haber encontrado ra¨ªces de ¨¢rboles al excavar. Tambi¨¦n rechazaron que el muro o cualquier otro elemento de Monforte hubiera resultado da?ado. Uno de ellos admiti¨®, sin embargo, que el informe de impacto se hizo sobre el efecto que el uso del aparcamiento pudiera tener sobre los jardines, pero no sobre las consecuencias de las obras. Antonio Mar¨ªn, del colectivo Cercle Obert, que fue quien denunci¨® el caso en un principio, no asisti¨® a la vista porque, seg¨²n explic¨®, no le lleg¨® la citaci¨®n como testigo. Mar¨ªn asegur¨® que se presentar¨ªa hoy.