Recortes y derroches

El fin de semana ha venido marcado por el inicio de la cascada de recortes que a todos los niveles, estatal, auton¨®mico y local, nos aguardan en los meses que tenemos por delante. Y como es habitual entre nosotros, las noticias sobre el estado de las cuentas p¨²blicas han venido acompa?adas de la frecuente exhibici¨®n, tan espa?ola, de ignorancia en materia de n¨²meros, cuando no, directamente, de la decidida voluntad de ignorarlos para buscar refugio en el siempre confortable y tranquilizador lugar com¨²n.

Como es sabido, en Espa?a tenemos un problema de d¨¦ficit p¨²blico derivado de que nuestra econom¨ªa burbuj¨ªstica, tan boyante en los a?os ye-ye, ha habituado a nuestro sector p¨²blico a gastar bastante m¨¢s de lo que ingresa tras la ca¨ªda de la recaudaci¨®n. Toca recortar y, claro, al margen de subir alg¨²n impuesto e incluso pretender que la presi¨®n fiscal se relacione remotamente con la distribuci¨®n de riqueza entre los ciudadanos, los derroches de a?os pasados est¨¢n en el punto de mira. Sobre todo, como nos repiten machaconamente, los de las Comunidades Aut¨®nomas, esos entes irresponsables que, una vez m¨¢s, nos han contado este fin de semana, han fastidiado el objetivo de d¨¦ficit p¨²blico para 2011.

Si alguien se toma la molestia de mirar los n¨²meros publicados por el propio Estado y hacer cuatro restas y sumas, sin embargo, el panorama cambia un poquito. Porque si nos remontamos a 2007, cuando la deuda p¨²blica espa?ola empieza a crecer tras haber hecho suelo en 380.000 millones de euros, y tenemos en cuenta que en la actualidad ronda los 700.000 millones, es f¨¢cil concluir que la hemos incrementado en apenas 4 a?os en 320.000 millones de euros. ?Cu¨¢ntos de esos millones de euros corresponden a deuda auton¨®mica? Pues seg¨²n los datos del propio Estado, "s¨®lo" unos 60.000 millones de euros. Una cifra que permite dibujar un panorama divertido, en el que los "irresponsables" derrochadores han incrementado la deuda en una proporci¨®n de 6 por cada 26 de aumento por parte de nuestro "responsable" Estado. Es cierto que parte del agujero estatal, unos 50.000 millones, viene del incremento del gasto en prestaciones de desempleo y que otra parte es debida a la rebaja de la recaudaci¨®n fiscal, pero esta ¨²ltima tambi¨¦n afecta a unas autonom¨ªas que, conviene recordarlo, asumen la prestaci¨®n y el pago de servicios como la sanidad y la educaci¨®n, que consumen gran parte del gasto p¨²blico (de hecho, casi el 80% del gasto auton¨®mico).

?En qu¨¦ ha gastado nuestro prudente y responsable Estado tanto dinero mientras las manirrotas Comunidades Aut¨®nomas derrochaban en educaci¨®n y sanidad? Pues en rebajas fiscales de todo tipo y prestaciones no ligadas a la renta como el cheque-beb¨¦ o la famosa deducci¨®n de los 400 euros, por no mencionar el dinero sabiamente invertido en cambiar aceras. En total estas medidas han supuesto un incremento del d¨¦ficit equivalente al de toda las deuda auton¨®mica del per¨ªodo. Adem¨¢s, y mientras tanto, el Estado ha seguido construyendo AVEs a todo tren o comprando carros y aviones de combate o fragatas de ¨²ltima generaci¨®n para defendernos del enemigo.

Obviamente, las Comunidades Aut¨®nomas, como todos, pueden gastar mejor, e incluso mucho mejor, pero estar¨ªa bien empezar a poner recortes y derroches en sus justos t¨¦rminos y n¨²meros. Trampas al solitario, las justas.

Blog en http://www.elpais.com/espana/cvalenciana