Cristiano no se consuela con la Bota de Oro

Envuelto en una camisa azul de estampado de topos blancos y una chaqueta negra con solapa de contraste, Cristiano Ronaldo recibi¨® la Bota de Oro de la mano de dos ¨ªdolos de la ¨¦poca en que a los ¨ªdolos se les adjuntaba una leyenda po¨¦tica: Eusebio da Silva, La Pantera Negra, y Alfredo di St¨¦fano, La Saeta Rubia. A Cristiano, reflejo de un f¨²tbol m¨¢s industrializado, le llaman CR y su producci¨®n de 53 goles en la temporada pasada (en Liga, Copa y Champions) lo convierte en el futbolista m¨¢s goleador de Europa. Precisamente eso es lo que acredita el trofeo de la botita ba?ada en oro que le dieron ayer en un acto condicionado por un sentimiento de esperanza e insatisfacci¨®n. Por un lado, la frustraci¨®n por no haber ganado el Bal¨®n de Oro, la Liga y la Champions. Por otro, el deseo de reconquistarlos en el futuro y acabar de una vez por todas con el dominio de Lionel Messi.

"Cuando se compite con los mejores se ve qui¨¦n es el mejor", dijo preguntado por Messi

Estaba abarrotado el gran sal¨®n del Hotel Intercontinental, con sus ara?as y sus columnas art dec¨® brillantes a la luz de los flashes. El presidente de la federaci¨®n portuguesa, Gilberto Mada¨ªl, rumiaba cosas distra¨ªdo. Hablaba Florentino P¨¦rez con el rubicundo ministro de Deportes de Portugal, Miguel Relvas, y Jorge Mendes y Peter Kenyon, los dos agentes m¨¢s influyentes en cuesti¨®n de fondos de inversi¨®n futbol¨ªstica, sonre¨ªan en el centro de la escena. La secretaria de estado para el deporte, Matilde Garc¨ªa Duarte, repasaba su discurso para pasar desapercibida, y Eusebio y Di St¨¦fano rememoraban cosas del siglo pasado cuando el tiempo se detuvo y empez¨® la ceremonia. Hubo un silencio y un rumor de gimoteos en el instante en que entr¨® en la sala Irina Shaijislamova, la chica de la parte asi¨¢tica de los Urales a quien Cristiano Ronaldo llama minha namorada.

El protocolo no preve¨ªa que la gala empezase con la irrupci¨®n de la novia del h¨¦roe. Pero as¨ª fue. Y a partir de ese momento, nada fue tan emocionante. Nadie lo expres¨® mejor que el propio Eusebio, cuando se volvi¨® hacia su compatriota con mirada afectuosa y le dese¨® que ganase "muchos Balones de Oro", precisamente, el t¨ªtulo que Messi alzar¨¢ previsiblemente este a?o por tercera vez consecutiva. "Cristiano tiene 26 a?os", dijo Eusebio. "Son muchos a?os por delante. Ya tiene dos Botas de Oro y un Bal¨®n de Oro. Y juega en el equipo m¨¢s grande de Espa?a. Un equipo como el Madrid te ayuda a ganar. Y va a ganar muchas Botas de Oro y muchos Balones de Oro".

Cada pregunta, por activa o por pasiva, recordaba al chico al que, entre Mendes y Cristiano conocen como El Enano. Alguien quiso saber si a Cristiano no le resultaba casi tr¨¢gico haber coincidido en la misma ¨¦poca que un futbolista como Messi. "Es mejor", dijo el portugu¨¦s, desafiante. "Mucho mejor. Cuando se compite con los mejores es cuando se ve qui¨¦n es el mejor. Por eso a m¨ª me gusta competir, no s¨®lo con Leo. Con muchos. Me gusta competir con todos, pero no individualmente sino en equipo. Esto es lo m¨¢s importante".

La grandeza de Cristiano, adem¨¢s de su valor para afrontar las empresas m¨¢s complicadas con ¨¢nimo deportivo, es su honestidad. No dud¨® ni un segundo cuando le preguntaron si cambiar¨ªa el premio por los t¨ªtulos que logr¨® su adversario la temporada pasada. "Lo cambiar¨ªa ya", zanj¨®, "por la Champions o por la Liga. Me gustar¨ªa ganar algo importante con el Madrid. Pero ahora tenemos que disfrutar el momento. Estamos en una buena racha. Estamos con mucha ilusi¨®n y confianza de que este va a ser el a?o del Madrid. Quiero ganar muchos t¨ªtulos para el Madrid, como hice con el Manchester".

Cristiano no mencion¨® la Copa del Rey en toda la velada. "Soy sincero", dijo, una vez m¨¢s, aludiendo a su competencia con el astro del Barcelona. "No pienso a nivel individual, pienso a nivel colectivo. Si el Madrid gana en lo colectivo los t¨ªtulos individuales van a?adidos. No me interesa batir mi propio r¨¦cord. Lo que quiero es ganar trofeos para el club porque pienso que el Madrid, por su historia, no puede quedarse tanto tiempo sin ganar algo importante. Yo conf¨ªo. El equipo est¨¢ bien, estamos m¨¢s maduros".

Cristiano no consigui¨® desembarazarse de la sombra de Messi y del trofeo que posee desde hace dos a?os. "El Bal¨®n de Oro se concede al que recibe m¨¢s votos, m¨¢s opiniones favorables", dijo, comparando ambos t¨ªtulos y procurando valorizar el suyo. "Para que te den la Bota de Oro no necesitas votos de nadie".