Casi la mitad de los asalariados gana menos de 800 euros al mes
La crisis eleva el dato en cuatro puntos a pesar de la ca¨ªda del empleo
Con 800 euros o menos de salario mensual se vive b¨¢sicamente dejando de hacer cosas, priorizando mucho y a menudo recurriendo a la ayuda de la familia. "Con 750 euros al mes e independizada no puedes hacer casi nada", explica Adriana Garc¨ªa, liberada de CC OO en Alicante y trabajadora de una cadena de ropa. Adriana tiene 34 a?os y vive en pareja, pero no siempre fue as¨ª. "Estuve seis meses sola y ni siquiera pod¨ªa hacer frente a la comida". Ahora al menos puede pagar los gastos. "Cuando hablan de recortes me da la risa. A m¨ª recortes no me pueden hacer m¨¢s", deja claro.
Adriana es uno de los 917.021 trabajadores que han estado asalariados en la Comunidad Valenciana en 2010 ganando menos de 800 euros al mes, lo que supone el 46,94% de todo este colectivo, seg¨²n datos elaborados por CC OO-PV a partir del informe de 2010 de la Agencia Tributaria. La mitad de la poblaci¨®n trabajadora no alcanza ni la condici¨®n de mileurista, destaca el sindicato. Y la cifra va en aumento. En 2008, el 42,7% de los asalariados ganaba menos de 800 euros al mes, cuatro puntos menos a pesar de que se registraron 197.069 trabajadores m¨¢s.
"Hay que renunciar a cosas". Javi, como Adriana, vive en pareja. A¨²n as¨ª con los 600 euros al mes que ingresa trabajando en el campo puede hacer lo justo tras pagar la hipoteca.
"Cuando hay alg¨²n imprevisto, tengo que recurrir a mi madre". A Montserrat Roger los 800 euros que gana no le dan para mucho. "Ninguna alegr¨ªa", resume. Su trabajo de camarera apenas cubre sus necesidades. Le ha pedido dos veces sin ¨¦xito a su casera que le baje la cuota y en breve tendr¨¢ que buscar otra vivienda.
CC OO destac¨® ayer que los datos reflejan "la dureza con la que miles de trabajadores afrontan el d¨ªa a d¨ªa, con unas rentas salariales que los sit¨²an en los umbrales de la pobreza".
El an¨¢lisis de los tramos salariales, que toman como referente el Salario M¨ªnimo Interprofesional (633 euros) evidencia, seg¨²n el portavoz de CC OO en Alicante, Salvador Roig, la precariedad del mercado laboral valenciano, donde predominan los bajos salarios y la contrataci¨®n temporal o a tiempo parcial. "Con estas rentas salariales tan ajustadas el margen de sacrificio que est¨¢n demandando los Gobiernos y los empresarios es inviable en un contexto en el que el coste de la crisis est¨¢ recayendo de manera muy cruda sobre los trabajadores asalariados", esgrimi¨® el sindicalista. El informe de la Agencia Tributaria indica que 402.551 trabajadores sumaron en 2010 un salario medio anual de 1.900 euros (14 pagas de 135 euros al mes); 264.885 alcanzaron los 6.590 euros (470 euros al mes), y 249.585 obtuvieron de media 11.140 euros (795 euros mensuales). "Si se contin¨²an realizando recortes van a hacer imposibles los proyectos de vida de los trabajadores. No se puede recortar m¨¢s", apostilla.
"?Recortar de d¨®nde? No puede ser que te recorten el sueldo y te suban la casa", lamenta Montserrat, que recuerda que su salario apenas le da para pagar la vivienda y el coche. Ella come en el trabajo.
Para estos y otros muchos trabajadores, la situaci¨®n no siempre fue as¨ª, pero unos perdieron su empleo y han encontrado otro peor pagado y otros han reducido su salario al recortar gastos sus empresas.
"Cuando hab¨ªa horas extra ganaba m¨¢s", explica S. P. Eso acab¨® hace a?o y medio. Ahora gana entre 800 y 900 euros al mes, menos cuando se va de vacaciones. "No vives, sobrevives", resume. Divorciada y con dos hijos, sufre por varias v¨ªas las consecuencias de los recortes. No ha cobrado la beca de 100 euros que se le concedi¨® a su hija para estudiar en el instituto. Tambi¨¦n se ha quedado sin la beca de comedor para su hijo peque?o (entre 90 y 100 euros cada mes). "Debo dos meses de comedor, pero tengo que dejarlo a comer porque tengo que trabajar", explica. "Vivo pagando facturas antes de que venza la segunda", agrega. S. P. insiste en el verbo priorizar: "Los ni?os son lo primero: tienen que comer, vestirse y estudiar". Paga su hipoteca a medias con su exmarido y debe algunos pr¨¦stamos personales. Y aunque le tranquiliza ver que "no eres la ¨²nica", le preocupa no poder pagar la universidad de su hija en cuatro a?os.
"Una buena salud o una buena educaci¨®n p¨²blica tambi¨¦n es salario", apostilla Roig.
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