Hungr¨ªa mantiene el pulso ante Bruselas bajo amenaza de sanci¨®n

Hungr¨ªa est¨¢ dispuesta a aguantar el envite de la Comisi¨®n Europea en el pulso que Bruselas y Budapest mantienen por un paquete de reformas legislativas que, si a las instituciones y socios comunitarios inquieta, a ojos de oposici¨®n y analistas en Budapest es revelador de pulsiones autoritarias al viejo estilo en el centro de la Uni¨®n Europea. El primer ministro h¨²ngaro, V¨ªktor Orb¨¢n, se dice de acuerdo con algunas de las objeciones aireadas y est¨¢ dispuesto a modificar la legislaci¨®n en consonancia, pero "hay otras en que nuestras posiciones est¨¢n a¨²n alejadas". La Comisi¨®n decide hoy c¨®mo proceder. "Que se abra un procedimiento de infracci¨®n no ser¨¢ una tragedia", adelanta el embajador h¨²ngaro ante las instituciones europeas, Peter Gy?rk?s.

"Una infracci¨®n no ser¨ªa una tragedia", dice el embajador h¨²ngaro ante la UE

Los ¨¢nimos se est¨¢n calentado conforme se acerca la hora de las decisiones y el pasado fin de semana alrededor de 2.000 manifestantes afectos al ultranacionalista partido Jobbik escucharon a uno de sus dirigentes, y europarlamentario, manifestar: "La UE ha declarado la guerra de forma descarada a Hungr¨ªa".

La crisis se enra¨ªza en la puesta en pr¨¢ctica de una Constituci¨®n que naci¨® tras la arrolladora victoria de Orb¨¢n en las elecciones de abril de 2010, triunfo que le dot¨® de una mayor¨ªa parlamentaria de dos tercios capaz de imponer reformas constitucionales sin contar con la oposici¨®n. Como dice una fuente de la Comisi¨®n, a la espera de ver qu¨¦ se decide colegiadamente este martes en la reuni¨®n del Ejecutivo comunitario: "Una cosa es tener posici¨®n dominante y otra cosa es incurrir en abuso de posici¨®n dominante".

Al final de un "proceso legislativo muy intenso y din¨¢mico que ha supuesto 230 nuevas leyes", seg¨²n el embajador h¨²ngaro hay indicios de abuso de posici¨®n dominante, como ha dejado entender el propio Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso. "La Comisi¨®n est¨¢ muy preocupada" por lo que ocurre en Hungr¨ªa, declaraba la semana pasada en Copenhague. "Le escrib¨ª [a Orb¨¢n, en diciembre] un par de cartas para que no siguiera por ese camino. Pero no hizo caso".

La Comisi¨®n presiona por una doble v¨ªa: la amenaza de abrir un procedimiento sancionador y la no participaci¨®n en negociaciones junto al Fondo Monetario Internacional (FMI) para un paquete de ayuda financiera de entre 10.000 y 20.000 millones de euros a una Hungr¨ªa en p¨¦sima situaci¨®n econ¨®mica.

Bruselas cree que tres iniciativas legislativas cuestionan el acervo comunitario: la independencia del banco central h¨²ngaro, en el que se introducir¨ªa un tercer vicegobernador; la independencia del poder judicial, al adelantar la edad de jubilaci¨®n de los jueces de los 70 a los 62 a?os, y la independencia de la agencia que controla la protecci¨®n de datos.

"El material que la UE ha preparado consiste en los fundamentos legales que apoyan estas tesis", declar¨® el pasado viernes Orb¨¢n a una emisora h¨²ngara. "Hay algunos con los que estoy de acuerdo y no veo raz¨®n para no aceptarlos, pero hay otros en los que las diferencias son de calado". Ni el Gobierno h¨²ngaro ni la Comisi¨®n han detallado el tenor preciso de las objeciones. "Estamos a la espera de conocer los detalles y actuaremos en consecuencia", adelanta el embajador. "Si resultase que la legislaci¨®n no se ajusta al acervo comunitario, tenemos los medios para ajustarla".

Aun as¨ª, Gy?rk?s dibuja tres salidas posibles al conflicto: "Estar de acuerdo ya y enmendar las leyes conforme reclame la Comisi¨®n; abrir conversaciones para reconciliar las posiciones, y que la Comisi¨®n abra un procedimiento de infracci¨®n a Hungr¨ªa, lo que no ser¨ªa una tragedia".

Fuentes oficiales h¨²ngaras que reclaman el anonimato creen que se est¨¢ sometiendo al Gobierno de Orb¨¢n a una condena sin juicio. "La Comisi¨®n es la guardiana del Tratado y en ella confiamos", dicen. "El a?o pasado hubo objeciones sobre la ley de prensa y el Tribunal Constitucional hizo cambiar algunos art¨ªculos". Las fuentes consideran que a pesar de lo dram¨¢tico del momento "no hemos alcanzado el punto de no retorno; todav¨ªa podemos controlar la situaci¨®n".

Si la posici¨®n oficial es aguantar el tipo ante la apertura de un procedimiento de infracci¨®n que en el peor de los casos, y tras un proceso largo en el tiempo, sentar¨ªa a Hungr¨ªa en el banquillo del Tribunal de Justicia de la UE, otra perspectiva abre la posibilidad de aplicar al pa¨ªs infractor el art¨ªculo 7 del Tratado, que incluye el de privarle de derecho de voto en el Consejo. Es una medida sin precedentes, una especie de bomba at¨®mica pol¨ªtica, que ya han reclamado los l¨ªderes de los grupos socialista, liberal y verde del Parlamento Europeo.

"Es una exageraci¨®n", comenta un informante h¨²ngaro en posici¨®n de saber c¨®mo est¨¢n las cosas. "Si hay cuestiones pendientes se resolver¨¢n antes de llegar a ese extremo. El asunto est¨¢ ahora en manos de la Comisi¨®n y del Gobierno h¨²ngaro y no me cabe duda de que el asunto se resolver¨¢ sin la intervenci¨®n de otras instituciones", como el Parlamento o el Consejo (los Gobiernos de la Uni¨®n). El art¨ªculo 7 requiere una s¨®lida mayor¨ªa de Gobiernos dispuesta a colocar a uno entre ellos contra las cuerdas. "Aunque el art¨ªculo 7 no se llegara a aplicar, el solo hecho de que llegara a aceptarse ser¨ªa un golpe tremendo para Hungr¨ªa", comenta una fuente comunitaria.