El mayor vertedero de petr¨®leo

?Recuerdan la cat¨¢strofe del Prestige, el barco que hace 10 a?os se hundi¨® y verti¨® unas 62.000 toneladas de crudo frente a las costas gallegas? Pues intenten imaginar qu¨¦ ocurrir¨ªa si se hundiera un Prestige al a?o durante 24 a?os. Esa es la situaci¨®n en el delta del N¨ªger, en Nigeria, donde desde los a?os cincuenta se han derramado 1,5 millones de toneladas de petr¨®leo, el equivalente a unos 11,5 millones de barriles, seg¨²n un informe de 2006 del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF en ingl¨¦s), el m¨¢s reciente a este respecto.

El resultado es un cat¨¢logo de horrores. El agua, tanto de la superficie como subterr¨¢nea, queda contaminada y provoca enfermedades. Aumentan los casos de c¨¢ncer y de beb¨¦s nacidos con malformaciones. Los peces mueren o huyen a otras zonas de la costa. Los pescadores y comerciantes locales se quedan sin trabajo y pasan de la pobreza a la miseria. Muchos se ven obligados a emigrar.

Shell y el Gobierno de Nigeria no tienen por ahora intenci¨®n de limpiar la zona

El agua infectada aumenta los casos de c¨¢ncer y malformaciones

Pero los vertidos no cesan y desde 2006 habr¨ªa que a?adir varios cientos de miles de barriles m¨¢s. El ¨²ltimo, 22 de diciembre pasado, cuando Shell Nigeria anunci¨® que unos 40.000 barriles de crudo se hab¨ªan vertido desde su plataforma petrol¨ªfera de Bonga, a unos 120 kil¨®metros de la costa. Sin embargo, ese vertido tampoco fue en realidad el ¨²ltimo. El 3 de enero, Shell revel¨® que el 24 de diciembre varios derrames le obligaron a cerrar algunas de sus instalaciones en tierra, cerca de la costa, al sureste del pa¨ªs. El comunicado de la compa?¨ªa, que apenas ha tenido repercusi¨®n, no se?ala la cantidad de petr¨®leo vertida y asegura que los causantes fueron bandidos que pretend¨ªan robar el crudo.

Tras estos dos sucesos, activistas locales han documentado la llegada de crudo a playas y pantanos nigerianos. Hay al menos 13 poblaciones afectadas que exigen a Shell que limpie y entregue compensaciones. Pero la empresa dice estar segura de que ese crudo no procede de Bonga, por lo que no es responsable de su limpieza.

"Por supuesto que eso no excusa lo que ellos causaron (que es mucho mayor), pero tiene raz¨®n", se?ala SkyTruth, una organizaci¨®n que difunde im¨¢genes por sat¨¦lite sobre el medio ambiente y que cree que estos residuos pertenecen a un vertido ilegal procedente de la costa de Togo. "Im¨¢genes por sat¨¦lite de la costa oeste de ?frica, como las de otras regiones costeras del mundo, muestran rutinariamente signos de contaminaci¨®n por otras fuentes, particularmente por vertidos ilegales de barcos", a?ade.

Peque?os y grandes vertidos son una realidad demasiado cotidiana en Nigeria. Tanto que no suelen ser noticia. Tanto que hay quien conoce a este pa¨ªs como la "capital mundial de la contaminaci¨®n petrol¨ªfera". Los bandidos, instalaciones viejas, conductos en mal estado, los accidentes y los derrames ilegales son algunas de las causas m¨¢s frecuentes. Al a?o se pueden producir hasta 300 vertidos. Como muchos se quedan sin documentar, activistas nigerianos aseguran que en su pa¨ªs se vierte cada a?o m¨¢s petr¨®leo que el que contamin¨® la costa del golfo de M¨¦xico en abril de 2010. Entonces, el hundimiento de la plataforma Deepwater Horizon de BP verti¨® unos cuatro millones de barriles en el oc¨¦ano.

De hecho, mientras el mundo estaba pendiente de este suceso, el 1 de mayo de 2010 un oleoducto de ExxonMobil se rompi¨® y dej¨® escapar m¨¢s de 25.000 barriles en el delta. Este fue otro de los cientos de derrames que cada a?o pasan desapercibidos en esta zona. En agosto de 2011, un exhaustivo informe del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma) denunci¨® el desastre medioambiental causado por los continuos derrames en la regi¨®n de Ogoniland, en el delta del N¨ªger.

El informe se?ala que, incluso en las ¨¢reas aparentemente limpias en la superficie, la contaminaci¨®n subterr¨¢nea es muy grave y afecta directamente a la salud de las comunidades afectadas. Se ha estimado que la esperanza de vida en la zona es de 41 a?os, aunque hace varias generaciones lleg¨® a ser casi de 70. La media nacional, tampoco es hoy mucho mayor, 48 a?os. Adem¨¢s, el crudo derramado suele provocar incendios que destruyen la vegetaci¨®n y crean una corteza de cenizas y alquitr¨¢n que impide a las plantas volver a crecer. En algunos lugares, esta capa llevaba all¨ª varias d¨¦cadas, seg¨²n el documento del Pnuma. Este se?ala que llevar¨ªa entre 25 y 30 a?os poder limpiar y restablecer adecuadamente la zona y estima que el coste inicial de las operaciones ser¨ªa de 1.000 millones de d¨®lares (790 millones de euros). El Pnuma nombr¨® a Shell y al Gobierno de Nigeria como responsables pero, por el momento, ni uno ni otro han dado muestras de querer iniciar las labores de limpieza. Shell obtuvo 18.600 millones de d¨®lares en beneficios (14.700 millones de euros) en 2010 y se espera que esta cifra aumente a unos 26.000 (20.520) para 2011.

Y es que, aunque las compa?¨ªas s¨ª acaban reconociendo su responsabilidad en los sucesos de m¨¢s importancia, comunidades locales y activistas denuncian que las petroleras y el Gobierno apenas hacen nada para evitar accidentes, limpiar el crudo ya derramado o compensar a las v¨ªctimas.

"Shell dice a menudo que la mayor¨ªa de los vertidos son causados por sabotajes, pero esta afirmaci¨®n ha sido negada en¨¦rgicamente por las comunidades y por las ONG, que se?alan que el procedimiento de recogida de datos sobre los vertidos de petr¨®leo es defectuoso", dice Aster van Kregten, investigador de Amnist¨ªa Internacional (AI) sobre Nigeria.

En un informe de noviembre, AI pide a Shell que limpie y compense a la poblaci¨®n de Bodo, una ciudad de 69.000 habitantes contaminada por dos derrames en 2008. Esta ONG denuncia que "inicialmente (Shell) ofreci¨® a esa comunidad 50 bolsas de arroz, jud¨ªas, az¨²car y tomates como ayuda tras el desastre".